La caza del doncel |Drarry|

Capítulo 5: Jefe y subordinado

—Sólo llevas dos días aquí y el señor Draco ya te asigno como su empleado privado, ¿Seguro que no lo hechizaste? — Pregunto Hermione

—¡Hermione! No digas tonterías, es sólo que Harry demostró ser capaz de llevar situaciones de oficina, nosotros no terminamos ni la educación básica, si en cambio; Harry llego a la universidad...aunque no la termino. — aclaro Ron

—Él no sabe que estuve en la universidad y no, no lo hechice Hermione. —

—Es una lástima que la magia no exista, si fuera así estoy segura de que nuestra vida sería mucho más sencilla. — Dijo Hermione

—Deberían irse a dormir, mañana tengo que estar en el despacho y no quiero tener cara de muerto por no dormir. — Hablo Harry.

—Harry es un sujeto importante, Hermione; vámonos de aquí antes de que nos hechice — Ron se iba riendo mientras jalaba a Hermione hacía la salida de su habitación.

Harry despertó muy temprano, no tenía ganas de seguir durmiendo. Se encamino al despacho del señor Draco que suponía tenía que estar ahí ya.

—Tenemos que esperar más tiempo Astoria, no quiero que mis padres se ilusionen y al final todo salga mal. —

—Para ti todo son excusas Draco. Nuestro compromiso lleva más de un año y aún o te decides cuando será el día de nuestro matrimonio. Y ahora estoy aquí con un embarazo que no quieres revelar porque temes que pueda abortar. —

—Sera mejor que te vayas, no tardara mucho para que venga Harry y no quiero que alguien más se entere de nuestra conversación. —

—Ese chico no debería estar aquí, es un foráneo que no conocemos. Si algo pasa en esta casa será su culpa. — En ese momento la puerta se abrió y dejo ver a una Astoria muy furiosa. — ¿Cuánto llevas escuchando nuestra conversación? — Harry no sabía que decir. — ¡Contesta! —

—A...a penas... apenas llegue. —

—Astoria, te pido que te retires y nos dejes a solas. — Hablo Draco desde su escritorio.

La prometida de Draco se fue muy furiosa, parecía que si alguien se le cruzaba lo golpearía hasta el cansancio.

—No era mi intensión escuchar, señor. — Hablo Harry

—No te preocupes, sólo; no digas nada de lo que escuchaste. — Draco miro a Harry. — Coge las cartas y léelas, si alguna tiene un mensaje importante me la devuelves, si son cosas sin importancia déjalas en una esquina para después contestarlas. —

—Sí, señor. — Contesto Harry mientras cogía todas las cartas que estaban sobre el escritorio.

La mañana fue un silencio total, Draco no le hablaba a Harry, y Harry sólo le daba las cartas que eran de suma importancia.

—Ya terminé con todas las cartas, señor. — Hablo por primera vez Harry

—Bien, necesito que escribas una misiva informando que mañana no poder presentarme a la audiencia porqué me es imposible salir de Shaftesbury mañana. —

—¿Usted es abogado? — preguntó Harry

—Claro, pensé ya lo sabías. —Draco miró a Harry. — Usualmente la gente del pueblo sabe a qué se dedica todo mundo

—Bueno, yo no vivía aquí hasta hace menos de unos días. — Aclaró Harry

—Ahora sé porque no te lograba identificar, ¿Eres de Inglaterra o de otro lugar?

—Inglaterra. —

—Es bueno saberlo. – Draco le dio un par de hojas a Harry — Ahora, termina la carta y ve por algo para merendar, tenemos muchos documentos que arreglar. —