4. LA FIESTA DE LOS WHITE

55 2 0
                                    


"Los cielos y la tierra se arrodillarán ante su llegada, la llegada de ambos no será inadvertida, desde el más rico hasta el más pobre, desde oriente hasta occidente, serán testigos de los legendarios hermanos."

*La foto es de Austin Holden* 

Ambos estábamos preocupados pero no lo demostrábamos, habíamos llegado al club desde hace como una hora y Taylor se encontraba desesperada a que llegarán Scarlett con su primo mientras que yo solo esperaba hallarme a Ann Collins.

El club estaba lleno y teníamos la preocupación de que no dejarán pasar a Scarlett y su primo que ha sido la única razón por la que me encuentre aquí y no en la fiesta de los hermanos White, además de Ann, pero se me hacía que sólo fue una mentira de Taylor para que aceptara venir con ella.

Nos encontrábamos sentados en una butaca cerca de la pista de baile, había varias personas bailando muy pegado mientras sonaba a todo volumen "Gold Skies" ya habíamos tomado unas tres cervezas y un whisky en la espera.

Mi mente no me dejaba tranquilo al saber que habíamos dejado sólo a Oliver, al asecho de los oscuros que sabían dónde se encontraban.

—Puta, Scarlett dice que ya está afuera pero el pendejo del guardia no lo deja pasar—me dijo mientras tomaba un sorbo de su whisky.

Después de más de dos horas en el almacén encontramos el bendito vestido que tanto andaba buscando en su talla, habíamos ido a su casa para que maquillará y se arreglará.

Andaba un vestido azul oscuro corto con un encaje de corazón, en la cintura llevaba un diseño de líneas color dorado, llevaba unos tacones del mismo color del vestido de terciopelo, y se había pintado los labios de un azul oscuro.

—Cuide su lenguaje "Miss blue"  —le digo molestando respecto a que se había vestido totalmente de azul incluyendo su pelo pintado de un azul eléctrico que la distinguía siempre de las demás.

—¡Deja de llamarme así! Mejor ríete de tu atuendo— me dijo señalando como iba vestido.

—Si yo voy vestido como persona normal, no como la reina del hielo— le dije burlándome más, sin poder contener la risa que me estaba causando el alcohol.

—¡Así claro! Señor geordie shore— me dijo riendo ella está vez.

—¡Hey! ¡No ando vestido como uno de esos metrosexuales!— le dije haciéndome el enojado pero no pude contener la risa.

—¡Al fin! Lo siento pero el pendejo del de seguridad no nos quería dejar pasar, estúpidos de mierda— maldijo Scarlett quién llego de la nada a sentarse a nuestra mesa junto con su primo Mason Jhonson.

Taylor no dejo de mirarlo por un segundo en cuanto entro a su campo de visión, ella era así siempre que se encontraba a un chico que le gustara pero nunca se enamoraba.

Había aprendido que los mundanos, los infieles, los hombres creados en este mundo no eran de fiar para el amor, ni ellos ni nosotros los que manipulamos los elementos.

Mi mirada desde ese momento se concentró en buscar a Ann, no me importaba dejar sola a Scarlett pues ella siempre se iba buscar a chicos solteros con quienes bailar y entretenerse. 

Pasamos unos minutos hablando de cosas triviales hasta que las cosas se pusieron calientes entre Taylor y Mason, Scarlett se termino yendo a la pista de bailes a "bailar" con chicos, mientras estos dos se estaban comiendo a besos enfrente mío.

Me quedé un rato sentado junto a ellos pero no pude soportar tener que verlos besarse hasta meterse la lengua en la faringe o yo que putas se como se llama.

Octógora: La legión de los caídos #PNovelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora