El sonido de las personas gritando es ensordecedor, una chica se para frente a nosotros con un pañuelo en la mano, una vez este toque el suelo comienza la carrera.
Levanta la mano con el pañuelo y grita…
—¡¡Preparados!!— las motos aceleran
—¡¡Listos!!!— ahora nadie quita la vista de la carretera esperando la señal mientras los que nos observan gritan descontroladamente
—¡¡Ya!!!— el pañuelo cae y las motos salen a toda velocidad, acelero tanto que la rueda delantera se alza por unos segundos en la salida debido al impulso, puedo sentir la adrenalina, la emoción de estar compitiendo.
El chico antipático va adelante y yo lo sigo de cerca, intento sobrepasarlo, pero me corta el paso con la moto, no será fácil adelantarlo, zigzagueo un poco tratando de despistarlo, pero es inútil, entonces se me ocurre una idea.
Acelero aún más mientras él se mantiene frente a mí, lo dejo ahí sin ofrecer resistencia, dejo que vaya frente a mi.
—¡¿Que pasa gatita?-— me grita acelerando aún más y yo lo sigo.
Entonces llegamos al punto donde debemos girar, veo un tanque en medio de la carretera indicándolo, pero no sigo el consejo de And, en lugar de abrirme como lo hace ese chico yo me pego al tanque, a la velocidad que voy no me queda de otra que inclinarme al lado contrario mientras la moto prácticamente se acuesta sobre la carretera, incluso puedo sentir mi rodilla rozando la carretera.
—¡¡¡Pasa que te abres demasiado!!!— le grito mientras hago la maniobra y salgo ilesa, acelero a fondo haciendo que la rueda delantera se levante, esta vez sí lo hago a posta y una vez toca la carretera de nuevo acelero hasta cruzar la meta.
…………………………………………………..
—¡¡¡Estás loca!!!— me grita Rebeca en el instante en que me detengo junto a ellos.
—Tenía que hacerlo— digo como si fuese algo obvio y entonces no puede hablar porque todas las personas se reúnen a mi alrededor festejando y lanzando bebidas por los aires, puedo ver a And a lo lejos mirándome enfadado a lo que respondo levantando mis hombros.
Fran se acerca a mí —Bueno bueno aquí tenemos a nuestra ganadora, no es sorpresa la verdad— me dice riendo.
—Aquí tienes— me entrega un sobre con todo el dinero.
Entonces veo como los tres chicos pasan frente a nosotros, el que corrió junto a mi mira con cara de pocos amigos, pero a los de mas no logro verlos por los cascos, que raros.
Luego de eso le aviso a los chicos que nos vamos, ellos me siguen en el carro hasta el garaje donde por fin puedo quitarme el casco.
—Ufff tenía ganas de quitarme esto— lo pongo sobre la mesa y me percato de que tanto And como Rebeca me miran enfadados, pongo la mano en la cintura.
—¿Que?—
—¿Qué?— And lo repite
—Eli te dije bien claro que te abrieras, te lo repetí muchas veces—
—Lo sé pero que querías que hiciera, tu viste lo que él estaba haciendo, asi no iba a ganar nunca—
—Pudiste haberte matado, además que tiene perder, ya has perdido otras veces y aquí estás—
—Eso también lo sé, pero no quería perder contra el—
—Solo te digo que es por tu bien, tu orgullo terminará perjudicándote— y luego de decir eso se aleja caminando hasta donde están los autos.
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Un Simple Hola
Teen FictionUna historia con muchos giros, bajadas y subidas, pónganse sus cinturones y ajusten sus cascos mis queridos lectores, porque la historia de el Hola que cambio la vida de Elizabeth, no es para nada lo que creen... Es aún más.