Stay with Me ||Fic. Izuocha|| [Soulmate]

Capitulo 2: Ataque a la U.A.

Alguna vez te has preguntado...

¿Que es el amor?

Suelo hacerme esa pregunta con frecuencia, he visto a miles de parejas caminar agarradas de la mano, darse abrazos o besos, he visto a mis compañeras encontrar a su "Alma gemela", las he visto andar con un sonrisa de bobas enamoradas, he visto el brillo que emana de sus ojos cuando están con esa persona especial para ellas... ¿es así de bonito? ¿El amor puede llegar a ser tan mágico?

Mirar es lo único que puedo hacer, soy una simple espectadora que está en segundo plano, una extra más, aunque me gustaría vivirlo, me gustaría sentir mi corazón acelerado, mis mejillas arder y mi respiración agitarse, quiero saber si es verdad que el mundo entero desaparece, si de verdad el tiempo se detiene, quiero poder experimentar lo que las personas llaman un beso, un primer beso, un abrazo cálido con el cuál me sienta protegida, quiero saber que se siente el tacto de mi otra mitad sobre mi ¿cómo es? Hay tantas cosas que quiero saber, pero tengo que limitarme a observar, solo mirar y mirar como otros son felices y viven al máximo sus días.

Cuando mi frase salió no pude evitar llorar de la felicidad ¡por fin pasaría! por fin tendría la oportunidad de vivirlo en carne y hueso, al fin era mi turno de vivir esas hermosas experiencias junto a la persona que sería mi eterna compañera ¿quién será? ¿es atractivo? ¿Que le gustará? No puedo esperar a conocerlo, aunque ¿sabían? Dicen que ya conocemos a nuestra Alma gemela o que por lo menos la hemos visto una vez en nuestra vida ya sea un vecino o por la televisión o simplemente pasaba desapercibido y nosotros lo ignoramos.

Poco después de que mi frase saliera comenze a tener un sueño con un niño de cabellos verdes como las ojas de primavera, todas las noches se repetía una y otra y otra vez, siempre era lo mismo y no me molesta, el pequeño parecia tener 6 o 7 años, al igual que yo en aquel sueño.

Me encontraba caminando hacia él, estaba ¿llorando? ¿Por qué? Me acerqué sentándome a un lado suyo, de inmediato comenzó a secarse las lágrimas a pesar de que las muy traidoras salían sin intención de detenerse, lo abracé, si eso hice, acaricié sus revoltosos pero suaves rizos, él se negaba a estar cerca mío, intento alejarse pero no lo dejé, no se iría hasta que vea una sonrisa en esa tierna carita...

— ¿porque me tratas así? —dijo en un sollozo— aléjate de mi o también se burlaran de ti

— no me importa —respondí al instante con decisión — me quedaré contigo hasta que dejes de llorar ¡no te soltare!

— Uraraka-san, estoy bien —sonrió, tenía los ojos rojos y con sus pequeñas manos se limpiaba las lágrimas que había logrado detener— vete y deja de ser tan buena conmigo, si te pasara algo por culpa mia yo... no me lo perdonaría

Sus ojos se humedecían de nuevo, no podía más, verlo en ese estado me dolía tanto, era demasiado, tomé su mano y corrí lo más rápido que pude, el viento secaba sus lágrimas en el camino mientras él me miraba con confusión. Llegué a una casa abandonada, el cielo se tornaba anaranjado, volteé a verlo, este miraba alrededor sin ninguna expresión en su rostro.

— ¿donde estamos? —preguntó

— vamos arriba —dije y volví a tomar su mano mientras subía unas escaleras al techo.