blush ✦ yizhan

trece

Yibo y Zhan se encontraban atrás de la institución, dónde nadie los podía ver besándose.

El pelinegro sostenía entre sus brazos la delgada cintura del castaño mientras movía lentamente sus labios sobre los contrarios. Se sentía en el paraíso totalmente, la boca de Zhan era dulce, tal vez era su imaginación, pero sabía ligeramente a vainilla.

Y adoraba las reacciones de su cuerpo cuando daba leves apretones en su sensible cintura. Mientras tanto el mayor sólo se aferraba a los hombros de Yibo, intentando no caer al suelo gracias a su repentino tambaleo de sus piernas. Porque ese contacto no era igual a los cortos besitos que compartían algunas veces. Podía percibir un sabor mentolado en el beso que Yibo le proporcionaba.

Los labios de Yibo creaban una danza sobre los suyos, y él no se creía capaz de hacer lo mismo. Ambos dejaban escapar pequeños jadeos y suspiro, que evitaban el silencio total del solitario lugar.

Decidido a hacer un esfuerzo para seguir el ritmo del beso, Zhan movió ligeramente sus labios provocando un choque de dientes.

Avergonzado, logró alejarse un par de centímetros. Muchas preguntas comenzaron a llegar a su cabeza.

¿Y si besaba mal?

¿Y si tenía mal aliento?

¿Y si a Yibo le daba asco?

¿Y si-

—Yibo, y-yo- —fue interrumpido por el pelinegro.

—Zhan-ge... —por otro lado, Yibo había notado lo tenso que estaba el castaño, por lo que decidió separarse. —No quiero que te sientas obligado a hacer esto, ¿de acuerdo? Si no te gusta sólo tienes que decirme. —le sonrió con calma y apartó sus manos de la cintura del mayor para que éste no se sintiera acorralado. Prefiriendo acariciar un poco una de sus mejillas.

Zhan caía un poco más por lo considerado que era Yibo con él, siempre había sido así, pero ahora lo veía de una manera distinta.

—Lo siento. —bajó la mirada. —No sé besar.

—Zhan-ge, cariño, yo tampoco sé besar. —acarició la mejilla del castaño haciéndole levantar la mirada.

—A mí me gusta como besas. —dijo sonrojado, viéndolo a los ojos mientras jugaba un poco con el cuello de la camisa del pelinegro. Logrando que las mejillas de Yibo se colorearan de un tenue rosado.

—No es como si fuera experto, Zhan-ge. —volvió a la tarea de besar los labios contrarios, intentando que el castaño le correspondiera de la misma manera.

Después de unos momentos, Zhan volvió a hacer el intento de seguir el beso, chocando nuevamente sus dientes.

Repetidas veces sus dientes chocaron, incluso Zhan mordió por accidente el labio superior de Yibo un par de veces, sin embargo el menor no dejó que se alejase hasta que se quedaron sin aire.

—Besas genial, Zhan-ge.

—Tonto, no te burles. —Zhan giró los ojos y se cruzó de brazos,

—No me estoy burlando, no te enojes. —sonrió, buscando su mirada de nuevo. —Me gusta besarte, por eso lo hago. No espero un beso de película, me gustas, y el hecho de poder besar a la persona que me gusta es suficiente para que sea el beso perfecto.

Y sí, Zhan se sonrojó.