The me inside of me.┇ᴰʳᵃʳʳʸ┇

6

Harry solía dibujar y escribir durante la noche.

Muy específicamente algo como la inspiración lo embargaba cuando el reloj tocaba las 12 en punto y junto a Draco sacaban los respectivos libros para luego cada uno sumirse en la deliberada escritura.

Harry escribía acerca de lo que pasó en el día y Draco... Harry aún no sabía que era lo que escribía Draco pero constantemente lo veía rodeado de un montón de libros de medicina, además de a veces sentirse observado cuando el Slytherin supuestamente se encontraba "estudiando".

Harry quería pensar que Draco escribía sobre él, tanto como él mismo escribía sobre Draco.

—Tengo que ir al baño— dijo después de varios minutos de silencio, donde solo el sonido de las plumas rasgar con los pergaminos podía oírse.

—Te acompaño— ofreció Draco.

Harry negó con la cabeza, se levantó con cuidado de la camilla y tomando los pergaminos con sus dibujos caminó directo a la puerta de la enfermería.

—Solo iré un rato, voy a llevar los pergaminos y haré barcos de papel, primero voy a probar si flotan y podremos llevarlos más tarde afuera— exclamó como respuesta.

Draco asintió poco convencido y anotando más en la libreta observó de reojo como Harry se perdía por la puerta de la enfermería.  Muy en el fondo y sin querer aceptarlo realmente sentía cierta ansiedad cada vez que el Gryffindor no se encontraba a su lado. Era extraño.

Por su parte y aún bajo la ligera luz que se colaba por la ventana Harry cruzaba entretenido por los pasillos cargando sus dibujos. La mayoría eran de él y Draco; ambos en el pasto, ambos en la torre de astronomía, ambos cerca del lago y el cielo.

Harry amaba el cielo porque le recordaba a Draco.

Mientras caminaba sonriendo escuchó voces; susurros que parecían provenir del pasillo justo en el lado izquierdo donde él tenía que girar para encontrar el baño, el de prefectos, donde no había nadie durante la noche y el podía jugar cuanto quisiese.

—No debería haber nadie justo ahora, solo vayamos cerca al cuadro de frutas y podremos robar comida—

Harry escuchó los susurros cada vez más fuertes mientras se acercaba así que tomando aire y acercándose decidido giro a la izquierda y encontró a dos alumnos, alumnos de su año pero que no recordaba haber visto alguna vez, más altos que él mismo y que al verse descubiertos, lucían enojados.

—¿Qué haces aquí? ¿Eres Potter, no? Lárgate de vuelta a la enfermería, las personas dicen que vas por ahí fingiendo no conocer a nadie como si fueras realmente importante— gruñó el que parecía haber estado hablando hace un instante. Harry reconoció las túnicas de Slytherin y recordó vagamente que no debía meterse en problemas con esa casa.

—No, yo no recuerdo a nadie, ¿Me conocías? Solo vine para ir al baño, quiero pasar— la voz de Harry tembló y ni él mismo supo porqué, recobró el aire y luciendo más seguro intentó cruzar por un lado.

No lo logró.

—¿Qué tienes ahí? No te atrevas a decirle a nadie que nos viste—

—No le diré a nadie, en serio, quiero pasar—

—Aun no nos dices que tienes ahí—

Harry tragó saliva y entregando los papeles entre sus manos vió con desespero como revisaban sus dibujos, como parecían aguantar la risa mientras señalaban estos mismos y volteaban a verlo con burla.

—¿Que mierda es esto? ¿Los hiciste tú?— el chico río y Harry no supo que responder, ante su falta de respuesta el Slytherin se acercó y con ambas manos rompió uno de los pergaminos —Son una porquería, están horribles y ¿Quien es ese?¿Un chico? Quién diría que Harry Potter resultaría ser un marica— continuó destrozando los demás dibujos, sus ojos brillaban ante las satisfacción de ver al Gryffindor ansioso y sin dejar de reír lanzó todos los pedazos al suelo. Justo delante suyo.