[T E R C E R A T E M P O R A D A]
Por las calles de Culiacán corría el rumor, la Reina estaba de vuelta, preparada para cumplir con su eterna condena.
Con el corazón intacto ella amó a una sola persona. Pero cuando su corazón se rompió estuvo cond...
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Humo era todo lo que podían ver, su cabeza daba vueltas y sus oídos quemaban por el horrible sonido que había explotado segundo atrás. Gala, quien había sido la que inconscientemente mientras parecía perdida en sus pensamientos se había acercado más a las grandes puertas de madera que protegían la casa por lo cual fue la que recibió el golpe primero y con más fuerza, a tal grado que fue lanzada por los aires a varios metros de distancia provocándole una dura caída contra el verde pasto que se encontraba en la entrada. Su cabeza fue lo que golpeó primero y fue el Vega mayor quien reaccionó con más rapidez e ignorando aquel horrible sonido y el dolor de cuerpo y cabeza que sentían se acercó a la madre de sus hijos empezando a hablarle para que no cayera inconsciente. Gala mantenía sus ojos abiertos mirando para el horizonte con sangre corriendo de su nariz y un pequeño hilo de esta espesa sustancia también caía por un costando de su frente dándole un toque terrorífico. Parecía fuera de sí sin embargo aún con su mirada perdida y con su cara ensangrentada ignorando los llamados de aquel hombre con el que compartía vida hizo un gran esfuerzo para levantar su mano y sin decir ni una palabra apuntó al monte, Cornelio miró hacia allá viendo a lo que apuntaba y entonces pudo ver una camioneta negra saliendo a toda velocidad por ahí. -IVÁN!!! OVIDIO!!! VALENTÍN!!, SE ESTÁN PELANDO! POR LA BRECHA.-gritó aquel hombre desesperado al mirar como aquella camioneta se hacía más pequeña y más pequeña dejando muy en claro que conocía bien cómo moverse por las brechas. Aquellos hermanos se levantaron aún aturdidos del piso, más gente estaba llegando así que Ivan se limitó a gritar y apuntar a donde la camioneta había huido y más y más trabajadores comenzaron a manejar hasta ahí persiguiéndolos. Iván y Valentín se subieron a una camioneta, ninguno estaba en condiciones de manejar así que fue El Nini quien entró por el lado del piloto y saliendo a toda velocidad tras de ellos ordenándole a todos que no se les ocurriera disparar pues los niños podían encontrarse ahí, todos actuaron sus órdenes y salieron más y más camionetas tras ellos listos para acatar sus ordenes. Cornelio tomó su radio para comenzar a pedir que que estuvieran pendientes a todas las posibles entradas de Badiraguato pues era a donde ese camino llevaba, le respondieron de inmediato diciéndole que estaba forrada la entrada de badiraguato, mocoritos, Navolato, Cosalá y elota, todas las posibles oportunidades de huida estaba totalmente protegida lo que le dio al padre de los hijos una mayor seguridad. Luego de haber arreglando eso, Cornelio regreso q donde su amada se encontraba solamente para de ese cuenta de que ya se encontraba con sus ojos cerrados y ahora hasta de sus oídos había comenzado a correr aquel líquido tibio. Cornelio se arrodilló de nuevo a su lado y con el corazón en la boca rezándole a Dios que siguiera viva acerco su fría mano ahora temblorosa y sudada a su cuello esperando poder encontrar el latido de corazón de aquella que era la dueña del suyo.
Por otro lado, aquella peli negra manejaba a la mayor velocidad que había manejado jamás, los llantos de aquellos niños estaban frustrándola demasiado, miraba por el retrovisor cada segundo nada más para mirar como un ConVoy de camionetas se le acercaban cada vez más, iba a estar perdida, no iba a poder salir de esta, cada vez se ponía más nerviosa y sin ideas de a donde dirigirse, había crecido acá, sabía como moverse, sabía todos los caminos a los que podía salir pero también los conocía lo suficiente para saber que para estos momentos todas las entradas y caminos estarían tapizados de gente armada esperando que saliera para reventarla a plumazos.
No había salida, estaba perdida y lo sabía Sabía a lo que se arriesgaba, sabía que se estaba buscando su propia muerte y sabía también que no podía quejarse, ella era la única responsable, ella había pasado toda su vida planeando este momento, día a día formulaba el plan, día con día analizaba las posibilidades y se preparaba para que el día llegara, y este sería el día Gala siempre había tenido lo que ella había querido Gala siempre había sido la consentida Gala siempre había sido la importante Gala siempre había sido la de los corridos Gala siempre había sido amada Gala siempre había tenido a quien ella quería Gala siempre había sido la bonita, la inteligente, la poderosa Gala siempre había sido la favorita Gala siempre había tenido todo en la vida Gala, siempre era Gala Así que ella ella le arrancaría lo que más amaba, y si tenía que morir, morirían todos.
