La noche estaba fría y la cama se sentía demasiado vacía, José y Marco decidieron dormir juntos luego de su velada, aunque Marco se veía muy suelto y tranquilo las cosas con José no cuajaban del todo, se sentía muy extraño. La idea de que Marco tal vez no desease a José sexualmente no dejaba de rondar por la cabeza de José, no podía existir otra explicación posible, nunca tuvo que ver a Brandom contenerse de un orgasmo. José tampoco se veía en esa posición ¿Por qué lo haría? ¿Por qué no tuvo necesidad de venirse con él? Cuando las luces de la habitación se apagaron y quedo el silencio, fue donde la cabeza de José tuvo más ruido. Tal vez Marco entonces realmente quería disfrutar del orgasmo junto a Brandom. Esa idea le confundía, puesto que Marco le había confesado que no quería ver a José con alguien más o por lo menos eso fue lo que José entendió esa tarde junto a los yates y el mar. José tenía una agonía mental, y los escenarios y pensamientos posibles le daban una ansiedad terrible.
José se levantó y se percató que Marco tampoco reposaba en cama, se extrañó, ni siquiera lo había sentido irse estaba muy encismado en sus pensamientos. La puerta del baño individual de la habitación esta entre abierta y la luz estaba encendida. José decide ir ver con pasos silenciosos, acto seguido: Marco esta arqueado hacia el lava manos, específicamente sobre el borde de la superficie. José vio entre el espejo que se metía una sustancia por la nariz, y cuando vio que Marco recupero compostura, solo pudo sentir una presión pequeña en el corazón al ver el polvo ordenado por hileras rectas sobre la superficie. Marco con las pupilas dilatadas y el semblante plano observa a José y este se intimida ante la intromisión.
-¿Sucede algo? ¿Quieres un poco?
José niega con la cabeza.
-Claro, te estas medicando...-Afirma Marco con un chasquido de dedos.
-Siento interrumpir tu privacidad.
-Ya estás aquí, pensé que dormías.
-No podía.
José observa el torso de Marco y como débiles cicatrices intervienen en su abdomen y brazos. Parecen líneas una tras otra, y entre sus muñecas puede concentrarse la mayor cantidad de marcas.
-Yo tampoco.
-Eso no te hace bien- dice José de pronto.
Las mirada se entrelazan, Marco siente cierta incomodidad.
-Pues, verás, que sé muy bien lo que hago- dice el joven mientras hecha todo aquel polvo hacia el vertedero del lava manos. Se sacude la nariz con desdén mientras cubre su cuerpo con una toalla.
-Tienes cicatrices...
Marco suspira profundo mientras se apoya del mármol del lava manos.
-Me los hice a los trece años, quería irme con mamá- muestra una en el costado derecho- es la que recuerdo.
Joséparpadea varias veces.
ESTÁS LEYENDO
I want more sex/ Quiero más sexo.
Novela JuvenilIntimidado por las acciones de Brandom, José entonces decide ir por un nuevo camino en su vida, sin embargo, esto no lo librará de los acontecimientos de su pasado que se interpondrán en su presente, y futuro. El sexo nunca tuvo más poder, y el ult...