El Barman: Obsesivo

Final

Kate

-Me gusta como mueve sus dedos- Stef se deleita con Rob tocando el piano-. ¿Te imaginas esos dedos tocando tu clítoris?- suelta de repente sin vergüenza alguna.

Me ahogo con mi bebida.

-Stef- abro la boca como un pez.

-¿Qué?- se encoge de hombros jugando con la pajilla de su vaso.

-Por dios Stef- me echo a reír cubriendo mi boca con la mano.

-Sólo imagina lo que pueden hacer estos hombres sexys en la cama . . . -Stef me mira, aprieta sus labios- lo siento, quito a Jay de la ecuación- me dice ladeando su cabeza hacía mi hombro en una disculpa.

-Ok vale, creo que esta bebida te esta cayendo muy mal- aparto el vaso de ella.

Alex aparece con una bandeja de chupitos pedido por Stef.

-¿Cómo va la ronda?.

-Excelente- canturrea feliz Stef.

-Oh por dios, Alex mejor retira los chupitos, Stef ya esta ebria.

Alex asiente lentamente.

-No, ni hablar, no estoy ebria del todo, aun no- asegura mi amiga.

-Yo creo que si.

Alex se reí de lado aun con la bandeja en la mano. 

-Nop, ni un poco, Kate, por favor. . .- pestañea suplicándome, finalmente hago un gesto accediendo a su pedido, ella aplaude como una niña- gracias Alex.

-De nada.

-Por cierto, Kate, Jay quiere que lo vayas a ver un momento- miré a Stef, no quiero dejarla sola-. Tranquila le haré compañía- me dice leyendo mi mente.

-Vale, de acuerdo- me levanto mi asiento.

Se que Alex no dejará que Stef se pase de la raya.

Alex toma asiento junto a Stef, ella bebe el primer chupito de un solo golpe, hace una mueca al sentir el alcohol tocar fondo en su garganta.

-Kate esta preocupada por ti.

-Lo sé, ella siempre se preocupa por mi, como yo por ella- coge el segundo chupito que se supone era para Kate- somo uña y carne desde la preparatoria.

-Déjame adivinar tú eras la chica divertida y ella el ratón de biblioteca.

-La molestaban por todo, por ser la primera en los exámenes, por llevar gafas, en fin.

-Pero te hiciste amiga de ella.

-No soy buena para juzgar a las personas por lo que son, para mi no hay un lado malo o bueno, feo o lindo, me da igual- se encoge de hombros y busca con la mirada entre la gente, algo que ha estado haciendo desde que llegó-. Las porristas la estaban molestando y yo intervine pateando sus traseros, así de simple, desde entonces somos amigas.

Alex esboza una sonrisa interna, cruza una pierna encima de otra en un gesto elegante, Rob y Sam trabajan atendiendo la barra. Observa que Stef vuelve a hacer lo mismo, mirar por encima de entre las personas, como si estuviera buscando algo o. . . alguien.

-Romeo no esta.

Ella lo mira abriendo sus ojos color miel.

-¿Cómo . . .

Alex sonríe por lo bajo.

-Eres parte del club de fans de Romeo, te he visto mirarlo en más de una ocasión, normalmente te sientas aquí y lo siguen con la mirada como si no existiera nadie más en este mundo- expresa con esa mirada azul en sus ojos.