La peor historia de amor

Epilogo

Fabiana alió del tocador muy nerviosa, su padre no estaba allí para llevarla al altar, trato de animarse diciéndose que sólo se debía a que no era una boda convencional, pero con el dolor de su corazón sabía que incluso si fuera el matrimonio más tradicional del mundo y con un chico prediseñado por sus padres aún así nadie la llevaría al altar. Tan perdida estaba en sus pensamientos que la joven no pudo darse cuenta de la zancadilla que le hizo la chica a su lado hasta que estuvo en el suelo.

—¡¿Pero qué te sucede, Cress?!

La joven a su lado empezó a jugar con uno de los coloridos tubos de plástico que se mezclaban entre su cabello.

—Yo no fui, Odi, fue la Tierra llamándote, Tierra llamando a "Odette", Tierra llamando a "Odette". Cielos, Fabiana ¿Nunca oíste hablar de la gravedad?

—¡Pura! No es divertido, es mi boda y me botaste ¿Qué te pasa?

—Primero que nada llámame Cress, como mi segundo nombre y en segundo lugar yo pensé que la tierra en un vestido ser veía mejor que rostro sin sonrisa. ¿De verdad prefieres un vestido limpio a una sonrisa pura? Creo que tu querido Lan elegiría la sonrisa.

—Lo siento tanto, Cress —dijo "Odette" mientras sacudía su vestido.

—¿Qué haces sacandote el polvo? ¿Acaso desprecias la bendición de la pachamama?

Esta vez "Odette" no pudo evitar reír y luego sonrió.

—Tu ganas, Cress. Ahora mejor ve a tomar tu lugar como dama de honor.

—Oh, sí, ire a molestar a Lan, Lan. Muero por oír cuando digan "Y usted Lancelot acepta a Fabiana como su mujer para blah blah blah".

—Por favor no lo molestes, Cress, ya podras reirte llegado el momento.

Cress, con un gesto exagerado recogió el borde de su vestido, el cuál apenas llegaba hasta las rodillas y era una extraña mezcla de cyberpunk y lolita, y corrió como si fuera una princesa de pelicula con un pomposo vestido.

"Odette" dio un suspiro y contó, una vez creyó que Cress estaba en su lugar decidió proseguir y acercarse al centro del evento friki, el cuál como era organizado por unos amigos suyos le permitieron hacer la boda simbolica allí, el matrimonio civil ya tenía una semana desde que se había firmado.

Una vez salió del pasillo vio a todos, sus amigos le sonrieron de vuelta y aquellos que habían asistido al evento y estaban curiosos por la boda que se daría allí fijaron su mirada en ella mirandola de arriba a abajo, hubo mucha gente que tomo fotos de ella, no era un cosplay, pero s elas había amañado para que pareciera un vestido salido de algún anime, incluso se quedaría así el resto del evento. Al centro, delante de quien oficiaba la ceremonia y entre su dama y su padrino de bodas estaba su futuro marido, no pudo evitar sonreirle un poco más.

Camino hacia mientras escuchaba por fin la que sería su marcha nupcial, ya que le había dicho a una amiga, Isabel, que la sorprendiera con la canción, y vaya que lo hizo no esperaba que fuese música clásica y mucho menos la danse macabre. No pudo evitar sonreír, no creía que hubiese podido hacer tan buenos amigos después de dejar la escuela de toda la vida y aunque a veces extrañaba sus locuras siempre tuvo nuevas excentricidades de parte de la gente que conoció.