Capítulo 15.

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Scarlet POV's.

Desperté por los constantes movimientos que hacían en mi hombro.

- Astrid...cinco minutos más...-decía aún dormida.

- Primero, no soy Astrid, segundo, ya llegamos. -oí decir a Cameron y me levanté.

- Que pereza...-me volí a acostar. Estaba muy comoda hasta que sentí varias manos en mis piernas jalandolas. Empecé a gritar como loca.- ¡NO ME VIOLEN! ¡SOY INOCENTE! ¡FUE ESA VIEJITA! -apunté a la señora que solo reía al ver mi situación.- Que mala. -la mirP mal y reí. Los chicos me soltaron y me paré.

Bajamos del avión y nos encontramos con algunas fans. Como yo no soy importante, caminé adelante con Astrid hasta que una muchacha me agarró del brazo. Me giré y la miré.

- Me-me das tu...Señor -empezó a llorar. Sonreí, me acerqué a ella y la abracé.

- Calma princesa, no me gusta que llores. -me separé y limpié sus lágrimas. Tomé el cuaderno y le dí el autografo.- Escribe tu twitter, te seguiré.-sonreí y ella sin dejar de llorar escribió su twitter en el papel y me lo dio.- Calma linda, te ves más linda si no lloras. -le dí un beso en la mejilla y seguí caminando con Astrid hasta entrar al aereopuerto. Tomamos nuestro equipaje y fuimos a la camioneta a esperar a los demás. Cuando llegaron, la camioneta avanzó y nos dejó afuera de un hotel.

Entramos a el y en recepción nos dieron llaves para nuestroa cuartos. 217: Cameron, Nash y Carter. 218: Mahogany, Astrid y yo. 219: Jack G, Jack J y Matthew. 220: Taylor y Aaron, los cuales celebraron tanto que los demás los golpearon. Cada uno se fue a sus respectivo cuarto y cuando entré con las chicas, lo primero que hice fue tirarme en la cama. Descansé un poco y arregle mis cosas.

- ¿Scar? -entró Mahogany a mi habitación y sonreí.

- ¿Si?

- Astrid y yo iremos a comer, ¿vienes?

- Oh...-me quedé pensando unos segundos.- No, voy a salir un rato a pasear. -sonreí.

- Claro, si nos buscas, estaremos en el restaurant, bye. -sonrió y ví como ella y Astrid salían del cuarto.

Me dí una ducha larga para poder relajarme, mi cuerpo estaba tenso y sin razón...siempre que tengo esas cosas, algo malo pasa despues. Salí del baño y me vestí. Me puse unas sandalias bajas negras, una falda de vuelo negro y un sueter olgado rosado. Amarré mi cabello en una coleta y salí del del cuarto. Caminé hasta el elevador y esperé un rato a que llegara. Al estar esperando, un chico se paró a mi lado, lo miré disimuladamente y volví a ver el elevador.

- Hola -me miró y sonrió. Lo único que hice fue darle una sonrisa leve.

 El elevador llegó y los dos entramos. El apretó el botón para bajar y yo veía mi celular. Mientras revisaba mi celular y el elevador bajaba, el volvió a hablar.

- Soy Sam, ¿y tu? -me miró.

- Scarlet -dije sin despegar la vista de mi celular.

- Chica celular, te diré así.

Lo miré por unos segundos y reí burlona. - Bueno, hola chico que de la nada me habló y no volveré a ver. -dije cuando el elevador se detuvo y se abrieron las puertas. Salí de el dispuesta a caminar cuando Sam me tomó del brazo.

- Am, ¿conoces la ciudad? -[Seguramente sea una excusa para coquetear.] pensé.

- Si, si la conozco -dije mientras me zafaba de su agarre y seguía caminando.

- Oye, ¿conoces el...am...-reí al oirlo.

- ¿El am? -volví a reír y lo miré.

- ¿Quieres ir por un helado? Y di que si para que no siga avergonzandome. -hizo un puchero y sonreí.

- Claro, ¿porque no? -me encogí de hombros y vi como sonreía, tomó mi mano y empezamos a caminar.

Estabamos hablando de muchas cosas, teniamos mucho en común. Me contó que un día su prima le habló a su ex novia diciendole que la engañaba y que ella era solo el "segundo plato". Reí como loca al pensar que una niña de 10 años sabía tanto. Llegamos a un pequeño puesto de helados y despues de una LARGUÍSIMA discusión de quien pagaba, el ya había pagado sin que yo me diera cuenta.

- Idiota. -lo miré mal.

- Cuanta confianza. -rió.- Por lo menos tienes tu helado de pistache...¿quien come helado de pistache? -me miró raro.

- Te la voy a meter con todo y zapato en el culo. -reí y el me miró mal. Reí aún más.

- Oye...-miró su reloj.- Creo que ya me tengo que ir, tengo que cuidar a mis hermanas, te hablo luego, bye. -me dió un beso en la mejilla y se fue.

Caminé de nuevo al hotel y lo primero que ví fue a un Cameron muy molesto.

- Oye que...-no logré terminar.

- ¡ERES UNA PERRA! -gritó haciendo que mis ojos se abrieran como platos y le di una gaznatada.-

- ¡NUNCA ME VUELVAS A DECIR ASÍ! -lo miré molesta.

- ¡¿COMO NO TE LO VOY A DECIR SI LE HACES DAÑO A MI MEJOR AMIGO?!

- ¡¿DE QUE MIERDAS ESTAS HABLANDO?! -en ese momento llegó Astrid y me dio su celular. Ví cada una de las fotos que había en el.- Oh no...

Die For You. 《Shawn Mendes》//en edición//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora