Capítulo #6

2.4K 190 25
                                    

Podía sentir su fuerte erección por encima de la tela de su pantalón, que se rozaba sin un gramo de indiferencia y hacia que fuera una tortura total el que aún estuviesen vestidos. Sakura no desaprovechó la oportunidad y tocó el pecho de Sasuke abriéndole el chaleco y la camisa sacándole un par de botones volando.

Sasuke gimió cuando las suaves manos de sus esposa se enmiscuyeron entre su piel desnuda. Se suponía que iban a cenar pero quería pasar de una buena vez al postre. Aprovecho que Sakura aún tenía un brazo en su cuello y afianzó su mano por debajo de sus muslos para poder cargarla y llevarla a su dormitorio.

La dejo en el suelo un momento buscando el cierre del vestido pero no se esperó que Sakura no lo dejara hacerlo. Levantó una ceja, tratando de descubrir que pasaba por la mente de su ojijade  y se sorprendió cuando ella camino hacia la pared y no hacía la cama.

Aun no entendía que estaba pasando pero lo cierto era que su pantalón cada vez se hacía más estrecho así que lo comenzó a desabrochar pero Sakura no lo permitió. Se acercó a él rápidamente le tomo la mano en hizo que la siguiera a la pared. Aun seguía sin comprender que estaba pasando por su cabeza pero sea lo que ella quisiese hacer esperaba que fuera pronto o la terminaría tumbando en el suelo. No pensaria ni   siquiera si la tomaría en una posición comoda pero estaba apunto de perder los estribos desde que entró por la puerta del apartamento y si seguía dándole largas al asunto, no se iba a ser responsable por sus actos.

Quería que fuera bueno para ella pero Sakura no estaba poniendo de su parte. Ella seguía mirandolo con un sonrisa seductora, besandolo como solo ella podía provocarlo y tocandolo de una manera casi enloquecedora.

No lo pensó, ya no. La tomo de la cintura  he hizo que ella le rodiara con las piernas. La pared tenía que servir para algo más que para su aburrida función de dividir estancias. No parecía cómoda pero no pensaba darle más largas al asunto, solo quería hundirse en el calor de su centro y perder la noción del tiempo en lo profundo de su ser.

—¿Que quieres de mí Sakura?—le pregunto en medio de jadeos. Si quería que le hiciese el amor en la cama, este era un buen momento para hablar más la mirada de Sakura no pedía eso. Sus perfectos ojos verdes se habían oscurecido por la pasión y sus labios entre abiertos eran una total delicia.

—¡Hazme el amor aquí!—Grito mientras ella acudía a su encuentro y se frotaba con sus sensible entrepierna.

Sus palabras fueron un tirón a su abultada entrepierna y ya no lo pensó más. Su experta boca procedió a llenar de besos esa parte expuesta de Sakura. Su cuello, sus hombros, el nacimiento de sus pechos. Ella era sencillamente perfecta y nunca se cansaría de ella. Las manos ágiles de Sakura se metieron entre lo dos, desabrochando por fin su bragueta y dejando que su miembro saliera de su escondite.

Un suspiro brotó de los mullidos labios de Sasuke que bajo con los dientes la tela roja que cubría sus pechos. Ambos saltaron gustosos por la atención y el no se pudo contener más. Chupo con fuerza sus pezones y lo mordisquio como si de un banquete se tratara. Amaba su olor, amaba su suavidad.

Sólo falto un movimiento para que Sasuke la invadiera por completo y la sensaciones explotaran como fuegos artificiales. Por fin podía ver a un Sasuke fuera de sí mismo haciéndole el amor en una superficie distinta a un futón o una cama y no es que fuera malo pero siempre había querido probar más.

Las embestidas de Sasuke eran rudas, no había ni un poco de suavidad en ellas más no lo necesitaba. El ardor en su vientre le hacía consciente que estaba lo suficientemente excitada para aguantar la intencidad de su esposo y no pensaba quejarse. Quería mas, siempre quería más. Sus uñas se hundieron en sus hombros, era consciente que no iba a aguantar mucho y así inclinó su rostro para apretar sus labios. En un beso totalmente desenfrenado.

