¿Y sabes qué era lo que más me dolía? Que al final yo siempre era una opción,
cuando él para mí, era prioridad. Que yo solo existía para él en las noches, cuando nadie veía, que yo solo recibía las sobras de un amor, cuando podía tener un amor de sobra. Que estaba jugando con fuego, cuando realmente podía arder en otro incendio.
Yo solo era la otra, y en el "Código Civil de los Amantes", exactamente en el artículo número 1, decía:“La otra no tiene derecho a meter el corazón en la relación y mucho menos a experimentar cualquier tipo de sentimientos hacia el infiel”.
Pero también estaban los artículos 2 y 3, que expresaban:
—Artículo 2: “La amante no puede hacerse de trucos para acabar con la relación del
infiel y su pareja, solo se valdrá de sus armas naturales de seducción; no podrá utilizar, y cito, ningún documento vinculante (ya sean fotos, vídeos o cualquier otro elemento)—Artículo 3: “La amante deberá buscar otras opciones, con tal de no enamorarse del infiel”
Pero realmente, no había prestado mucha atención a los artículos del “Código Civil de los Amantes”, y ¡Joder, las amantes también se enamoran!
Y allí seguía, esperando que él me eligiera por encima de todo, porque eso es lo que hacen las personas cuando quieren algo, arriesgarse, apostar por lo que sienten, ir a por todo, y ¡Diablos! Yo era capaz de hacer por él lo que nadie había hecho por mí, capaz de llegar por él, a dónde nadie había llegado por mí, pero él, la verdad, no sabía qué era capaz de hacer por mí.En particular este capítulo me ha costado un poco escribirlo, puesto que se está acercando una parte de la historia bastante dolorosa. Espero que valoren mi esfuerzo.
Los quiero un montón.❤
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Las amantes también se enamoran ©️ [Completa]✔
RomanceEntonces llegó el verano, y, el corderito (que no necesitaba su lana para protegerse del frío) comenzó a correr entre los arbustos y los campesinos que intentaban comérselo; y corrió y corrió, pero sus patitas eran demasiado cortas y de vez en cu...