VALESKA ~ Ivar the Boneless ~

XIII

Valeska se encontraba entretenida peinando el cabello de su hermano Harald, desde que tenía memoria había sido la encargada de peinarlo y trenzarlo, y aunque no era la gran cosa, era una pequeña actividad que disfrutaba. Continuo con su tarea perdida en sus pensamientos, ajena al ruido de las personas alrededor, recordando la conversación que había tenido con Ivar esa misma mañana.

Había amanecido hacia rato, pero Valeska y Ivar seguían metidos en su pequeña burbuja, cubiertos a los ojos exteriores por la tienda en la que estaban, y a pesar de no haber dormido mucho a ninguno de los dos parecía molestarles, Valeska se enderezó sentándose en la cama para buscar sus ropas, sintió una mano recorrer y acariciar su espalda con delicadeza y su cuerpo rápidamente reacciono, sintiendo un escalofrió recorrerla. 

-¿Cuando le dirás  a Harald y Halfdan de esto?- Pregunto Ivar perdido en la piel de la espalda de Valeska. 

-¿Quieres morir?-Pregunto burlona, con la voz cargada de sarcasmo, se levanto buscando su demás ropa y continuo vistiéndose bajo la atenta mirada del Deshuesado.

-No puede ser tan malo.- hizo una pausa pensativo.- ya quiero decirle a todos que ahora estas conmigo.

-Esto tiene que ver con demostrar algo a tus hermanos?- se acerco hasta la cama para volver a besarlo.

-No.- Valeska lo miro inclinando la cabeza a un lado y conteniendo la risa.- si, demostrarles que estas conmigo y si te tocan son hombres muertos. 

Valeska soltó una risa, sabia que Ivar seria posesivo pero no que lo admitiera fue algo que no esperaba.- Buscare la manera de decirle a mis hermanos, me voy.- se levanto dejando al Deshuesado solo en la cama, pero con una sonrisa de victoria en el rostro. 

Cuando escucho a sus hermanos empezar a hablar se alejo de sus pensamiento y puso atención a lo que decían, Halfdan miraba con una cara de burla a su hermano, y este por su lado, tenía la mirada perdida en la pareja de enamorados que estaban un poco alejados pero justamente frente a ellos, Valeska dirigió su mirada al lugar y vio a la princesa Ellisif con su esposo. 

-De acuerdo, admito que fui un tonto al no matarla.- hablo Harald, soltando un suspiro de fastidio. 

-Fuiste un tonto al pensar que ella te esperaría por siempre.- hablo Valeska terminando la trenza del castaño y sentándose a su lado.

-Fuiste un tonto al pensar que te amaba.- menciono Halfdan con la vista atenta a la pareja, Valeska le lanzo una mala mirada pero el rubio no le dio importancia. 

 -¿Como pudo casarse con ese don nadie?-el enojo en la voz de Harald era obvio, y no era para mas, también a sus hermanos les molestaba la situación. 

-Talvez lo ame. Y si lo ama... es alguien.- Harald y Valeska despegaron la mirada de la princesa para mirar a Halfdan, sorprendidos por los que acababa de decir. 

-¿Cuando te volviste tan sabio, hermano?- pregunto Harald.

-Talvez no lo hayas notado, pero tampoco estoy casado.- Valeska soltó una risa haciendo que el rubio la mirara mal.-¿sabes por qué? No entiendo a las mujeres. Las mujeres son volubles. Olvídala. 

-¿Saben cual es su problema?-hablo Valeska llamando la atención de los dos hombres.- Tú.- apunto a Harald.- eres un tonto cuando te enamoras. Y tú.- apunto a Halfdan.- alejas a cualquier persona que tenga intención de acercarse a ti. 

Harald rodo los ojos y se cruzo de brazos, la niña tenía razón y le molestaba, Halfdan alzo los hombres restándole importancia.  Continuaron mirando a la pareja a la lejanía, cada uno metido en sus pensamientos, Valeska iba a volver a hablar pero Harald se levanto repentinamente y camino hacia donde estaba la princesa, sus dos hermanos se quedaron donde estaban, ambos atentos y sin perder de vista a su hermano.