恨 (Hèn) | 𝘊𝘩𝘰𝘪 𝘚𝘰𝘰𝘣𝘪𝘯 (Editando)

✦⋯１６ ┈┈┈•

Ha pasado sólo una semana desde lo sucedido con los padres de Hayeon. No ha venido a la escuela desde entonces y yo me encargué de justificarla con sus profesores.

Hace dos días se llevó a cabo el entierro de sus padres, algunos familiares y amigos cercanos se encontraban allí, yo también estaba, sé que no soy tan cercano a ella aún, pero me vi en la necesidad de apoyarla, sé que necesita mucho un hombro sobre el cual llorar y yo estaré ahí para ella.

"El sol caía sobre todos los presentes, Hayeon llevaba un vestido color negro, con zapatos del mismo color al igual que sus lentes de sol, claro esta que los lentes no eran para el sol, yo mismo me encargué de que no se los quitase en todo el tiempo que llevamos aquí.

—Tranquila, ya pasará. —la abracé por los hombros y al instante comenzó a llorar más, en verdad me dolía verla así, tan frágil y vulnerable. Me separé de ella y coloqué mis manos sobre sus hombros haciendo que le mirara a través de los lentes.— Verás que todo esto quedará como un mal recuerdo y volverás a sonreír como lo hacías antes ¿vale? —asistió con un puchero."

En estos momentos ella se está quedando en casa de sus abuelos maternos, que por supuesto se encontraban igual de tristes que ella por la pérdida de su hija y su yerno.

En la cafetería los chicos también se encuentran preocupados por ella y decidimos ir a verla en unos días.

(...)

—¿Creen que sea buena idea? Aún estamos a tiempo de irnos.

Los chicos esperaban impacientes a que tocara el timbre de la casa de los señores Lee, los abuelos de Hayeon.

—Venga ya hombre. —Yeonjun avanzó unos pasos hasta tocar el timbre, luego volvió a su puesto; al lado de Yeji.

Me puse nervioso cuando escuche los pacientes pasos acercándose a la puerta, al ser esta abierta nos encontramos el abuelo de Hayeon.

—Oh, muchacho eres tu. —dio dos palmadas en mi hombro.— ¿Vienes a ver a mi nieta?

—Si señor Lee, vengó con unos amigos.

Achicó sus ojos para poder fijarse bien en los chicos tras de mi. Ellos le hicieron una reverencia desde donde se encontraban.

—Pasen pasen. Mi nieta está en el jardín con mi esposa.

El primero en entrar fui yo, luego Yeji y al llegar el turno de Yeonjun el señor Lee le hizo un comentario sobre su cabello que nos hizo reír a los tres.

Recibimos las indicaciones para llegar al jardín, sólo debíamos de pasar el largo pasillo de la casa. Nuestro recorrido estuvo basado en ver las fotos colgadas en ambas paredes, vaya que era en muchas.

Por fin salimos al jardín encontrándonos con Hayeon ayudando a su abuela a regar los distintos tipos de flores que allí se encontraban. Ambas estaban de espaldas por lo que no se dieron cuenta de nuestra presencia.

La señora Lee parecía estarle contando algo a su nieta mientras ella escuchaba atentamente.

—...y fue así como tu abuelo durmió una semana en el sofá. —concluyó dando la vuelta y encontrándonos a los tres observándolas.— Oh, tienes visitas cariño.

Algo confundida Hayeon se dio la vuelta con el ceño fruncido pero al vernos una pequeña sonrisa se asomó por sus labios. Dejó la recadera en el suelo y corrió a abrazar a Yeji.

—No me dijiste que vendrías. —su tono de reproche casi que pasaba desapercibido por la felicidad que tenía.

—Sorpresa. —dijo en medio del abrazo.

Al separarse vino hasta mi y me dio un abrazo. Podía sentir lo tensa que estaba y no la culpo, yo estaba igual.

—Si, gracias por el amor que me das Jung.

Agradecí internamente a Yeonjun por hablar y hacer que rompamos nuestro tenso e incómodo abrazo.

—¿Pero que dices fresita? Sabes que extrañé tus absurdas frases. —se dieron un corto abrazo y al soltarse, Hayeon le dio un pequeño golpe en su cabeza con la palma de su mano.

—Jung. —la regañó su abuela.

—Si, ya sé abuela.

—Bien, iré a hacer galletas, ustedes se pueden quedar aquí si desean.

—Vengan.

Hayeon nos guió a una mesa con cuatro sillas en una parte más apartada de todas las flores de su abuela.

—Es muy linda la casa. —dijo Yeonjun mirando a su alrededor.

—La tienen desde que se casaron, hace unos cuarenta y cinco años aproximadamente.

Los tres nos quedamos muy asombrados por la cantidad de años que sus abuelos llevan casados.

—Waa, eso si es amor de verdad.

Todos asentimos a lo que dijo Yeji.

Ojalá algún día yo pueda tener un amor así.

(...)

Hayeon nos dijo que en una semana estaría de vuelta en la escuela y el trabajo por lo cual todos estábamos muy felices.

Como la casa de sus abuelos queda casi en las afueras de la ciudad, ella se irá a vivir a casa de su tía, con su prima menor.

Y bueno, ayer volvimos un poco tarde de casa de los señores Lee y por ende hoy desperté muy atrasado para ir a la escuela pero ¿qué más da llegar tarde un día? No es que siempre llegue tarde, incluso creo que con los dedos de una mano podría contar las veces que me he atrasado.

A primera hora tenía deporte, el profesor tuvo que ausentarse por situaciones familiares y nos dejaron pasar ese tiempo en el patio trasero.

Aún no tengo buenos amigos en la escuela, sólo compañeros. Quizás se deba a que en ocaciones -casi siempre- soy muy tímido -según mi madre-.
Aquí la mayoría tiene su grupo de amigos y los que no, pues, prefieren estar solos. Me he intentado acercar a algunos grupos de personas pero recapacito y es mejor estar sólo.

Hayeon no me odiesㅜㅜ

¿Qué haces?

Dormía muy comodamente
hasta que el molesto ruido
de un mensaje me despertó.

Lo siento:(

¿Por qué no estas en
clases?

El profesor faltó.

Genial.

Oye...

¿Qué?

No, nada.

No te distraigas rascacielos