uno

733 133 42
                                    

Xiao Zhan y Zhuo Cheng caminaban hacía sus hogares con sus mochilas colgando de los hombros, justo después de clases.

—¿Terminaste el experimento de química? —habló Zhuo Cheng.

—Algo así, Haikuan casi hace que el matraz me explote en la cara. —rió suavemente.

—Haikuan es caliente.

—¿Vas a decir eso cada vez que lo menciono? Pareces grabadora.

—¿Lo dije en voz alta?

—Zhuo Cheng, te la pasas gritando a los cuatro vientos esas tres palabras.

—Lo siento, lo siento. Es que míralo, es guapísimo, no puedo evitarlo.

—Ajá, ¿y qué pasó con el chico que me mencionaste?

—Él ya no es caliente. —hizo un mohín.

—Mmh, ¿lo dices porque aclaró su heterosexualidad? —rió.

—¡No!... Tal vez un poco. Bueno, era lindo, pero Haikuan me gusta enserio, mucho, mucho. —dijo sonriendo inconscientemente. —¿Y a ti? ¿No te gusta nadie?

—No, nadie.

—¿En verdad?

—Nadie.

—Uhm... ¡Oh! Hay rumores de que le gustas a Yibo.

Zhan dejó salir una ruidosa carcajada.

—¿De qué te ríes?

—Es una tontería, no le gusto.

—¿Y cómo sabes?

—Pues lo sé y ya, es imposible. Somos amigos, ni siquiera es gay o bi.

—¿Él te ha dicho eso?

—Bueno, no exactamente, pero-

—Nada, si él no te lo ha dicho entonces no puedes estar seguro. ¡Además hacen una pareja demasiado linda juntos!

—No Zhuo Cheng, no le gusto. Además, no me gustan los hombres.

—Sí le gustas, se nota. ¿Haz visto cómo te mira?

—Deja de decir eso, ¿cómo podría gustarle?

—Si no le gustaras no te acompañaría hasta tu casa siendo que la suya está en dirección contraria.

—Ni siquiera lo hizo hoy, tonto.

—Mira, justo viene corriendo. —dijo sonriendo.

Zhan giró su cabeza, encontrándose a Yibo corriendo como si fuera un maratón, hacia él.

—Bueno, me voy Zhan. —se fue rápidamente por la calle siguiente.

—¡Zhuo Cheng! ¡Regresa! —el castaño se encontraba nervioso, su amigo lo había puesto a pensar con sus palabras, quería descartar esa idea de su mente.

—Zhan-ge, te fuiste muy rápido. —dijo Yibo jadeando. Zhan ahogó un grito por la sorpresa.

—Ehm... Lo siento, creí que ya te habías ido.

—No importa, vamos. —Yibo comenzó a caminar hasta llegar junto al más alto.

Estuvieron algunos minutos en silencio, algo incómodo, puesto que Zhan solía comenzar las conversaciones, y en ese momento sólo podía pensar en lo que había dicho Zhuo Cheng.

—Yibo... Zhuo Cheng me acaba de decir algo muy raro.

—¿Ah sí? ¿Qué cosa?

—Dijo que gustabas de mí en secreto. —rió torpemente. —Vaya estupidez, ¿cierto?

—¿Ah? No sabía que era un secreto.

—¿Qué?

—Creí que todo el mundo lo sabía.

—¿Te gusto? —dijo incrédulo, viéndole a los ojos.

—Demasiado, es que, ¿te haz visto en un espejo? Eres precioso. —regresó su vista al camino.

—Yibo, sabes que no me gustan los hombres...

—Zhan-ge, cálmate, no te estoy pidiendo nada. —volvió a mirarlo. —Dios, ¿he logrado sonrojarte? ¡Te ves tan tierno!

—¡N-no! ¡Es el sol! Sí, el sol. —tomó a Yibo de los hombros y lo giró para que viera el lado donde se empezaba a esconder la enorme estrella. —¿Ves?

—Zhan-ge, ¿de qué estas habla- —cuando giró de nuevo se encontró con la figura de Xiao Zhan alejándose a pasos veloces.

blush ✦ yizhanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora