Isabella una jovencita hermosa y valiente, la cual pierde todo y decide cobrar venganza, pero no está preparada para las sorpresas del destino, lo cual complicará aún más su vida, caminando hacia lo desconocido del amor.
Al día siguente al despertar, ellos ya no se encontraban ahí, así que busque a la reina para poder hablar con ella.
-Su majestad cre que podamos hablar? (Pregunté)
-Por su puesto querida, dime.(contestó mientras sostenía un libro en sus manos )
-Quería pedirle el poder retirarme de aquí, pues tengo el deseo de irme a vivir con mi amiga Sofía, pero no se preocupe por su infusión , yo me encargaré de mandárselo a tiempo.
Ella me miro y espero un momento para contestar, luego cerró el libro que traía en sus manos y me miro. -No es solo por los remedios naturales que me preparas Isabella, ah sido el cariño que te tengo el que me obliga a no dejarte ir. Lo siento pero lo mejor es que estés con nosotros, tu familia. (Contestó y salió de la habitación)
Mi familia? Mi familia estaba muerta Gracias a la suya, pensé dentro de mi en ese momento así que no me quedo de otra y seguir ahí.
Pasaron 4 semanas y ellos al fin han regresado, ella trataba de aparentar que todo estaba bien, tratar de lucir ser una pareja feliz pero el no demostraba lo mismo, pues el ni si quiera dormía en la misma habitación con ella.
Sinceramente mil cosas pasaban por mi cabeza pero no me correspondía así que traté dejarlo de lado por un momento.
Mientras tanto Alexander y yo nos hicimos muy cercanos en ese tiempo, pues el siempre ah tratado de mantener mi mente ocupada y la verdad si lo ah logrado, se ah convertido en un amigo muy especial.
Esa tarde me dirigí a la biblioteca mientras trataba de agarrar un libro un poco alto para mi, cuando escuche. -Te ayudo? ( Henry )
Mi corazón comenzó a latir queriéndose salir de mi pecho, pero traté de no demostrarlo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Estoy bien gracias!
conteste viendo por encima de mi hombro evitando el contacto visual, pero claro no sirvió de nada se rió y se acercó a darme el libro.
-Aqui tienes.(Henry)
-Gracias.(conteste y me di la vuelta)
-Como has estado? (Pregunto Henry)
Evitando que me fuera, gire y lo vi. -Muy bien y tú?perdone! Usted?
-Sigo siendo el mismo Isabella, no es necesario que me trates de usted. Y me da gusto que tú estés bien, yo no puedo decir lo mismo. (Contestó)
-Lamentó que no estés bien. (Respondi)
Luego se acercó a mi y tomo mi mano. -Yo lamento tanto no estar con tigo, cada día de mi vida será un eterno castigo por haber traicionado tu confianza.(Henry)
Pude ver la tristeza en sus ojos pero no podía hacer nada, así que pedí disculpas y me retiré de ahí, pero es posible que el me siga amando? No puedo estar con el ahora que el se ah casado con Elizabeth pues yo no podía ser su amante, así que tenía que comenzar a guardar mi distancia, más no sabía como ,si me di cuenta que el aún me amaba igual que yo a él.
