Antinatural [Bnior]

4

Jaebeom se sentía ridículo, era un hombre ridículo.

Tenia las piernas entumecidas por estar tanto tiempo sentado en ese banco poco cómodo, pero no podía perder su lugar en la barra del lugar, jinyoung había decidido quedarse todo su turno, detrás de esta. Apenas lo había girado a ver y enviaba a sus compañeros cuando pedía alguna bebida o botana para comer.

Jaebeom había perdido la cuenta de cuantas veces había intentado hablar con jinyoung, pero este no le respondía a ninguna pregunta, sus labios permanecían sellados en una fina línea, tensa y recta. Él se había rendido, el alcohol hacia que todo a su alrededor comenzara a dar vueltas, necesitaba refrescarse y salir de ese lugar.

Ese hombre era duro, pero no se rendiría, jaebeom lo necesitaba en su vida, sentía que ese hombre era oxigeno fresco que ansiaba desesperadamente.

Jaebeom se alejo a paso tembloroso, chocando con algunas personas en su camino al baño. Estuvo aliviado cuando la música se escuchaba lejana en el interior, observo su reflejo en el espejo, no se veía mal, pero tenía la mirada desenfocada.

Alguien mas entro al baño, jaebeom estuvo a punto de gruñir una maldición, pero cuando lo vio entrar al baño, pero el no se había percatado de su presencia hasta que levanto su mirada, rápidamente, una arruga aprecio entre los ojos, intento salir, pero jaebeom fue mas rápido, avanzando rápidamente hacia él, tomándolo del brazo, detuvo sus movimientos.

-Es bueno volver a verte, jinyoung- dijo jaebeom, se inclino ligeramente hacia adelante, ignorando el ligero gruñido del otro chico- creo no nos han presentado adecuadamente, soy jaebeom.

Jinyoung dio un tirón, pero no logro soltarse.

-Suéltame, ¿Debería gritar para que lo hagas?

-Puedes gritar todo lo que quiera, pero ¿no sería vergonzoso? – dijo jaebeom- un alfa gritando para que lo dejen salir. Un alfa que no se puede cuidar solo, ¿no es por eso que contratan alfas en este lugar? Para evitar esta clase de escenas tan vergonzosas entre los clientes.

El rostro de jinyoung enrojeció hasta las orejas, levanto uno de sus brazos, dispuesto a darle un golpe en la mandíbula, pero no lo logro, jaebeom detuvo el brazo en el aire, ambos hombres comenzaron a forcejear hasta que la espalda de jaebeom choco contra una de las paredes del baño, jaebeom agradecía que ese baño solo para una persona, el chillido que abandono su garganta fue poco masculino.

-Wow, no espere que esto escalara tan rápido- murmuro jaebeom, la vergüenza quemaba en su pecho- haciéndome chillar de esa manera, al menos, invítame a un vaso de alcohol-

-Realmente, quiero lastimarte-

-Y yo quiero hacerte tantas cosas que no puedo decir-respondió jaebeom, se inclino hacia adelante- estoy seguro que tus chillidos se escuchan mejores que los míos.

Para la sorpresa de jaebeom, el aroma de jinyoung se condenso en el lugar. En ese preciso momento, jaebeom disfruto de los ligeros matices que se escondían en su aroma, entre dulce, amargo y picante, su cuerpo comenzó a reaccionar, su piel se erizaba y su respiración comenzó agitarse, él sabia que jinyoung estaba como igual, dejándose envolver por su aroma.

¿Desde cuando ese hombre bajaba su guardia?

-Ten una cita conmigo y te soltare- dijo jaebeom, sus dedos se apretaban alrededor del brazo que se tensaba debajo de su toque-

-Eso es chantaje, jaebeom-

Él solo se encogió de hombros.

-No podemos, no es natural que nosotros salgamos en una...cita-

-No veo nadie más aquí para juzgarnos- respondió jaebeom, rompiendo ese mínimo espacio que separaban sus cuerpos- solo estamos nosotros dos para hacerlo-

Jinyoung abrió la boca, pero no dijo nada, parecía un pez fuera del agua antes de apretar sus labios en una fina línea, tiro de sus brazos, zafándose del agarre. Sus hombros de enderezaron, ambos a la misma altura, jinyoung medito por unos segundos sus palabras.

-Solo una cita y desaparecerás- dijo

-Tienes mi palabra- levantando su mano derecha- solo una cita y no me volverá a ver-

Jinyoung extendió la mano y jaebeom estrecho su mano, suave y delicada, ambos sellaron el trato. Después de eso, jinyoung salió del baño, dejando atrás, a un hombre sonriente y satisfecho.