Una familia ¿de mentira?

•8• ¿Te casarías conmigo?

El tiempo se pasó casi que volando, el tiempo del festival culinario de Tom y Sabine redujeron su plazo y para luego de un año y tres meses ya habían vuelto a casa.

Adrien y Marinette les explicaron lo que pasó con el padre de Adrien y él no estaba de acuerdo con dejar a su novia sola, eso le pareció a Tom como un verdadero hombre, por lo que le dieron permiso de quedarse con él pero Adrien les prometió de que en cuanto tuviera el dinero suficiente, compraría un departamento para él y su familia.

Ambos seguian con sus carreras universitarias, Marinette estudiaba diseño mientras Adrien estudiaba negocios, pasados unos meses pidieron los papeles de adopción de Louis, fue un proceso bastante largo y difícil porque el pequeño no había sido enviado al orfanato, sino que lo habían dejado en equis casa, pero cuando los trabajadores sociales y hasta el juez notaron que Louis estaba en perfectas condiciones, les otorgaron la oportunidad de ser sus padres adoptivos.

Adrien seguía trabajando como modelo de la empresa Agreste pero lo hacía porque no quería que su padre tuviera una crisis tanto emocional como financiera, mientras su novia, trabajaba en una pequeña boutique que ella y el rubio fundaron, ambos se tornaban en sus horarios para poder cuidar al bebé, debido a que ahora tenía tres años, era bastante inquieto y constantemente quería jugar con su padre, Louis también amaba jugar con la ojiazul pero al ser del género opuesto, ella no era muy bueno con juegos de niños.

-¿Y cómo va todo con Marinette? - le preguntó Luka

-Cierto. Viejo, no nos has vuelto a platicar sobre "eso" - el pelinegro le dio un codazo - ¿Qué?

-Nino... ¿Es en serio? - molesto

-No hablo de ese "eso" Luka, ¿No te enteraste? Adrien le quiere pedir matrimonio a Marinette - emocionado

-¿De verdad? ¿Realmente te has animado?

-Sí, Marinette y yo ya tenemos bastante tiempo juntos, convivimos mucho cuando éramos adolescentes, tenemos buenos trabajos y además de que tenemos a este pequeño torbellino que nos despierta todos los días a las 6:30 a.m - le hizo cosquillas al niño, que comenzó a reír

-Entonces nosotros te ayudaremos con el anillo - dijo el ojiazul

El rubio dejó a su hijo con su hermana mientras él y su dúo de amigos iban a una joyería para conseguir el anillo perfecto.

-¿Qué te parece este? - le dijo el moreno, mostrándole un anillo de color naranja

-A Marinette nunca le gustó el naranja

-¿Y este? - preguntó el de puntas negras, mostrándole uno de color fucsia

-Ella prefiere los tonos cálidos... Aguarden... Ese es el indicado

El trío se acercó a una vitrina en donde había un anillo con un diamante blanco y con detalles de una flor en el aro.

-¿Ha decidido qué sortija llevará... El que sea que vaya a comprar? - dijo la vendedora

-Sí, me gustaría comprar éste por favor - mencionó el rubio

-Buena elección, ¿tiene las medidas de su pareja?

-Sí - Adrien le indico cuáles eran las medidas

-Muy bien, dentro de un mes su sortija estará lista - amable

Los tres se despidieron de la encargada para posteriormente salir de la tienda.

-Wow, eso fue rápido ¿cómo fue que tardamos tan poco hermano? - preguntó Nino

-Ya más o menos tenía una idea de que anillo darle a Marinette, así que solo era cuestión de encontrar una buena joyería. Ahora sólo resta esperar.