[Narra Valeria]
Abrí los ojos enfocándome en el reloj a un lado de mi, es temprano. Ya estamos a jueves y pronto mis pequeñas "vacaciones" acabarán y tendré que regresar a la escuela. Solo pensarlo es agotador.
Me di la vuelta para encontrarme con el chico de mis pensamientos, pero extrañamente no lo hice. Jaden no estaba dormido a mi lado.
En seguida esto me provocó una terrible sensación, la última vez qué pasó esto fue malo. Básicamente fueron los peores días de mi vida.
Temerosa me levanté de la cama y caminé al baño para hacer mis necesidades. En verdad odio cuando me llega el periodo, es una sensación horrible. Solo espero que lo que me dijo ayer la ginecóloga sea verdad, dijo que como había puesto la inyección era probable que mis ciclos próximos fueran irregulares, posiblemente más cortos. Y sinceramente eso esperaba.
Me miré algo intrigada al espejo, bajé un poco la camisa de Jaden que traía puesta y noté las manchas violetas sobre mis pechos, aún no se van desde que entramos al cuarto misterioso de Jaden.
Sin querer darle más vueltas salí de allí, de verdad espero que no haya pasado nada malo con Jaden de nuevo, no quiero volver a sufrir lo que pasó la ultima vez.
Bajé las escaleras con discreción y comencé a mirar por todo el lugar en busca de Jaden, hasta que me topé con la puerta entre abierta de su oficina, sabía que estaba allí. Asome mi cabeza solo un poco hacia adentro y lo miré sentado en su silla, ya arreglado con su formal traje negro y su camisa blanca. Mirándose tan perfecto como siempre.
Estaba mirando algo en su computadora frente a él, sé notaba serio y concentrado. Probablemente algo del trabajo. Amaba mirar su ceño ligeramente hundido junto con su mirada concentrada, se notaba algo tierno incluso.
Entré un poco más y él percibió el movimiento por lo que levantó la mirada hacia mí, noté como sus facciones se relajaron, sus ojos brillaron un poco y sus labios se expandieron en una sonrisa. Amaba provocar algo así en él.
—Buenos días preciosa.— su voz sonaba con dulzura y en seguida sentí un gran alivio recorrer mi cuerpo completo.
—Buenos días Daddy.— le sonreí de regreso y caminé más cerca hasta llegar a su lado. Él movió su silla y me dio espacio para sentarme en sus piernas y pasar mi brazo por sus hombros mientras él dejó el suyo sobre mis piernas y el otro por mi espalda. —No me despertaste.— lo miré a esos profundos ojos suyos.
—Me imaginé que querías descansar un poco mas, ¿cómo te sientes?— preguntó mirándome con delicadeza.
—Bien, solo algo cansada pero eso es normal.— respondí en seguida.
—Que bueno princesa, me alegro.
Daddy continuó con su trabajo en la computadora mientras yo recargué mi cabeza sobre su pecho y simplemente aprecié lo hermoso que era tenerlo cerca. Estoy tan acostumbrada a esto que ahora ya no me puedo imaginar sin él a mi lado.
Pasados unos minutos miré que el reloj en la pared marcaba las 11:30 de la mañana y supuse en seguida que ya se había hecho tarde para que él fuera a la oficina. Pero miré como él siguió trabajando así que no lo mencioné. Pero al pensar en eso recordé lo que pasó ayer, él se quedó hablando con la recepcionista mientras yo buscaba mi celular. Jamás le pregunté porqué habló con ella.
—¿Daddy?— murmuré levantando mi cabeza para intentar mirarlo.
—Dime nena.— habló mientras seguía tecleando en la computadora.
—¿De qué hablaste ayer con la recepcionista?— pregunté sin darle muchas vueltas, no creo que sea nada grave, es solo que tengo curiosidad por saberlo.
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Call me Daddy ━ Jaden Hossler
FanficMi vida era bastante normal y yo era una chica común y corriente. Pero todo cambio cuando lo conocí, maldito Jaden Hossler. Sus particulares gustos me dieron curiosidad y así fue como terminé llamándolo Daddy. Fanfic Jaden Hossler ¡¡Las actualizacio...