Die For You. 《Shawn Mendes》//en edición//

Capítulo 25//Antepenúltimo

Scarlet POV's

¿Dos días?

- ¿Dos días? - pregunté por lo confundida que estaba. ¿2 días dormida?

- Dos días en coma. - respondió Shawn sin dejar de mirarme. Tenía unas ojeras increíbles y sus ojos ya no brillaban. Seguro se veía peor que yo.

- Shawn, ¿qué te pasó? No...

- ¿No? - preguntó.

- No te ves igual...estás palido y tus ojos, ¿pasó algo? - lo miré asustada.

- Pasó que estuviste dos malditos días en coma. - sabía que esa no era la verdadera razón. La puerta se abrió dejando ver a un doctor y a los padres de Shawn.

- Hija, despertaste. - dijo la mamá de Shawn mientras se acercaba a mi y me daba un beso en la frente.

- ¿Cómo te sientes? - habló el doctor.

- Un poco confundida, soñé...soñé cosas que no recordaba. - los miré a todos. - No sabía que tenía otro hermano y menos sabía que había perdido la memor...

- Yo te...puedo explicar eso. - era él.

- Nate...-susurré y al parecer Shawn me escuchó porque su cara se pudo roja de furia.

- ¿Qué haces aquí? - le preguntó Shawn.

- Vine a ver a mi hermanita. - dijo Nate bajando la cabeza. Parecía avergonzado.

Shawn parecía no creerle. Estaba sorprendido en todas maneras. Me miró esperando que diera una respuesta, una cara de asombro o algo, pero en realidad ya me había sorprendido bastante en el sueño.

- ¿Nos dejan solos, por favor? - pregunté.

- Scar...- pronunció Shawn, pero lo interrumpí.

- ¿Por favor? - él pareció entenderme. Asintió y salió del cuarto junto a los demás acompañantes.

- Scarlet, no sé como explicarte t...- lo interrumpí.

- ¿Eres mi hermano? - lo miré esperando alguna respuesta.

Él suspiró y me miró a los ojos. Levantó la manga de su camiseta y me enseñó el mismo tatuaje que tenía mi papá. Tenía la fecha de todos. De mamá, de papá, de Johan, Jonathan...y la mía- Hola princesa. - empezó a llorar y no pude contenerme. Empecé a llorar con él. No podía creerlo. Mis sueños fueron reales. Yo simplemente...

- Nathan. - susurré y él me abrazó. Correspondí a ese abrazo fuertemente. Lo necesitaba tanto como lo necesitaba él y tenía que dejar todo salir.

- Te amo, princesa. - dijo besando mi frente. Yo sorbí mi nariz y lo miré.

- Y yo te amo a ti, hermano. - dije sin dejar de llorar.

- L-lo siento por tratar de vi...- lo callé.

- Ya te perdoné, olvidemos eso por favor. - dije limpiando sus lágrimas. El solamente bajo la mirada por unos segundos, como si estuviera pensando en las palabras correctas, pero lo que dijera, lo aceptaría. No sería fácil olvidar lo que trato de hacerme, pero lo entendía. Uno borracho hacia cosas que no quería. Volví a alzar la mirada mirándome a los ojos.
- No sabes cuánto espere por este momento.- dijo y yo solo sonreí, el correspondió a la sonrisa.

- ¿Cómo has estado, hermano? - reí ante mi pregunta. Es raro volver a llamarlo hermano. Primero, porque no recordaba las veces que lo hacía. Segundo...no hay segundo.

- No muy bien, pero ahora que estoy con mi princesa...estoy mejor que nunca. - sonrió y entrelazo nuestras manos. La puerta se abrió dejando ver a un Shawn tranquilo y a una Astrid llorosa.

- Scarlet...- fue lo único que salió de la boca de Astrid antes de tirarse encima mío y llorar en mi hombro.- Oh, Scar.- dijo sin dejar de llorar. La separe un poco de mi para poder verla, tenía unas grandes ojeras y su voz se escuchaba quebrada.

- Oh Astrid, deja de llorar, no estoy muerta. - reí besando su mejilla y ella sonrió.- ¿Cómo estás?

- ¿Cómo estas tu? Me dio un ataque cuando supe que estaba en coma.- dijo limpiando sus lagrimas. Yo solo atine a darle un beso en la frente.

