Capitulo 46

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Tus días en la casa de los tres hermanos llegaron a su fin, efectivamente te sentías mejor después de estos diez días de "reposo" y cuidados. Por lo que agradeciaste a los tres chicos por recibirte y por sobre todo cuidarte.

—No creas que por irte de aquí dejaremos de vigilar que te cuides, ¿Verdad Lu? —Habló Sabo con una sonrisa.

—¡¡Si!!

Suspiraste rendida pero con una sonrisa. Realmemte tenías que cuidar tu salud para evitar ser un trabajo extra para ellos.
Después de lo ocurrido el día sábado, Sabo se veía un tanto más feliz a lo normal. No estabas segura de si alguien más lo notaba pero por tu parte, te hacía gracia.

Cuando tocó volver al circo, Dai-san luego de un abrazo fuerte, comenzó a regañarte por no hablar antes. Algo similar ocurrió con el resto de tus compañerxs sin contar a Félix, él se reía de ti ya que tu rostro era el de un perrito regañado. Pero a pesar de todo, te sentías feliz de poder retomar tu rutina con normalidad.

Sabo durante el resto del mes, te enviaba una colación con Luffy, asegurándose que comieses algo en la universidad; Y los días viernes, comían los tres juntos en su casa para luego ir a dejarte al circo a tus entrenamientos. 
Cuando llegaba la noche, tenías "permitido" estudiar solo hasta cierta hora, el rubio también se encargaba de llamar para recordarte que ya era buena hora para descansar.

Las veces que él iba por ti al circo, era recibido de buena manera.  Félix conversaba con él y parecían llevarse bastante bien, incluso Dai-san lo saludaba, aunque siempre le hacía gestos de que lo vigilaba provocando risas.

—¡Hola Félix!

—¡Hola! ¿Todo bien? —Sabo asintió.

—¿Y (TN)?

—Jugando en el péndulo. —Explicó apuntando a los dos grandes aros que daban vueltas, estando tú dentro de uno.

Tu pareja observó donde apuntaba Félix, y de inmediato una sonrisa apareció en su rostro. Veía con atención cómo disfrutabas caminando con rapidez dentro de uno de los aros, para luego pasar fuera de este y caminar por la parte externa. Tu sonrisa al estar sumida en tu propio mundo lo hacía sonreir a él.

—¿Es buena verdad?

—Si... —Respondió Sabo sin apartar la vista.

—No le digas, pero ella es mejor que yo en todo esto.

Sabo lo miró de reojo divertido.

—¿Por qué no debería decirle?

—Evitemos las burlas. —El comentario lo hizo reír, pero volvió a posar su vista en ti quedando embobado.

Félix sonrió de forma leve al darse cuenta de esto, era imposible no notar que este chico rubio te adoraba.

En un momento, saliste de tu mundo para mirar a Félix, pero al ver a Sabo también junto a él, les sonreiste a los dos chicos. Ellos devolvieron el gesto.
Una idea cruzó tu mente, Luffy siempre que venia aprendía alguna cosa, pero Sabo hasta ahora no... Sonriendo para ti misma volviste dentro del anillo bajaste la velocidad hasta detenerte, cuando notaron esto, ambos chicos se acercaron un poco a ti para hablar.

—¡Sabo! —Llamaste. —¿Quieres subir?

El mencionado dio un leve brinco.

—Espera... ¿Subir a qué?

—Al péndulo, Félix puede ayudar. ¿Verdad Félix?

—¿Crees que sea buena idea? —Devolvió la pregunta arqueando una ceja.

Mi Sonrisa Favorita (Law x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora