Hoy llueve, no se oyen las gotas en los tejados...
Pero está lloviendo, llueve tan fuerte que voy a ahogarme...
¿Y sabes qué es lo peor?
Que está a punto de ahogarme siempre pero no me mata, y yo... Yo me quiero morir.
Mi corazón está lastimado, tanto que ya no recuerda el placer de una sonrisa...
Quiero parar de llorar, pero...
¿Cómo?
- ¿Podemos salir el sábado? Me gustaría salir contigo y pasar un rato juntos...
- Puede que sí, te aviso ¿Va?
Un pequeño suspiro salió de mi boca, podría ser el ápice que de inicio para que las cosas empiecen a salir bien...
Tonta... Eso es lo que soy...
Sí, soy tu juguete soy un puto juego para ti si no te interesó saber nada de mí cuando te incumbía y era tu responsabilidad, cómo iba a importarte verme ahora...
Pero no me importa ser tu juguete...
Y no...
No soy una víctima.
Esto es culpa mía, eres mi droga, eres mi manera de salir de ma realidad aunque me hagas tanto daño, aunque cada vez que salgo del trance me sienta peor, y solo busque una excusa para verte y anestesiar este dolor insoportable...
Me pregunto si realmente vale ma pena curarme recomponerme y hacer mi vida, una vida que no tengo y no me importa si no estás en ella...
Es una guerra que no me importa pelear, no me importa cuantas bajas y heridos hayan, tal vez solo quiera pelear hasta morir...
Llevo las de perder hoy contigo, y cuanto más me lo digo, más te quiero acompañar...
Yo sé que no eres mío, que tienes derecho a no quererme a odiarme a destrozarme porque no es tu obligación ser mío, no es tu obligación quererme como yo te quiero...
Pero mataría por tu cariño por tus besos y por tu amor...
Dame unos minutos para sentirme bien, dame uno minutos para ser nosotros dos, y échame al siguiente.
¿Qué más da?
Si ya nada en este mundo me importa.
Me tengo lástima.
