Capítulo 18

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Louis

Viernes 22 de Noviembre, 2013.

La mano de Harry sujetando la mía es lo único que logra calmarme un poco.

Muevo mi pierna derecha arriba y abajo por la ansiedad, pero me veo interrumpido cuando mamá aparece frente a nosotros.

–Louis, ya puedes pasar —dice insegura—, solo si quieres hacerlo.

Me pongo de pie y miro a Harry, quien asiente insitandome a que lo haga.

Miro a mi al rededor y me siento un poco más tranquilo y seguro al no ver a mi padre imaginario por ninguna parte de la sala de espera.

–Estaré aquí hasta que salgas —dice Harry amablemente.
–Gracias, amor.

Me da un beso en la mejilla y por fin reúno el valor suficiente para comenzar a caminar.

Habitación 318.

Abro la puerta y me encuentro a mi hermana acostada en la cama y conectada a algunos aparatos.

Me acerco a ella después de cerrar la puerta. Me mira y sonríe débilmente con los ojos apenas abiertos.

–¿Cómo te sientes? —pregunto en voz baja.
–No sé, físicamente no muy bien —admite—, emocionalmente un poco mejor ahora que estás aquí.

Tengo unas inmensas ganas de abrazarla. Siento la necesidad de protegerla y hacerla sentir segura.

–Te extrañé mucho —dice con una sonrisa.
–Y yo a ti.
–Ya quería verte.
–Mamá no me dejaba saber nada de ustedes.
–Solo trataba de protegernos a todos.

Miro su muñeca izquierda vendada y unos cuánto cortes un poco más arriba de la venda.

Siento que me falta el aire al verla así.

–No entiendo cómo —continúo—, si sólo me hacía preocuparme más.
–No te molestes con ella, Louis, lo importante es que tal vez ahora podamos vernos más seguido.

Sonríe de nuevo y mi boca actúa antes de que mi mente pueda procesar lo que digo.

–¿Por qué? —pregunto en un hilo de voz tomando su mano.
–Eso no... No es tan fácil de responder como crees.

Desvía la mirada al techo y se acomoda las puntillas nasales que le brindan oxígeno.

–Es que no lo entiendo —digo al borde del llanto.
–¿Qué quieres entender? —pregunta con algo de frustración en su voz— Sólo llega un punto en que nada es suficiente y te sientes tan mierda e incapaz de lograr algo que parece más sencillo terminar con todo.

Escucharla hablar así me parece increíble. No la juzgo, porque solo ella sabe todo lo que ha pasado y me odio por eso.

Me odio por no haber estado con ella cuando más lo necesitaba, por no haber sido el hermano mayor que tuve que haber sido, por no haberla aconsejado o por lo menos escuchado para que no cargará con tanta mierda ella sola.

–Perdóname —digo comenzando a llorar—. En serio lamento no haberte ayudado cuando me necesitabas.
–No fue tu culpa, Lou...
–Sí, lo fue —la interrumpo—. Lo fue porque si tan solo te hubiese escuchado, si no hubiera sido por mi estúpida enfermedad.

Niega levemente y estoy apunto de continuar hasta que se adelanta a hablar ella.

–¡Es que yo estaba mal mucho antes de que te detectarán la esquizofrenia!

La miro confundido pero supongo que mi expresión es la que la hace continuar.

–¿De qué hablas?
–Yo ya me sentía mal porque me molestaban en la escuela, me sentía muy sola y todo fue antes de que supiéramos que estabas enfermo.

Always In My Heart ≈Yours Sincerely, Harry≈ [2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora