CAPITULO 7

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¿Qué es lo que estaba pasando?

¿Por qué estaba ocurriendo eso?

¿Qué era lo que esa mujer intentaba hacer?

No entendía, por más que lo intentaba... Mikoto no podía entender el actuar de esa mujer que por tanto tiempo había sido su amiga.

—¿Qué es lo que intentas decir? —no pudo asimilar sus palabras, no... —¡Responde Tsunade! ¡¿Qué es lo que intentas decir?!

No era que no podía asimilarlo... no quería hacerlo.

El ver a Tsunade de esa manera tan... derrotada, esa vista no podía ser real.

Desde que era una niña siempre la había admirado, era conocida por ser una mujer fuerte, que no expresaba tan fácilmente sus emociones y siempre luchaba por sus ideales, con una mirada decidida y firme.

Pero ahora...

Sus ojos rojos e hinchados, la cabeza baja y la expresión tan demacrada.

No...

Esa no era la Tsunade que conocía.

La Tsunade a la que tanta admiración profesaba.

—Ya te lo dije, ¿verdad? —su voz era ronca, intentaba que las lágrimas se alejaran.

>>Tienen que alejarlo de aquí, es un peligro si lo tienen por más tiempo.

—Pero... ¿por qué? —se dejó caer en el sofá que se encontraba frente a la anciana mujer —acaso... —endureció la mirada —¿Te descubrieron?

El silencio solo podía significar una cosa, pero aun así quiso escucharlo de su propia boca.

—¿Es eso?... ¿Te descubrieron?

Simplemente asintió.

Mikoto apoyó el resto de su cuerpo en el espaldar del sillón y cerró los ojos lentamente.

—Esto no puede estar pasando.

Aunque sabía que eso no sería para siempre... el plan tenia fallos.

.

Cinco meses después del ataque de Kaguya, el ataque en el que perdió a su mejor amiga, Tsunade los visitó.

Tuvieron una larga platica, en la que el plan de Tsunade se hizo relucir.

Gracias a que Kaguya tenía cierto aprecio a las habilidades de Tsunade, ésta le permitió vivir con la condición de que le jurara lealtad.

La mujer no tenía muchas opciones, por lo que tuvo que acceder, no podía morir... si su existencia podía ganarles un poco de tiempo, lo haría.

Por esa razón, durante los primeros meses logró ganar la confianza de Kaguya, y cuando al fin pudo moverse libremente, sin vigilancia, fue con los Uchiha.

Les informaba todo lo que podía, y les daba consejos de como despistar a los buscadores de Kaguya cuando estos estuvieran cerca.

Y los Uchiha la obedecían en todo lo que decía, lo harían si de esa manera Naruto se mantuviera con ellos.

Para protegerlo.

Después de todo esa era la misión que se les había encomendado, la misión que cargaba su clan desde hace tantas generaciones.

Y por ella darían incluso su vida.

Mikoto lo sabía... más que una misión, para ella era un pago a su amiga, le daría el amor a esa criatura que merecía.

LUNA DE SANGRE (SASUNARU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora