Capítulo #17

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Desde la oscuridad de ese callejon, alumbrados por el foco de una ventana cubierta por una cortina pudo observar como las mejillas de Sakura se tiñeron de rojo.

—¡No te atreverias!—le expuso escandaliza por la actitud exhibicionista de su marido. No es que no quisiera pero una cosa era una oficina y otra un callejón.

—¡Tirarme el guante querida, que yo con gusto estoy dispuesto a tomarlo!—dijo con la voz ronca mordiendo el lóbulo de su pequeña  oreja.

Toda la sangre se su cuerpo  le comenzó a hervir y más al ver los excitados ojos de Sasuke que querían comercela sin esperar un minuto mas. La lluvia para ese entonces comenzó a caer más fuerte sobre ellos pero eso no le bajó el lívido a ninguno de los dos y mucho menos impidió que Sasuke la cargara como si no pesada nada.

Su espalda pego contra la pared de ladrillo mientras enlazaba sus piernas a su cintura, solo entonces se dio cuenta de su pesada respiración y de las gotas gruesas que resbalaban por su rostro. Esta era la peor locura que estaban a punto de cometer, la posición mucho menos era cómoda y ni hablar de que cargaba un pantalón.

Todo estaba en contra pero a Sasuke no parecía importarle y se preguntó por un momento si realmente era su esposo quién la tenía apresada en un callejón con la mirada cargada de deseo.
El pánico invadió su sistema un segundo, el segundo que Sasuke le tomo desabrochar su blusa roja con los dientes para después morder sus pechos por encima de la tela de encaje.

Sus dudas se disiparon, la forma que Sasuke aprovechaba esa bendita boca para besarla y morderla no lo haría cualquier desconocido. Era algo que el había aprendido en el tiempo que habían llevaban juntos, la práctica hacia al maestro y el se había vuelto un experto. Su boca sabía el punto exacto que la hacía vibrar y que consumía a fuego su vientre mientras su miembro endurecido se restregaba con su parte más sensible.

Gimió imposible de controlar el placer que brotaba de su cuerpo y a cambio metio los dedos en su cabello azabache, uno que por cierto estaba muy suave. El sombrero del Hokage solo entonces resbaló y estaba a punto de caer al suelo mojado pero  Sasuke la atrapó en el aire para evitar que se ensuciara. Sakura pensó que con eso su caliente esposo recobraria el sentido de la realidad pero no espero que Sasuke le colocara su sombrero.

—Siempre he pensado que serías una mejor Hokage, mucho más que yo.

Sakura quería preguntarle porque pensaba algo como eso pero Sasuke había dejado sus pechos y comenzaba de nuevo a besarla. Un beso bastante húmedo que le hizo dejar todo pensamiento coherente por un lado. Sus manos bajaron de su cabello a su cuello y de su cuello a sus hombros. En donde metió sus manos en su espalda aún que el broche de la capa de Hokage le impedía tener más espacio.

Sasuke mientras tanto siguió restregando cierta parte de su anatomía en su centro. Sin embargo subió otro poco su ebtrepierna y tocó su clítoris hinchado, lo cual provocó que diera un salto y que Sasuke sonriera en sus labios. Al parecer todo este tiempo estaba buscando por encima de la tela de su pantalón el punto perfecto para hacerla volar y vaya que lo estaba consiguiendo.

Un par de restriegos más y su gemidos eran incontrolables, lo bueno era que la lluvia impedía que alguien escuchara a dos idiotas descontrolados por las hormonas, dos idiotas que se estaban comportando como adolecentes y no les importaba.

El placer podía en cualquier momento lanzarla del precipicio y Sasuke no estaba en mejores condiciones. Podía sentir en calor a através de la ropa de su esposa y como su entrepierna comenzaba a palpitar, solo con ello. Si tuviera otra mano quizá ya hubiera roto sus pantalones pero esa mano era la seguridad para que Sakura no cayera estando tan ocupada en restregarse en el. Eso era lo que tenía y pensaba conformarse por el momento hasta que sus cuerpos explotarán inevitablemente. Metió la cabeza en el espacio entre su cuello y se dejó llevar por el olor exquisito que emanaba de su esposa. Beso la piel blanca como la leche y la mordió dejando una leve mancha rojiza que no le dejaría ninguna marca.

—¡Sasuke!—Murmuro Sakura nublada por el placer cosa que aprovecho para simular fuertes embestidas que impactaba de lleno contra su centro. Sakura le metió las uñas incapaz de controlar todas las sensaciones que atravesaban su cuerpo. Estaban cerca, muy cerca.

Sin embargo Sasuke en medio de esa locura, logro escuchar como alguien se  acercaba a la ventana que tenían enfrente y no le quedó más opción que retroceder en la oscuridad. Un poste de luz que no servía desde hace tiempo, también ayudo para maneobrar lejos de la vista de quién fuera que se acercaba a ellos. Por ningún motivo iba a dejar que un extraño mirase a su esposa sucumbir en sus brazos y mucho menos que el traje de Hokage se viera envuelto en expeculaciones.

La respiración de ambos estaba agitada y sus sexos dolían desesperados por terminar lo que habían empezado. Desde la seguridad de la sombras esperaron a que una señora con mucha  tranquilidad corriera la cortina  para poder cerrar la ventana y así evitar que la lluvia entrará en su casa. Luego desapareció.   

Sasuke y Sakura se vieron la cara por un momento. Conmocionados y con la respiración entrecortada. Se rieron y Sakura dejo caer su cabeza en su pecho aguantando las ganas de volver a lo que estaba haciendo antes que los interrumpieran. Quizá estaban llevando las cosas al limite sin embargo podían decir que aun estaban lo suficientemente calientes para seguir, a pesar que el agua escurría de su cabello y ropa.

Sasuke colocó una mano bajo su barbilla y la besó deleitándose de la suavidad de sus labios. Luego Sasuke  con su rinnegan abrió un portal para después tomarla por las nalgas y cruzarlo. Sakura le importó menos si se quedaban allí o terminaban en la mesa de su apartamento. Lo que quería era tener a Sasuke y que sólo el la llevara a su propio paraíso...

...

¡Hola mariposas!

¿A alguien le hubiese gustado que lo hicieran realmente en el callejón?

A mí probablemente si pero sentí que me estaba pasando de la raya aun que el resultado del capítulo me encantó. Se viene algo de lemon y el comienzo de los problemas.

Nos vemos pronto
Besos y abrazos
Lia Diso 🌸

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