—Creo que estoy siendo demaciado rudo—pronuncio Sasuke con la respiración entre cortada y sin detenerse en su asalto. Solo temia lastimarla.

Sakura gimió en respuesta absorta en la sensación que suponía tener al amor de su vida colmandola de esa manera, si eso no era una respuesta no sabia que lo sería en ese momento.

El clímax fue arrasador tanto que agradeció ser sostenida por las expertas manos de Sasuke o irremediablemete caería al suelo y Sasuke no tardó en acompañarla escondiendo su rostro entres los mechones ahora despeinados de su mujer.

Cuando por fin sus respiraciones se calmaron fueron a cenar y probaron ese vino con notas cerezosas que nunca olvidarían. Era sumamente exquisito tanto como su olor, tanto como su hermosa flor de cerezo, su Sakura. Era imposible que lo le recordase a ella y que no deseara volver a la cama hasta que el cansancio les consumiera.

.

Podía ver que las personas no estaban felices luego del anuncio a toda Konoha en el balcón de la torre del Hokage. Naruto había sido claro, el sería el Hokage suplente mientras el atendía un problema fuera de la aldea. Habían omitido que era un viaje para reponer fuerzas y que Naruto pudiera cuidar más de su salud. Desde abajo estaba reunido todo Konoha y también entre los presentes estás Sakura y su hija.

Esa mañana se le había obligado a cambiar su capa negra por una temporal e igual de bordada que la misma que cargaba Naruto. Unas llamas y unas letras en rojo hacían parte de su nueva vestimenta. Además de todas las obligaciones que está conllevaba.

Una parte de el posiblemente estuviera nervioso  más no era una emoción que le perturbara después de tanto. Naruto se acercó a él y con una sonrisa que quiso borrar de un trancazo por haberlo metido en problemas le coloco el sombrero de Hokage. Se juro que lo mataría y ya empezaba a querer hacerlo.

—Se lo que piensan—procedió viendo a su aldea—Se que muchos temen a este cambio relativo pero quiero decirles una cosa.

Naruto siempre había sido emotivo en sus discursos pero estaba verde si pensaba que con sus "lindas palabras" lloraría. ¿En qué momento se había dejado convencer?

—Yo podría mi vida en sus manos... y por lo tanto la de la aldea y se que el daría lo que fuera por mantener a cada uno de ustedes a salvo. Solo den le la oportunidad y estoy seguro que no se arrepentirán.

El discurso había empezado bien hasta que las promesas se asentaron con violencia en su estómago. ¿Esto era lo que sentía Naruto todo los días?¿Esta era la responsabilidad que llevaba en sus hombros? Cielos, no se sorprendía que necesitara de unas vacaciones. Suspiro y se dijo a si mismo que esto solo seria momentanio más de alguna manera quería demostrar que ya no era el sicópata que quería ser Hokage para vengar a su clan, si no más que nunca compartía los ideales de su actual Hokage. No por nada ese tonto ese era su mejor amigo y parte importante de su vida.

—El es el Hokage entre las sombras.

Tal y como estaba bordado en la capa que esa misa mañana había llegado a su casa y sorprendido a toda sus pequeña familia. Hasta no pudo evitar pasar por alto el brillo en los ojos de Sarada que en ese mismo instante prometió que ella también sería una gran Hokage aún que no tan temporal...

...

No creo que todos los capítulos contengan lemon, porque también hay una historia que contar pero prometo hacerlo seguido y tratar que cada encuentro sea distinto y especial.

¿Que les ha parecido?

¿Que tal el lemon?

¿Quieren más?

¿Cuánto más?

Nos vemos pronto

Besos y abrazos

Lia Diso 😏

Desde las sombras 🔥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora