LA PERSONA QUE CAMBIÓ MÍ VIDA (Michael Jackson)

PRÓLOGO (3/3)

Antes de empezar quiero decir que los próximos capitulos los haré bastantes más largos que los anteriores y que espero que disfrutéis la tercera y última parte del prólogo.
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NARRO ESCRITORA:

10 /4 / 1983

Pasados los 9 meses, los padres del bebé fueron al hospital. Al llegar, rapidamente a la madre la llevaron a las salas de parto.

Mientras que el padre, que estaba afuera del pasillo, esperaba que esta "tortura" y "sufrimiento" acabase para que su vida y la de su novia fueran como antes, una "vida normal", como él decía. Pero obviamente sus vidas no eran nada normal.

Pasaron unos minutos, la madre se encontraba en una habitación con un doctor y 2 enfermeras.

Las 2 enfermeras la animaban para que siguiese esforzándose en empujar.

Y el doctor miraba y esperaba si el bebé se movía algo y que haya salido unos centímetros más que antes.

DOCTOR: ¡Venga empuja, empuja!

MADRE: ¡¡Joder como duele, aaaaaah!!

ENFERMERA (1): ¡Sigue así, ahora inspira... expira... inspira... expira... inspira... expira...

(cuando la madre lo hizo, a lo que la enfermera le dijo, el dolor disminuyó un poco, pero no lo suficiente para ella, aún seguía muy dolida)

ENFERMERA (2): Vamos, que el dolor solo es un obstáculo para tener el bebé, y si sigues así, no podremos sacar el bebé y el dolor no acabará.
(Esta es estúpida. Pensó la madre)

DOCTOR: Eso es, ahora, voy a contar hasta 3 y quiero que empujes mucho ¿Entendido señorita?
(la madre asintió con la cabeza)
Vale, pues haya vamos, 1...2...y..3, ¡empuja!

MADRE: ¡Ya lo intento, aaaaaah dios, aaaaaah!

Así siguió, durante 1 hora, sin parar.

Mientras tanto, el padre, no podía aguantar más estando esperando por un bebé que, el ya sabía que no lo van a cuidar.
Caminaba haciendo vueltas en círculos, porque estaba enfadado de tener que esperar más de 1 hora media.

J**er si lo hubiéramos hecho, con protección, no estaríamos aquí y estaríamos haciendo cosas más importantes,peron noo, el "p*to bicho" tenía que crecer en la barriga. ¡Porque ami, dios que asco!. Pensó el padre.

Pasaron 30 minutos, la madre no soportaba más tanto dolor y quería que esto se acabase ya.
Hacía todo lo que le pedían para hacerlo más rápido.

MADRE: ¡¡Aaaaaaah, ya no puedo más!!

DOCTOR: Venga, aguanta señorita, que sólo queda 5 centímetros para poder cogerlo, ¡venga ánimo!

ENFERMERA (2): Si, venga aguanta, sino, no podremos sacarlo y que usted señorita, no querrá que nos quedemos aquí, toda la noche, así que, haz un esfuerzo grande, que ya queda poquísimo.

Si sigue así, le daré una bofetada que se quedará aún más tonta de lo que ya es.
Pensó otra vez la madre.

Enfermera (1): ¡¡¡vamos, solo un empujoncito más y ya estaremos, Haz todo lo que puedas, contemos hasta 3, como antes, 1...2...3, empujaaa!!!

MADRE: ¡¡¡Aaaaaaaah, Yaaa, no puedo maaas!!!

DOCTOR: ¡¡Solo un empujón más!!

MADRE: ¡¡Aaaah, AAAAAAH!!