Si tuviese que hacer un pequeño resumen de las últimas semanas del cuarto año de Sky, sería más o menos lo siguiente. Su para nada lindo apodo ha prevalecido, la pelea con Arquimedes Mulciber jugó muy bien a su favor, la de Tom Riddle es un cuento totalmente diferente, es como si el resto de personas perdiesen el miedo que Sky se había ganado, pero no es un problema. Ahora todos la llaman Hell, incluso profesores como si fuese una regla tener que ser nombrada por un apodo turbio. Solamente Ethan Lestrange seguía llamándola por su nombre real.
Otra cosa que ocurrió en las últimas semanas fueron las contantes e insistentes disculpas por parte de Tom Riddle. Para ser honestos, a Sky no le importaba si le pedía perdón por haberla lastimado, él ni siquiera pedía perdón por dañar a las personas y no tendría por qué ser diferente ahora. A causa de todo eso, Albus Dumbledore, su profesor de Transformaciones se ha vuelto un maldito estorbo teniéndola en la mira por una pelea absurda.
── ¿Me estás diciendo que Ruby es de Géminis? Eso explica muchas cosas ── murmuró Venus Malfoy. Le gustaba mucho eso de los signos, Sky estaba por tirarle un aguamenti también.
── Un signo con un nombre raro no nos define, Venus.
── ¿Segura, Hell? A ver, dime tu fecha de nacimiento ── Sky se negó ──. Venga, ni que te fuese a hacer brujería, solo quiero ver cuál es tu signo.
── Pudiste simplemente preguntarme cuál es ── repuso mirando el pergamino. Estaba escribiendo un ensayo de historia de la magia, pese a todo lo que se decía de aquella aburrida materia, a ella sí que le gustaba aprender con Binns ──. Soy de leo.
── Merlín me libre ── exclamó Venus. Por favor, no entendía por qué le daba tanta importancia ──, al menos no eres de capricornio como el amigo de mi hermano. Riddle no es una mala persona, pero su carta astral deja mucho que desear.
Ah, claro, Tom Riddle.
¿Qué le importaba a Sky todo eso de la astrología y él? Estaba mucho más concentrada en su ensayo que en lo que le contaba Venus.
── Hola Sky, ¿cómo estás? ── Ethan le sonrió. No lo había visto desde la mañana, habían tenido juntos una clase de cuidado de criaturas mágicas.
── Sí, bien. Estoy terminando mi ensayo para mañana, no está tan difícil a menos que alguien me interrumpa para contarme cosas absurdas que realmente no me interesan sobre la astrología.
── Qué indirecta más directa ── murmuró Venus, pero no se molestó por ello, estaba acostumbrada a ese poco tacto de Sky ──. ¡Tú eres de piscis, Ethan! Con razón, te describe muy bien con tu dulzura y amabilidad.
Ya, pero, ¿quién sabe si realmente ese signo mostraba su verdadero ser? Quién sabe, el lobo siempre se viste de oveja.
── ¡Ay cierra la boca, Malfoy! ── la verdad es que su paciencia era muy escasa. Prefería gritar e irse que seguir oyendo a una maniática que cree que las personas se definen con un conjunto de planetas en distintas posiciones.
Necesitaba paz, un lugar más tranquilo que el Gran Comedor. Ir a su sala común era una opción tentadora, si se apresuraba, llegaría en unos veinte minutos debido a aquellas infernales escaleras cambiantes. No sabía en qué estaba pensando Rowena al crearlas y darles esa función, pero al menos dos de los fundadores hicieron algo bueno. Helga los bendijo con sus exquisitos platillos mientras que Dione les hizo creer en ellos mismos y su libertad; tristemente por eso fue que una desapareció de la faz de la tierra.
── Rowle ── el mundo era una mierda si le preguntas a Sky ──. Sé que me has oído, de verás necesito hablar contigo.
── No tengo tiempo, Riddle, tengo cosas muy importantes que hacer. Supongo que en otra ocasión será.
── Es muy urgente, muchísimo más que tu ensayo de historia de la magia ── Sky se detuvo casi en seco. ¿Por qué sabría él que su pergamino era precisamente de dicha materia? ──. Bueno, si te pones a pensar no es nada importante, solo venía a disculparme por enésima vez. No creí que sangraras tan fácil por una caída.
Ese chico no podía estar hablando en serio. ¡Era un tonto! Debía comparar ambas contexturas físicas, él tenía quince o dieciséis años y estaba más avanzado en la magia que ella con solo catorce. No podía estar hablando en serio.
── Riddle, usaste un hechizo de expulsión conmigo. Literalmente me aventaste a las escaleras, ¿y así esperas que no sangre fácilmente? Es que yo no entiendo que tienes en la cabeza, juro que te creía un poquito más listo.
── Tienes razón, pero no debiste intervenir.
── No, tú no debiste molestar a Ethan. Es mi amigo, estoy dispuesta a arder en llamas por él.
── No lo digas tan literal, Hell.