- Estoy bien, tranquila.- dije abrazándola.- Te extrañaba tanto...- empecé a llorar con ella. La puerta se volvió a abrir. Era el doctor de hace unos minutos.

- Chicos, necesito revisar a Scarlet.- dijo el doctor mientras ojeaba unos papeles en su libreta. Los chicos sonrieron y salieron de la sala. Antes de que salieran, escuche a Nathan decirle gracias a Shawn. Ojala se lleven bien y Nate le pueda explicar todo.- Bueno, Scarlet, ¿Cómo te sientes, querida?

- Muy bien, doctor.- dije limpiando mis lagrimas.- Me duele un poco la cabeza...

- Es normal, estuviste 2 días en coma y quien sabe que tanto soñaste para que te diera un dolor de cabeza. Ten.- me entrego unas pastillas y un vaso de agua.- Tómalas, el dolor de cabeza pasara rápido.

- Gracias, doctor.- sonreí y obedecí al mandato.

- ¿Tus padres porque no están contigo? - pregunto.

- Ellos vendrán mañana para la fiesta de navidad.- sonreí.- Yo vine con un grupo de amigos a visitar a mi novio.

- ¿Hablas de Shawn? - el doctor sonrió al ver como yo asentía como respuesta.- Es un buen muchacho, merece algo de amor antes de...ya sabes.- lo mire confundida y el al darse cuenta, pareció arrepentirse de haber hablado.

- ¿Qué cosa?

- Oh, no, nada nada, tranquila.- empezó a reír un poco nervioso, a mi parecer. Decidí dejarlo pasar.- Espero tengas un gran día mañana en tu fiesta de navidad.- sonrió e hice igual.

- Graci...- tocaron la puerta.

- ¿Puedo pasar? - dijo Shawn sonriendo desde la puerta.

- Claro hijo, Scarlet, llama si necesitas algo.- el doctor tomo su libreta y salió de la habitación.

- Hola, mi amor.- dijo sonriendo.

- Hola.- respondí sonriendo. El se acerco a mi y junto nuestros labios en un casto beso.

- Nathan me conto todo...¿estás tranquila con esto?

- Claro que si, fue muy raro. Soñé con todo, Shawn, todo lo que había pasado antes de mis 12 años. Había perdido la memoria en un accidente de auto, ¡¿puedes creerlo?!-dije riendo.

- Woo.- fue todo lo que atino a decir antes de echarse a reír conmigo.- ¿Has visto por la ventana? - pregunto.

- No...pero de hace tiempo escuchaba cierto bullicio, ¿Por qué? - pregunte confundida.

- Ven. - me ayudo a levantarme y me paro al frente de la ventana sin abrir las cortinas. Por instinto, cerré los ojos.- Cuando abra esta ventana...te darás cuenta de cuanta gente te apoya...-susurro en mi oído. Lentamente abrió las cortinas, para luego abrir las ventanas. El gran bullicio inundo mis oídos y al abrir los ojos, sentí que el corazón se me salía. Eran miles de chicas y chicos gritando mi nombre, con carteles de "Mejórate, Scar" o "Te amamos #TeamScar". Sin saberlo, empecé a llorar, las lágrimas caían por mis ojos como si fuera una catarata. No lo podía creer, no podía...expresar lo bien que me sentí en ese momento. Los chicos empezaron a gritar cuando me vieron llorando y Shawn simplemente me abrazo por la espalda susurrando: "No llores, hermosa", pero era inevitable. No sabía que tenía tanta gente pendiente de mi. No podía creer que aquellos chicos estuvieran gritando por mi, que estuvieran diciendo te amos hacia mi. Simplemente...llorar era mi mejor respuesta.

- ¡Los amo mucho más, chicos! - grite tratando de que me escucharan y al parecer lo hicieron por gritaron mucho más alto.- Gracias por estar siempre aquí...- mi voz empezó a cortarse mientras yo limpiaba mis lagrimas.- Gracias, en serio...-fue lo único que dije antes de que Shawn me enrollara en sus brazos.

- Te amamos, princesa.- susurro dando un beso a mi cabeza.

Nunca olvidaría este momento. En serio que no.