Narra Ted:
Entonces, últimamente Tim había estado evitándome.
Las vacaciones de navidad terminarían pronto, claro que me emocionaba volver a clases, más ahora que ya no era un niño inocente, pero el término de este descanso significaba también la partida de mi hermano mayor.
Al final, tal y como prometieron, mamá y papá llegaron a tiempo para navidad; hubo abrazos y regalos, llamamos a la abuela para saludarla, bebimos chocolate caliente y hablamos sobre su viaje. Japón sonaba genial, no dejaban de hablar de lo increíble que eran los edificios, y de la comida que apostaban me hubiera encantado probar. En todo el día, Tim solo se mantuvo taciturno contestando con "sí" o "no" cuando le hablaban, y la cosa no mejoró los días siguientes; que mi hermano repentinamente se hiciera tan distante era incómodo, más después de lo que habíamos hecho.
¿Se sentía culpable?, deseaba encontrar la manera de decirle que estaba bien, que yo estaba bien, que nunca dejaría que alguien haga algo que no me agradara y por eso lo dejé tomarme, porque yo lo quería así.
Pero, por más que tratara de traer el tema a colación, él se hacía al desentendido. Parecía que la única manera de que él sea sincero era estando ebrio y lo comprobé en año nuevo.
Para año nuevo mis padres invitaron a algunos de sus colegas e hicieron una pequeña fiesta; yo pasé de la música y el champán y me fui temprano a la cama. Timothy los acompañó por unas horas, pero al final, supongo aburrido de las charlas sobre pesca e hipotecas, subió con torpeza hasta nuestra alcoba, claramente aturdido por el alcohol. Él no tardó en despertarme, y aquella noche hicimos nuevamente todo tipo de cosas pervertidas, pero de manera más sigilosa; debíamos mantener todo en secreto, por supuesto. Cuando acabamos, mi hermano se disculpó por su actitud, medité un poco en pedirle o no que a la mañana siguiente no me evitara de nuevo, pero no tuve el valor, así que solo acepté sus disculpas y dormí entre sus brazos.
Grave error. Faltando solo un día para el final de las vacaciones, Tim estaba más distante que nunca, jamás la relación entre mi hermano y yo había estado yendo tan mal. Debía encontrar la forma de tener un momento para al fin confrontarlo, situación que con mamá y papá en casa no se iba a poder dar.
Empecé a tramar un plan para poder quedarnos a solas, este consistía en reservar un día en el spa para mis padres, con la excusa de que trabajaban mucho, que lo merecían, algo convincente. El dinero no era un problema por supuesto, tenía una gran manía por el ahorro, y mis fondos eran suficientes para costear mi plan.
Todo salió a la perfección, obviamente, nuestros padres fueron al spa y no volverían hasta entrada la tarde. Estaba en la sala, fingiendo ver televisión, mientras meditaba mis palabras para Tim, cuando lo vi bajar con ropa casual, más arreglado de lo normal.
— ¿Vas a salir? — Mi voz pareció asustarlo, cada vez que estábamos en la misma habitación él lucía incómodo, ya no lo soportaba.
— Si, volveré antes que mamá y papá, ¿puedes quedarte solo, cierto?
— Puedo... — Caminé hacia el pasillo, donde estaba Tim, a punto de salir por esa puerta. Quería echarme para atrás con mi plan y hacer de cuentas que esa situación entre mi hermano y yo jamás pasó, pero yo no era así. Yo iba a luchar. — Pero, quería hablar contigo.
— ¿Hablar de qué, Ted?, se me hace tarde... — El castaño por poco huye de mí, pero lo sostuve entre mis brazos, impidiendo que salga por esa puerta. — Ted...
— Ya no aguanto Tim — Él estaba de espaldas a mí, yo abrazaba su torso, podía sentir el latido de su corazón. — No soporto que me sigas ignorando de esta manera, ¿qué hice mal?— Podía sentir a mi voz quebrarse, estaba a punto de llorar.
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Secreto Fraternal (yaoi)
FanfictionDESCRIPCIÓN: Tras años distanciados por la culpa y el miedo al rechazo, Tim y Ted reaparecen en la vida del otro; aquel reencuentro traerá viejos recuerdos y abrirá un capítulo que ambos creían cerrados. ¿Serán capaces de mantener su secreto fratern...