El CHICO DE AL LADO #1 {Larry} COMPLETA

CAPÍTULO 1

-Uff, malditas cajas. ¿Niall, que es lo que traes aquí?.

Murmuró Louis, mientras se tallaba la espalda. Estaban cambiándose a su lujoso apartamento, decidieron hacer ese maravilloso cambio según para tener privacidad.

-¿Cuantas faltan, Lou?- preguntó Niall desde la sala.

-Una.

-Yo voy por ella.

Niall, hijo de papá y mamá, harto de no tener privacidad, de echo, él había dado esa opción de vivir juntos ya que un amigo suyo le había dicho que se iría a Milán a su pasarela y el apartamento lo vendería.

Entonces Louis y Niall fueron los compradores.

Louis avanzó al blando sofá de terciopelo y se aventó generando un puf, estaba cansado ya que el había sido el encargado de subir las tantas cajas que Niall había echo.

-¡LOUISSSSSS!

-OII OII

-La maldita caja pesa mucho, ayúdame.- Él rodo los ojos para ir a ayudar al castaño que ya hacía en la puerta.

-Diablos, Niall. Te dije que no las recargaras mucho.

Ellos la cargaron entre los dos para subirla al segundo piso del apartamento. Louis, estaba súper emocionado por vivir en princess park. Dios, el siempre había querido vivir ahí. Niall se aventó dramáticamente a la cama, suspirando pesadamente. Louis sonrió de lado al ver al castaño tan perezoso.

-Nialler, levántate y vamos a cocinar algo.

-Mamón. Claro que no vamos a cocinar, apenas nos mudamos ayer y la casa con muchooo de mi esfuerzo se comenzó a acomodar. ¿Y quieres que cocine?.- el castaño hizo una mueca de ofendido, a lo que el ojiazul soltó una risita. Louis hizo una seña con su mano para que se levantara y el castaño encogido de hombros lo siguió.

Bajaron las escaleras hasta llegar a su amplia cocina, ambos se recargaron en el marco de la puerta y fruncieron el cejo al ver el tremendo desorden que tenían enfrente.

-Mmm, mejor compremos pizza.- Ambos se dieron vuelta al mismo tiempo dirigiéndose con cara de espanto a la sala.

-Yo quiero una hamburguesa, sin...- el ojiazul no pudo terminar ya que su amigo lo hizo por el.

-Pepinillos, ya lo sé.- El Castaño se encargó de comprar la comida, Louis sonrió al ver el atardecer por el gran ventanal de vidrio que tenía enfrente.

Niall se sentó a su lado palmeando su hombro.- me alegra vivir contigo, Lou.

-A mi también.- Louis le sonrió a su compañero de vida, desde niños fueron unidos tanto que ellos creyeron ser hermanos separados al nacer.

Comieron y cada quien subió a su habitación a dormir, la mudanza después de todo los había agotado.
 
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Louis se había levantado temprano, ahora se encontraba pegado al ventanal viendo el amanecer con una taza de te humeante en su mano. Escucho los pasos muy ruidosos de Niall bajar por las escaleras de vidrio y negó con una sonrisa de lado.

-¡¡BUENOSSSS DIASSSS MUNDO, YA DESPERTÓ EL AMOR DE SUS VIDASSS!!.

Louis volcó los ojos y se dirigió a la cocina para prepararle su te a Niall, esa era una costumbre entre los dos. Aunque quisiera fingir que no le gustaban las cosas ramdo de Niall, no podía ya que eso era lo esencial para poder tener un día alegre.

-Niall, son las ocho de la mañana y no creo que nadie te quiera.- El Castaño abrió los ojos y boca en forma de sorpresa.- Pero que te pasa, ¿acaso no me vez?, Soy una obra de arte.

Louis se rió para negar con su cabeza. Le ofreció su te y Niall que  lo bebió. Se arreglaron para ir a la Universidad, estaban en su último año, último. Niall se la pasaba diciendo que haría una fiesta en grande ya que se graduaban las maravillas de la Universidad.

A lo que Louis le seguía la corriente. -Hola, chicos.- Los saludo bella, una amiga que estudiaba economía al igual que ellos. Iban en una de las mejores universidades de Londres, una privada e importante en jerarquías.

-Hola, bell.- la saludo Louis y Niall con un beso en la mejilla.

-¿Y Gigi?- pregunto el castaño.

-Ohhh, está con sus amigas.- señalo la pelinegra detrás de ella, Gigi, era un tanto diferente a su hermana, bella prefería llevarse más con los chicos y gigi no, ella prefería estar con sus amigas pero al igual a veces pasaba todo el día con sus amigos de infancia.

Los chicos entraron a clases, salieron a sus horas libres para dirigirse al apartamento. Louis y Niall habían invitado a bella y gigi a conocer su lujoso apartamento. Ambas hermanas al entrar se quedaron con la boca abierta.

Gigi se aventó en el gran sofá negro a lo que bella la siguió. Ambas se sonrieron mientras se recostaban en el suave sofá.

-Pero esto es enorme y lindo.- les dijo bella, gigi asintió frenéticamente.

-Gi, te quedarás sin cuello si sigues haciendo eso... Y no llegarás a ser modelo.- Le dijo Niall con una sonrisa, ella en ese momento se agarró el cuello y le volcó los ojos. Pasaron el rato platicando cuando bella recibió una llamada de su madre, ellas rodaron los ojos cuando empezaron a escuchar su sermón que les daba por el celular.

-Bueno, nos vamos. Nos vemos mañana, se les quiere chicos.- La pelinegra tomo su bolso y se paro en la puerta a la espera de su hermana.

-Igual. Con cuidado.- Niall y Louis las despidieron en su puerta viéndolas marchar, Cerraron la puerta y se fueron a la sala nuevamente.

-La madre de las chicas es un tanto castrosa.- Lou hizo una mueca ante lo que había dicho, pero sabia que tenia razón. tenían 23 años y aun las hostigaba como chicas de dieciséis.

-¿Un tanto?, demasiado diría yo. Es insoportable.- Louis negó con la cabeza y Niall pego un gritito, se había acordado de algo.

-Lou, ayer que subí la caja escuche que el Pent-house de al lado está vacío.

-¿Y?

-Nada, sólo te estaba contando.

Platicaron un rato. Ahora Louis bostezaba frente a su MacBook, Niall hace unas horas lo había dejado para irse a dormir. Louis frunció el cejo al escuchar ruidos por fuera de su apartamento, se levantó para ir a ver quién era pero luego tomo la decisión de subir a su habitación. Murmuró algo con voz adormilada ya acostado en la cama, quedándose dormido en ella.

Niall siempre le decía que se veía diminuto en su cama, a lo que él se molestaba.