Fiesta de boda
Mis Padres me habían echo venir a la boda de uno de sus amigos empresarios puesto a que todos los hijos e hijas de sus socios estarían aquí, soy la típica chica que todos quieren ser como yo, me dicen muchos elogios día a día. Otros me tienen envidia y otros simplemente quien estar conmigo por una cara bonita.
A pesar de todo siempre e sido solitaria, se preguntaran porque pues
Flashback
)(Escuela primaria)(
Me encontraba sentada en una gran mesa junto a otro grupo de niñas todas teníamos 8 años, yo miraba a la nada mientras las escuchaba a ellas susurrar.
—Miren es Tn, es hermosa quiero ser como ella.
—Yo quiero ser su amiga, así todos verán que somos lindas iguales.
—Seria muy genial, así todos tendrán envidia.
Fin del Flachback
Pues si, desde pequeña todas las personas que tuve a mi alrededor solo era porque era linda o venía de una familia extremadamente millonaria, aveces pensaba que era mejor empezar una vida desde cero lejos de mi familia y empezar a trabajar pero para eso aún necesitaba terminar el Colegio y aún necesitaba a mi familia para eso.
—Ah, estoy muy agotada.
Mi Madre dejo su bolso de piel de cocodrilo extremadamente caro encima de la mesa de cristal del salón de alante de la casa.
—Tomare un baño.
Y ese fue mi Padre que sin mas ni menos se fue sin dirigir la mirada en mi Madre, ver cuán distanciados estaban mis Padres eso me partía el corazón, aún no se separaban porque no querían que las personas me vieran como si fuera una chica sin la atención de sus Padres, ellos vivían pensando en mi todo el tiempo en vez de ser felices.
—Hija que tal la pasaste, hiciste amigas.
Pregunto entusiasmada, ella veía como cada vez yo me cerraba en un capullo y era prácticamente una persona antisocial
suspire
—Sola estoy mejor.
Sonreí para que no se preocupara por mi pero teniendo una Madre como ella era imposible
—Cariño, ven aquí.
Dio leves palmaditas en su lado vacío del sofá para que me sentada junto a ella y eso hice
—Que te sucede cada vez te cierras mas a las personas.
—Pues nada estoy estupenda.
Me levante dispuesta a salir de esta conversación
—Saldre a dar una vuelta.
—Bien pero llama a tus amigos, no quiero que andes sola por la noche.
—Mamá, no tengo amigos y se cuidarme bien, descuida.
Bese su frente para transmitirle algo de tranquilidad, luego tome las llaves de la casa y el abrigo de pelo que traía antes puesto, pues había frío.
No tome el auto para andar por ahí, pues maldeci cuando me di cuenta que aún llevaba la ropa de la boda y los tacones, me dolían los pies pues ya iba unas cuántas calles lejos de casa. Saque el teléfono del abrigo para llamar al chófer a que venga por mi o pedir un taxi.
— Ashh pues solo a mi me puede ocurrir, no.
Mi teléfono estaba sin batería :(
Cuando levante la vista vi que estaba en frente de una fiesta, un auto paso por mi lado casi me atropella por lo que me tuve que echar a un lado rápido. Dentro de el venían dos chicas, una rubia y la otra tenía el pelo castaño, se podría decir que eran unas barbies junto como me decían en mi Colegio. Junto a ellas habían tres chicos igual de guapos, uno tenía el pelo de un color cenizo parecía ser la alegría del grupo, otro su pelo lucía un rojo vino, era el tipo de chico que se te mojaban las bragas con una mirada se podía decir que era el rompe corazones del Colegio. Pero entre toda su diversión había uno de ellos que al parecer no lo disfrutaba.
Me refería a un chico que iba en la parte de atrás del auto, tenía su semblante serio y una mirada fría. Era como si todo a su alrededor fuera molesto, al parecer había sido arrastrado. Había venido en contra de su voluntad
—Chica quieres moverte.
Salí de mi trance al ver como otro auto llegaba, era una chica y sonaba el claxon para que me apartara de la calle, pues si me había quedado quieta mirando a aquel chico que con solo mirarlo daba un escalofrío tremendo.
—Lo siento.
Me aparte y cuando paso en mi frente con la rueda del auto me mojo toda por un charco de agua que estaba a unos pasos de mi
Cerre los ojos y trague en seco, esto no me podía estar pasando, no hoy
—Bien.
Me quite el abrigo de pelo y lo lance a un bote de basura que estaba cerca. Pues si mi Madre estuviera aquí me daría el sermón de que es un abrigo muy caro para ser desechado como si fuera un pedazo de un objeto sin valor.
Con el frío colandose por todo mi cuerpo me vi obligada a entrar a aquella fiesta que me había quedado observando desde hace unos cuántos minutos.
La música desde afuera ya retumbaba en mis oídos pero al estar mas cerca pense que mis oídos iban a explotar, pues no estaba acostumbrada a este tipo de ambiente.
—Identificación.
Dijo un chico al parecer de mi edad en la entrada de la casa
—Qué?
—Era broma, solo quiero saber si eres de mi Colegio, sino lo eres creo que no puedes entrar.
—Bueno pues no creo que lo sea, si así fuera ya me habrías reconocido.
Dije mirando la parte de en frente de la casa que tenia en grande "KIM" seguro era el apellido de la familia, no me iba a sorprender si el hijo o hija de los dueños de la casa eran tipo aprovechar que mis Padres no estan en casa y hagamos lo que mejor sabemos hacer.
Al escuchar la risa del chico me hizo volver a la realidad
—Te crees mucho sabes, o yo me equivoco y eres una especie de celebridad.
—Supongo que no somos del mismo Colegio, y no. No me creo para serte sincera estoy cansada de las personas que me rodean, que creen que soy lo mejor del mundo y me tienen en un maldito altar, prácticamente si para ellos soy una celebridad.
—Wow wow habla despacio.
Reímos
—Bien, puedes entrar, eres la Reina de la noche me caes bien.
—Te odio no soy una Reina.
Lo último que escuche al entrar fue su risa bien contagiosa
