1-Hombre De Preguntas

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"Exit light
Enter night
Take my hand
We're off to never-never land"

-Buena canción para una noche como esta-Bajaba un poco el volúmen de la radio para escuchar lo que decía.

-Deberíamos mejor salir a caminar para inspeccionar-Le comentaba a mi compañero Sanders, desde la secundaria estuvimos juntos pero nunca llegamos a tener mucho contacto hasta que ingresamos a la academia.

-Estás loco, simplemente déjame disfrutar el momento.

-Momento, el momento, tenemos que estar en la maldita patrulla esperando a la nada, se supone que...

-Nuestro deber lo dicta-Daba un sorbo a su café mientras leía una revista de chismes-Uuuh, encerraron a Drake.

-Dejame ver.

La cosa era así, recién egresados y lo primero que nos tocó hacer fue el patrullaje en un barrio donde la seguridad era pésima, muchos se quejaban de medoreadores pasando como si nada cerca de las residencias, ahí era donde entrábamos nosotros.

No me quiero quejar, cada cosa a su tiempo pero de niño esperaba ser considerado alguien importante, no para la sociedad, si no para mí, que en mi lecho de muerto estuviera satisfecho que lo que hice en vida.

Supongo que así piensan todos, pero esos "todos" a veces ni lo intentan.

-Tanto tiempo sin verlo y el jefe le aplaude como si fuera el maldito Dios de la investigación, me saca de quicio.

-¿No se supone que es el mejor detective? Deja que obtenga sus méritos-Colocaba las manos detrás de la cabeza, oir las quejas de mi compañero hacía que las horas pasaran más rápido.

-Sabes que es un engreído, lo conoces más que yo, actúa como si nada le importara,¿Por qué no le interesan tanto los casos graves?, ¡Ni si quiera lo llaman! Se manda solo.

-Tal vez es su manera de trabajar, no tengo idea.

-Nunca sabes nada.

Después de eso algunos ruidos extraños cerca de la zona captaron nuestra atención, sonaba algo claro el como empujaban algunos objetos pesados y caían otros.

-Salgamos-Dió la orden, en sigilo fuimos directo a lo que captamos, cada vez eran más fuertes pero cesaron de la nada, no estabamos seguros en que casa era cuando un grito agudo nos guió hasta el lugar.

Corrimos casi a la par, observamos como una mujer de mediana edad salía herida de un costado de su abdomen, cayó al suelo y fuimos de inmediato a darle atención.

-Tranquila, va a estar bien, llamaré a una ambulancia.

Se veía aterrorizada, y si algo sé es que donde hay un civil herido cerca se encuentra su agresor.

-Ayuden a mi amiga, p-por favor, él sigue...sigue adentro.

La idea que tiene mi madre sobre mi empleo es ridícula, piensa que voy a morir en cualquier momento, tengo 24 años, mi cabello es café claro y no pase por un infierno para llegar hasta aquí acobardandome por lo que haya dentro.

No lo dude y entré, ignore los llamados de Sanders, se debe revisar con precaución el área para tener todo en orden pero a la mierda, casi matan a alguien.

Equipado con mi pistola, buscaba en más habitaciones de la planta baja pero solo había desorden, escuché unos pasos arriba y de inmediato corrí, sentía adrenalina por mi cuerpo como si tuviera la necesidad de ya atrapar al culpable, sus pisadas me llevaron a la habitación más grande de la casa, estaba en el borde de la ventana dejando ver su rostro, tuve contacto visual con él dos segundos hasta que...

No sigas mis pasosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora