Capítulo III

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KATARA EXPLOTA.

Realmente Kyra no tenía muchos amigos, bueno solo a Yue en verdad

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Realmente Kyra no tenía muchos amigos, bueno solo a Yue en verdad.
Así que cuando empezó a hablar con Katara y Aang en la cena se alegró muchísimo, le parecían dos niños que por desgracia (como toda la gente de este siglo) se habían tenido que involucrar en una guerra donde el causante había muerto hace muchos años.

Kyra sabía que Katara se llevaría una decepción al escuchar al viejo Pakku hablar de su política de que las chicas no pueden aprender Agua Control, realmente esperaba que el viejo entrara en razón de una puñetera vez.

Lo que más le gustó al final de la noche fue que decidieran que ella les enseñaría la ciudad por la mañana siguiente, lo demás... bueno ver a Sokka intentar coquetear con Yue para acabar en un silencio incómodo deja de ser divertido a la decimocuarta vez.

¿Lo que más le desagrado? Bueno resulta que Kaito la había interceptado por la noche cuando se iba a casa, le había vuelto a explicar que ella era de su pertenencia con los ojos furibundos, mientras le agarraba de la muñeca hasta dejar un moratón que le seguía doliendo.

—No vales nada, ¿entiendes?, deja de intentar andar de puta con la gente.— le había dicho agarrándole la muñeca más fuerte haciendo que soltara un gemido de dolor. —Coqueteando con uno de los incivilizados de la otra tribu, también con el Avatar, que te crees, ¿que alguien querría estar contigo?

Kyra en ese momento había empezado a llorar, dios lo odiaba más que a nadie, juraba que preferiría casarse con el príncipe odioso que le había dicho Katara.

—Bueno cariño, hasta mañana.— dicho esto Kaito le dio un beso en los labios dejando que Kyra se derrumbada en medio de esa calle solitaria, a pocos metros de su casa.

Kyra no entendía como una conversación tan rápida de ese chico la acababa dejando tan indefensa.
Pero tenía algo claro, y era que mañana aunque le costara la vida le enseñaría la cuidad a Aang y Katara, que ya habían sufrido demasiado para llegar aquí.

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