Call me Daddy ━ Jaden Hossler

Capítulo 15: Tú de nuevo

[Narra Valeria]

Me desperté con el terrible sonido de mi alarma mañanera. Es tan solo un Viernes más. O por lo menos eso parece.

Me duele la cabeza y prácticamente toda otra parte de mi cuerpo, odiaba llorar, lo odiaba demasiado, tanto que me obligaba a no hacerlo. Pero anoche simplemente no pude, anoche mi mundo se vino encima. Todos estos días parecían mucho más borrosos y lejanos.

Me levanté de mi cama y rápidamente me cambié de ropa, unos joggers negros con una hoodie que encontré en mi armario, até mis Nike y fui al baño. Mierda, me veo igual de mal a como me siento. Até mi cabello en un moño alto y despeinado, tomé una toalla desmaquillante y la pasé por el resto corrido de mi rímel y mi delineado del día anterior. Al notar que seguía mirándome igual de mal solo coloqué unos lentes oscuros por encima de mis ojos.

Tomé mi celular bajé las escaleras, no tenía apetito así que solo coloqué mi mochila por mi hombro y salí de mi casa. Podía llamar a Addison para que pasara por mi, pero sinceramente quería caminar, me iba a dar tiempo para pensar, aunque no estaba realmente segura de que eso era lo que quería hacer.

Comencé mi camino con miles y miles de pensamientos sobre mi cabeza, me perseguían como una gran nube gris que soltaba gotas de agua en mi cabello. La gran nube con un nombre en letras rojas y llamativas, Jaden Hossler.

Sigo sin tener la menor idea de porqué me habló de esa manera anoche, sigo bastante confundida en que fue lo que hice mal. Pero me dolió, fue un dolor que nunca antes había experimentado, cada palabra que me dijo era una cuchillada más al corazón.

¿Ahora que debo de hacer? ¿Anoche nuestra relación se terminó? Realmente estaba confundida con que es lo qué pasó y que es lo que va a pasar ahora. Joder, simplemente duele demasiado.

Finalmente llegué a la escuela, aún más atormentada de lo que ya estaba. Simplemente no podía parar de pensar en él y en todo lo que había pasado. Parecía tan genuino siempre que simplemente lo de anoche lo cambió todo.

Como cualquier otro día asistí a mis clases y tuve pequeñas pláticas con Addison y con Blake, me excusé por mi actitud diciendo que había despertado con una migraña y todos lo creyeron. Mejor, así sería más fácil.

Llegó la última hora y se pasó volando ya que prácticamente dormí la mitad del tiempo, sonó el timbre de salida y me apresuré para poder regresar a casa.

—¡Oye Val! ¡Espera!— alguien tomó mi brazo justo antes de cruzar las puertas de salida.

Me di la vuelta esperando que no fuera nada serio, pero solo se trataba de Noah. Mi querido amigo Noah.

—¿Que pasa?— preguntó frunciendo el ceño.

—Ya lo había dicho, me siento mal.— respondí cortante mientras dejaba mi mirada enfocada en el piso.

—Te conozco Valeria. ¿Quien fue? ¿Bryce? ¿Tu novio?— preguntó insistente mientras seguíamos caminando por el pasillo.

Conocía a Noah tal y como él a mi, y sabía que no me iba a dejar en paz hasta que le diera la respuesta que él quería escuchar.

—Noah por favor.— pedí a modo de súplica, no quería ponerme a llorar en medio de la salida.

—Solo quiero que te desahogues, trato de ayudarte. Recuerda que seguimos siendo mejores amigos por encima de todo.— respondió algo decepcionado.

No es que haya perdido la confianza en él, pero era diferente. Ahora yo cargo con muchos secretos que a cada minuto se vuelven más pesados y no se si aguantaré con todo esto por mucho tiempo.