"Amor" no define lo que siento por ti / Todoroki Shoto X Male¡Reader (Rescripto)

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???: ¿Es tan difícil que veas que no me gustas? —dijo con frustración, mirando fijamente al otro.

???: ¡Dame una oportunidad! ¡No haré nada malo! ¡Mahiru, por favor! —insistió, desesperado por captar su atención.

Mahiru: ¡Está bien! ¡Eres insoportable, Shoto! —respondió él con una mezcla de irritación y resignación.

Shoto: ¡Te voy a enamorar! Te lo prometo... —susurró, con una chispa de esperanza en sus ojos.

Mahiru: Lo que quieras.

Para entender lo que sucedió, debemos retroceder dos días atrás. Mahiru y Shoto no dejaban de encontrarse en los pasillos, en la cafetería e incluso una vez en la ciudad mientras Mahiru patrullaba. Un gran odio crecía en Mahiru, mientras que en Shoto, era un sentimiento cálido que lo hacía sonrojarse al pensar en el chico de cabello negro.

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Mahiru: Lo odio, sí, eso es, lo odio.

Tamaki: Odiar suena... algo, f-fuerte, ¿no crees? —dijo su amigo, preocupado por la intensidad de los sentimientos de Mahiru.

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Shoto: Lo amo, es definitivo, lo amo.

Izuku: ¿Estás seguro de que es amor? —preguntó Izuku, intentando comprender la confusión de Shoto.

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Mahiru: ¿Tú de nuevo?

Shoto: Escúchame... Por favor.

Tamaki: M-Mahiru... tal vez... debas escucharlo...

Nejire: No pierdes nada intentándolo.

Mahiru: Habla.

Shoto: Tú... Tú... ¡Me gustas!... Me gustas... ¿Ok? Me gustas desde hace mucho... y solo quiero... quiero... una oportunidad contigo. Seríamos buenos juntos...

Mahiru: Y quieres tener una relación, conocerte mejor, tal vez estar más cerca de ti...

Mirio: Mahiru... —Tocó el hombro de su amigo en un intento de calmar la situación.

Mahiru: Llegar a ser pareja, compartir momentos especiales juntos, ¿me equivoco? Nada de eso pasará, ya afrontémoslo. No me interesas, para nada, Todoroki.

Shoto: Pero...

Mahiru: Pero nada.

Después del tenso encuentro con Mahiru, Shoto se sintió abatido y confundido. Intentó olvidar lo sucedido y concentrarse en sus estudios y entrenamientos, pero no podía evitar que su mente se desviara hacia la figura de Mahiru una y otra vez.

Por otro lado, Mahiru también estaba lidiando con sus propios sentimientos. Aunque había rechazado a Shoto de manera rotunda, su corazón latía inquieto cada vez que pensaba en él. Trató de mantenerse ocupado con sus actividades diarias, pero cada momento de soledad le recordaba la cercanía que había sentido al estar con el bicolor.

El destino tenía otros planes para ellos. A pesar de sus intentos por evitarlo, seguían cruzándose en los pasillos y en los entrenamientos. Cada vez que sus miradas se encontraban, una chispa especial se encendía en sus corazones.

Una tarde, mientras Mahiru patrullaba la ciudad, se encontró con un grupo de villanos. La batalla fue intensa, y Mahiru estaba teniendo dificultades para mantenerse en pie. Justo cuando parecía que los villanos ganarían la ventaja, Shoto apareció en escena y usó su poder con maestría para neutralizar a los enemigos.

Mahiru estaba impresionado por las habilidades de Shoto y, al mismo tiempo, agradecido por su ayuda. Después de la pelea, los dos se encontraron cara a cara, sin palabras pero con los ojos llenos de sentimientos encontrados.

Shoto: Estoy aquí para protegerte. —susurró, mostrando una faceta protectora y vulnerable.

Mahiru: No necesito que te preocupes por mí. —respondió él con dureza, pero sus ojos contradecían sus palabras.

A pesar de sus palabras frías, Mahiru no pudo evitar sentirse reconfortado por la presencia de Shoto. En los días siguientes, Shoto y Mahiru seguían coincidiendo en situaciones inesperadas. Cada encuentro fortalecía el vínculo entre ellos, aunque ambos se resistieran a reconocerlo abiertamente.

Un día, durante una misión de entrenamiento en equipo, Mahiru y Shoto se encontraron trabajando juntos. A medida que luchaban codo a codo, la sincronización entre ellos era innegable. Los demás notaron la química que había surgido entre los dos y se preguntaron si realmente estaban destinados a estar juntos.

Tamaki: Chicos, ¿se dan cuenta de que trabajan de maravilla juntos?

Nejire: Es cierto, parece que se conocen desde siempre.

Mirio: ¿No será que están destinados a ser pareja?

Shoto y Mahiru se miraron, incapaces de ocultar la confusión y los sentimientos que comenzaban a aflorar.

Shoto: ¿Destinados...? —murmuró, cuestionando la idea.

Mahiru: Pfff. No seas ridículo. —dijo él, pero su voz temblaba ligeramente.

A pesar de sus palabras, los dos no pudieron evitar preguntarse si había algo más entre ellos. El destino parecía empujarlos juntos, y tanto Mahiru como Shoto empezaron a cuestionarse si debían abrir sus corazones a la posibilidad de un amor inesperado.