¿Qué se siente ser amado...? (SeroBaku)

Débil

- No pongo en duda la decisión que ha tomado, pero...

- ¿Pero?

- ¿No debería dejar a Hitoshi hacer esto? Después de todo, la persona afectada fue él

- Hanta, querido hijo mío, aunque amo a los dos y confío en sus habilidades, sabes que Hitoshi se ha vuelto débil, no puedo dejar esto a su cargo

¿Débil...? Dentro del azabache, no pensaba que su hermano fuera débil, tal vez se dejó llevar, tal vez solo fue un momento de desesperación, tal  vez solo eso ¿no?

Pero tener esa conversación en la oficina del jefe mientras estaba ocupado con unos documentos era una idea suicida, quería poder opinar sobre ello

- Entonces... ¿Quiere que me encargue de Enji Todoroki?

- Eso era antes... Ahora lo que necesito es que hables con él hasta llegar a un acuerdo

¿Un acuerdo...? No le sorprendía esa respuesta, para ese hombre que ha llamado padre desde hace años, era normal verlo planear su siguiente movimiento en silencio 

- Está bien, así lo haré

- Perfecto, solo no te equivoques Hanta, no quiero errores

Sin errores ¿Eh?... Esa frase la ha escuchado desde los 11 años, educado de esa manera en ese lugar llamado "hogar"

Saliendo del salón sin más que agregar, puede visualizar al azabache en medio del pasillo, ese quien es llamado "Dabi" por todos

- ¿No tienes trabajo que hacer? Pensé que estarías disfrutando este momento de desesperación

- ¿Debería? No creo, el bastardo es fuerte... Me duele admitirlo

Una leve sonrisa se puede ver dibujada en los labios ajenos mientras estos dejan salir humo de ellos

- No entiendo como Enji, bueno, tu familia no sabe en qué pasos anda su primera adoración

- Tan gracioso como siempre, hombre de hojalata

Sarcasmo en su máxima expresión, acompañado de un apodo, uno que Dabi pensaba era apropiado para el contrario

- Claro, siempre lo soy

Comenta tranquilo, queriendo retirarse del lugar y poder seguir su camino pero siendo detenido por el mayor quien tomaba su muñeca, acercándose hasta dejar una corta distancia entre los dos

- Te doy un consejo, déjalo hablar, seguro tiene una propuesta y, conociéndolo bien, seguro que también una contrapropuesta

- ¿Me sueltas...?

Directo sin ninguna expresión de por medio, observa al mayor detenidamente, mostrando su falta de interés, concediendo que le soltara mientras podía escuchar al contrario reír

- Disculpa, la costumbre, te veo luego

Si bien le tenía respeto y algo de aprecio al mayor, no significaba que se dejaría hacer del otro como le viniera en gana, ya tenía suficiente con su padre

Retomando su camino, llega a una habitación medianamente vacía, una donde bien podías observar como el día iba terminando y la oscuridad te envolvía en sus brazos dejando escuchar un lullaby interpretado por el viento

Soltando un suspiro, termina por acomodarse en la cama, esa que casi nunca usaba, ni cuando era un mocoso sin aspiraciones a la vida y seguía cada orden estrictamente dicha por los viejos del lugar

Esperaba poder dormir un poco, así su mente estaría más preparada para el dolor de cabeza que tendría por esa "plática" con Enji, solo que, un invitado quiera interferir en tal plan