Capítulo 39

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*Narra Pablo*

Yo- Anda vámonos a casa.

Me sonríe y nos vamos caminando hacia el coche, guardo la guitarra en el maletero y le abro la puerta del asiento del copiloto.

Se sienta y me mira, piensa algo pero no se el que, veo que esta impactada, sorprendida... Feliz pero a la vez cansada así que de doy un beso en la comisura de los labios rodeo el coche y me siento en mi sitio. Estamos todo el viaje callados, los dos pensativos. Por fin llegamos a casa, le abro la puerta y sale.

Me mira con expresión de ternura.

_____- ¿Esto es un sueño?

Yo- Me temo que no.

Le doy un beso lleno de ternura en los labios y me sonríe.

_____- Te quiero.

Yo- Creeme, yo también.

Nos adentramos en la casa y cuando cada uno se va a ir a su habitación después de tantas emociones confesadas _____ me plantea algo que no había pensado.

_____- Pablo... ¿Que somos?

No tardo en contestar con la pura verdad.

Yo- Somos dos locos enamorados.

La hecho hacia atrás y la beso con amor y pasión.

_____- Me gusta como suena.

Nos sonreímos mutuamente, nos damos las buenas noches y cada uno se va a su cuarto pensando en todas las confesiones de amor que nos habíamos dado. Nos amábamos.

*Narra _____*

Me despierto. Estoy en mi cuarto con mi pijama y un cumulo de emociones encima que no puedo sopesar.

Yo-¿En serio!!!?? Estaba soñando!!!!!.No,No,No,No, sus labios eran tan reales.

Fui corriendo en su busca, no estaba en su cuarto, ni en la cocina... Ni en la casa!!!! Joder, joder, joder.

Le llamo y no contesta, que coño le habrá pasado!!!!.

Voy hacia la sala de estar y enciendo la televisión.

Presentador- Hoy un joven cantante es atropellado por un borracho al volante de un camión camino a su estudio de grabación y muere en el acto, les informamos de que ese cantante es Pablo Alborán...

Al escuchar ese nombre me derrumbo en el suelo y me pongo a llorar.

Me levanto de golpe con lágrimas en los ojos y enseguida y sin saber como Pablo esta abrazandome.

Yo- Pablo... Estas aquí... Yo...yo había pensado que te había perdido.

Me mira, en su mirada solo hay preocupación y un deje de diversión.

Pablo- Seria injusto perderme la noche del día en el que me has ganado.

Entonces era verdad, le había confesado mi amor y el también me había confesado el suyo, nos habíamos besado... No había sido un sueño.

Me relajo entre sus brazos lo miro y enseguida busco sus labios, me besa y yo suelto toda mi angustia, tensión y preocupación en ese beso, se ve que Pablo lo nota y me besa con más amor y pasión para consolarme, y lo consigue, me tiende la mano para que me levante de la cama y la acepto, seguidamente me lleva a la cocina donde esta el desayuno preparado.

PABLO ALBORÁN & TÚDonde viven las historias. Descúbrelo ahora