A VAMPIRE DREAM

Por siempre

Cuando nos conocimos no pensé que llegaría a amarlo. Después de enamorarme como idiota de ese amargado, me sentí como una completa masoquista. Ino me advirtió, Sai e incluso Naruto, pero como suelen decir, el corazón te lleva por un camino que la mente no controla. Los momentos que más recuerdo y jamás olvidaré son aquellos en los que el participa. Por ejemplo, aquella vez que intentó morderme. Más presente esta cuando Karin me cortó el cabello y él me ayudo. Y cuando me besó y se enceló cuando estaba en la discoteca...Pero el que está por encima de todos esos es el de cuando fui yo la que quise salvarlo. Claro, una humana contra cuatro vampiros no es lo más lógico pero la intención cuenta. Además, al final sí lo pude ayudar. No importa que me hayan matado, se que haberle dado mi sangre era lo mejor que podía haber hecho para ayudarle. No me importó ni me importa lo que haya pasado conmigo, mientras Sasuke este bien no encuentro ningún problema. De todas maneras, no creo ser indispensable para nadie. Ino será feliz con Sai pase lo que me pase y mi tía Tsunade también, después de haber sido la única capaz para donarle sangre, su vida esta asegurada hasta dentro de muchos años. Mis padres...ellos estarán bien también. Sé que mi hermanita Konan podrá hacerlos felices. Todos a los que amo estarán bien. 

Ahora no sé que pasará conmigo. Me siento perdida en un vacío enorme. Hace un rato que me hundí en unas extrañas aguas negras. Extrañamente aunque haya pasado mi tiempo límite para aguantar el aliento, no siento arder mis pulmones exigiéndome aire y tampoco tengo la necesidad de respirar. No siento nada, en realidad. Mi cuerpo flota en este universo sin sentido, sin rumbo, sin una razón para volver. 

Algo comenzó a dolerme horrores en mi pecho. Cuando fui a mirar, en el lugar que antes ocupaba mi corazón había un hueco por el cual veía todos los recuerdos de mi vida. Mis padres en mi cuarto cumpleaños, cuando entre a la primaria y después secundaria, mi graduación y el nacimiento de Konan. Todos ellos despidiéndose de mi cuando me marche a la universidad de Konoha, cuando me encontré con Ino y ese mismo día cuando fuimos a aquella discoteca, donde toda mi vida cobró sentido. Cuando lo conocí a él. Sasuke.

Algo me desgarró parte del cuello y mi mano derecha. Quise gritar pero por más que intentaba, ningún sonido escapaba de mis labios. La desesperación me consumió. No sabía que estaba pasando. El hueco de mi corazón se expandió más hasta que me empezó a consumir. Sentí que me ahogaba. Mis pulmones ardían. ¿Me estaba muriendo? Intenté encontrar la superficie para poder respirar pero ni siquiera sentía los dedos de las manos o pies. De repente me convertí en nada. Mi cuerpo físico había desaparecido, solo mi alma flotaba en la negrura en la que me encontraba. Una luz apareció, iluminando un par de cuerpos. Cuando los vi bien, pequeñas lágrimas empezaron a salir de mis ojos. 

Era yo. Sasuke me sostenía entre sus fuertes brazos, con su cabeza enterrada en mi pecho. Ambos estábamos manchados con mi sangre. Mis ojos estaban perdidos en un infinito indecifrable. Al fijarme mejor, el pelinegro emitía algunos sollozos. ¿Estaba llorando? ¿De verdad había muerto? Cubrí mi cara con mis manos, llorando incontrolablemente. Quería estar con Sasuke. No soportaba verlo de esa manera. Él, que nunca mostraba como se sentía, llorando desesperadamente ¿por mí? Quise decirle que todo estaría bien, que estaríamos juntos, pero no podía. Sería un engaño. Ahora lo se. Estoy muerta. 

Las voces de todas las personas que amé resonaron cruelmente en mis oídos, todas ellas recordándome que no los volvería a ver. Mis padres,Konan, Ino, Sai, Naruto, Sasuke...Ahora estaba sola, lejos de nadie, perdida en un mundo extraño y vacío...

- Sakura

¿Aguien había dicho mi nombre? ¿Quién? ¿Me podría ayudar? 

- Te amo

El recuerdo me golpeó fuertemente. Ese era Sasuke...¿cómo lo había podido olvidar? Esas palabras...me las había dicho antes de que perdiera el conocimiento. Entonces, ¿seguía viva?