LUNA DE SANGRE (SASUNARU)

CAPITULO 5

— Es mentira... ¿verdad?

¡No!

No podía ser verdad, se negaba a creer que todo eso realmente estuviera pasando. En su mente eso era nada más que un sueño, un terrible y espantoso sueño.

El hecho que su hermano, la persona a la que se juró proteger sin importar el costo, tuviera que afrontar un destino tan cruel.

Lo que tenía que hacer, aun no le quedaba muy claro, ¿Cómo se supone que lucharían contra esa mujer?

Esa mujer.

Con solo escuchar su nombre, podía sentir como su piel se erizaba y un terrible presentimiento lo invadía.

El destino de su hermano, el que se supone que, en un futuro, y por lo que la mujer que los acompañaba trataba de decir, no era tan lejano tenía que enfrentarse a ella junto al pequeño niño que habían acogido.

Pero, las mismas preguntas rondaron en su mente.

¿Cómo lo harían?

¿Estarían solos?

¿Tenían alguna oportunidad siquiera?

Ya que su primo más cercano, Shisui había muerto a manos de esa mujer.

Más preguntas de esa naturaleza resonaban en su cabeza, pero había una que sobresalía, una que de verdad quería conocer a respuesta.

¿A qué cosa realmente se enfrentaban?

— No... — las palabras de su padre lo devolvieron a la realidad — todo lo que te dijimos hasta ahora es verdad.

Ante aquella respuesta, Itachi simplemente bajo la cabeza, intentando comprender toda la información que le habían dado.

Todo estuvo en silencio por unos minutos, hasta que al fin se decidió comenzar su ronda de preguntas, con una meta clara.

Todas sus dudas tenían que ser aclaradas esa noche... o al menos la mayoría de ellas.

— Pero... ¿no dijeron que esa mujer tiene un poder increíblemente grande?... y al parecer, este va en aumento con el tiempo ¿o me equivoco?

Tsunade observó perpleja al pequeño, ya Mikoto le había dicho que el análisis de su hijo mayor era superior a la de un niño de su edad, pero jamás se esperó que fuera tan alto.

— Si es así... — el pequeño prosiguió — ¿Cómo se supone que Sasuke se enfrente a ella? Quiero decir... somos simples humanos y... Kaguya parece un dios más que otra cosa ¿cómo lo hará?

La sorpresa de los mayores era demasiado grande, Mikoto solo pudo soltar una dulce sonrisa, creía que ya conocía los límites de su hijo, pero al parecer, éste continuaría sorprendiéndola.

— Bien... creo que lo primero que debemos hacer es contarte todo desde el principio — Fugaku soltó un suspiro cansado — Itachi... eres un niño muy inteligente, cuando seas adulto, ten por seguro que lo serás aún más... Lo que te diré, se supone que debía hacerlo cuando fueras un poco mayor, para que pudieras entenderlo, error mío... te subestime demasiado.

— Papá... — Itachi se encontraba sorprendido ante las palabras de su padre, y al notar el deje de orgullo en la voz del mayor no pudo evitar sentirse feliz.

— Como ya tu madre te lo ha explicado... los Uchiha somos descendientes del primogénito de Kaguya... Kurama. Nuestro predecesor era su segundo hijo, y fue otorgado con una de las Armas Celestiales, o como se la conoce actualmente "El arco de Artemisa".