Jesucristo no vino por los creyentes

Capítulo 2

Rebeldía a lo desconocido.

Cuando no decidimos optar por escoger a Dios, tenemos otro guía. No podemos servir a dos amos. De modo que si optamos por dejar al Señor a un lado, es porque otro tiene más poder en nosotros. Estamos en rebeldía todo el tiempo aunque no nos identifiquemos con esto. No hacemos otra cosa que despreciar lo que nos trae bendición para hundirnos en el caos.

Así somos los seres humanos: prestos a crear límites entre inteligencia y sabiduría. Acostumbramos a escuchar nuestros impulsos pero... ¿intentar escuchar a Dios..? Básicamente somos capaces de hacer una analogía entre lo anterior y desperdiciar el tiempo. Ese es el lugar que ocupa el Creador para muchos cuando no han llegado a la conversión: es una mal llamada pérdida...

Resulta que lo "desconocido" es grandioso, excepcional. Lo "desconocido" es algo que la ciencia actual, a pesar de los asombrosos avances de la tecnología, aún no consigue tener los argumentos para desmentir. Lo "desconocido" se mantiene en pie, desafiando la ignorancia pero muchos no podemos verlo hasta que lo "desconocido" decide, de acuerdo a la soberanía de su voluntad, traernos a sus pies por dolor porque no supimos entender el lenguaje del amor.

Y ahí no faltan los que se acercan en su búsqueda para, una vez superado el conflicto emocional que los aqueja, (considerando que ya no necesitan tanto de su Padre Celestial), volver a tomar el camino de perdición en el cual no encuentran consuelo. Pero, su infidelidad, los hace actuar de manera contraria al agradecimiento por no recordar sus súplicas, por misericordia, en los instantes de desesperación.

Lo anteriormente ilustrado es una burla. ¡Cuánta rebeldía con un aliado y amigo! ¿Cómo nos atrevemos a usar a Dios y luego lo desechamos? Dios es amor pero es fuego consumidor...

"Conmigo está el consejo y el buen juicio; yo soy la inteligencia y el poder".

Proverbio 8:14.

Jesucristo vino por ti.