CAPÍTULO 13 Perdón

394 27 3
                                    

YUKINO
No sabía por qué tenía que ir a donde se encontraba Reiji. Acaso ¿él puede hacer algo con respecto a mi muñeca? Eso espero.

Suspiré y me decidí a buscarlo. Si es que podía hacer algo, entonces no perdería nada haciéndolo. Pero de repente, vi dos personas corriendo hacia mí y estaban gritando mi nombre.

???: ¡¡Yukino-nee!!

Eran Akira y Akane.

Akane: Yukino-nee -dijo agitada- ¿estas bien? ¿Te ha pasado algo?

Yo: Cómo...

Akira: Cuando entramos, escuchamos un grito algo débil pero rápidamente identificamos que era tu voz.

Akane: Por lo tanto, corrimos lo más rápido posible hacia dónde provenía.

Akira: Y aquí estamos -concluyó-

Yo: O-Ok..

No sabía que más decir. Me alegraba que se hayan preocupado tanto por mí pero si ellos pudieron escucharlo, entonces los demás también lo hicieron y no hicieron nada al respecto. En serio no les importa lo que llegue a pasarnos.

Akane: Yukino-nee -comenzó a decir algo asustada- eso... -señaló temblorosamente mi muñeca-

Antes tenía un tono rojizo pero ahora poco a poco se estaba oscureciendo.

Traté de ocultarlo detrás de mi espalda; sin embargo, Akira fue más rápido. Me cogió la mano suavemente, la levanto y la miró detenidamente.

Akira: ¿Qué pasó y quién lo hizo?

Pude notar cómo todo su cuerpo se tensaba y había enojo y preocupación tanto en sus ojos como en su tono de voz.

Yo: Estoy bien -dije tratando de tranquilizarlo- Ya todo paso. No tienes que preocuparte.

Akira: Lo hizo uno de esos vampiros ¿verdad? No puede ser nadie más que ellos -me miró a los ojos- ¿Quién fue? Yo mismo me encargaré de hacerlo pedazos -apretó el puño de su mano libre-

Yo: Akira, tranquilo.

Akira: ¿Cómo quieres que me tranquilice? Te han lastimado y no puede volver a pasar. No estaré tranquilo hasta poder destrozar al idiota que te hizo esto. Ahora dime quién fue.

Yo: No te lo voy a decir.

No es que esté defendiendo a Ayato. Con gusto desearía que le den una elección. Es solo que si le digo, él irá decidido a darle una paliza pero la paliza terminará siendo doblemente para él o hasta mucho peor y no quiero eso.

Akira: Dímelo -su voz se tornó más seria-

Yo: No lo haré. No importa cuánto me lo pidas, no te diré.

Akira: ¿Por qué no? -elevó su voz-

Yo: Porque no quiero -también elevé la mía-

Akira: Solo quiero darle una lección a ese maldito.

Yo: Por eso no quiero. Podrías terminar siento tú el lastimado.

Akira: ¡Eso no va a pasar!

Yo: ¡Sí lo hará!

Akira: ¡No lo hará!

Yo: ¡Claro que lo hará! ¡Ellos no son humanos, tienen mucha más fuerza que tú!

Akira: ¡Tú no sabes cuánta fuerza tengo y de lo que puedo ser capaz!

Yo: ¡Igual no te lo diré!

Diabolik Lovers -Parallel World-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora