Arabiya layla Gendan

6 Meses

Se escuchaban las olas chocar con las rocas, así como las hojas de los arboles al mecerse con el viento, solo era roto por el leve choque de dos agujas, las cuales creaban una hermosa manta.

Dio un suspiro para admirar el paisaje mientras un leve relincho atrajo su atención.

- ¿Ya es hora de volver? – se escucha una coz – de acuerdo

Con cuidado y apoyo de su caballo, Judal se puso de pie al mismo tiempo que acariciaba su barriga de ahora ocho meses, aunque ya faltaba poco tiempo para que su bebé naciera. Guardo el estambre y el tejido en una pequeña canasta, mientras Antares se hincaba para que el azabache lo montara y volvieran al palacio.

A paso tranquilo, Judal seguía acariciando su barriga al mismo tiempo que recordaba los meses pasado, luego que se enterara de su embarazo.

FLASH BACK

Luego de enterarse de que su esposo estaba en cinta y se disculpara con el emperador de Kou, Sinbad y Judal estaban frente a frente

- Sinbad, ¿no estas decepcionado? – pregunto Judal

- ¿Por qué habría de estarlo? – sonriendo – oh, ¿es por lo que dije? – el azabache asintió – bueno, es verdad, eres todo lo que necesito – acariciando su mejilla – pero eso no significa que vaya a rechazar este regalo.

Judal sonrió de alegría al sentir la mano del peli morado sobre su vientre. Ja'far se acercó a la pareja

- Sin, perdona, pero la gente del pueblo se ha reunido

- ¡Genial!, gracias, Judal

El menor asintió para tomar la mano del mayor con una sonrisa, para ambos dirigirse al balcón principal del palacio. La gente estaba atenta y pronto comenzó a gritar de alegría al ver salir a la pareja, pronto hubo silencio cuando su rey alzo la mano.

- ¡Pueblo de Sindria!, ¡hoy acabo de recibir la mas grande noticia del mundo! – sonriendo - ¡sé que será raro, pero al mismo tiempo es un milagro!, ¡Sindria será bendecido con la llegada de un heredero o heredera al trono de nuestra nación!

La gente estaba incrédula al principio, pero al ver a Judal acercarse, pronto los aplausos y gritos de jubilo no se hicieron esperar. El azabache no pudo evitar llorar de felicidad.

4to. Mes

Varios paquetes comenzaron a llegar al palacio de Sindria, provenientes de otras naciones y del mismo pueblo de su nación, todos dirigidos a Judal, pero antes de que pudiera abrirlos.

- Espere un momento por favor majestad – hablo uno de los guardias – tenemos que ver primero que sea seguro. Ya mandamos llamar a la señorita Yamuraiha

Judal suspiro al mismo tiempo que sonreía con ternura pese a las exageradas medidas de seguridad que Sinbad había tomado: desde ponerle seis de sus mejores soldados como guardaespaldas, hasta pedirle a Yamuraiha que estudiara hechizos que le permitiera ver si sus comidas o bebidas servidas al azabache pudieran tener algún ingrediente sospechoso que pudiera dañar a Judal o al bebé. Incluso coloco mayor vigilancia especialmente en las noches

- Perdona la demora Judal – sonrió la maga

- Está bien

La peli azul comenzó su hechizo con figuras de agua, las cuales, mostraban a quien o quienes habían preparado y empacado el obsequio o platillo. Cuando estos mostraban actuar normalmente, Judal abría sus paquetes o comía sin problemas. En el caso de los regalos, estos eran juguetes, ropa, muebles incluso una cuna que el circo donde vivió Judal le había enviado, junto con una promesa de una futura visita.