Debajo de mi piel - MinJin. JinMin.

Capítulo 5

Hola, hola, espero que estén bien y llenos de emoción para lo que se nos viene. Aquí un capítulo más que sé que les gustara tanto como a mí.

Al fin algo de drama y aquí podrán leer algunas dudas que tenían.

Sin más que decir, disfruten el capítulo.

Lean las notas de abajo.

Jimin se sentía realmente feliz, muy, muy feliz a decir verdad a pesar de estar donde estaba. Era raro y un poco estúpido que alguien dijera que estaba feliz estando en la cárcel pero Jimin, bueno, él simplemente lo era.

Parecía imposible de creer pero había encontrado buenos amigos ahí y estaba con su familia que era Namjoon, no necesitaba nada mas.

La relación con Jin era muy buena, eran buenos amigos y Jimin se emocionaba cada vez que le leía un libro y bromeaban respecto de eso. Jimin había conocido cosas que nunca esperó conocer, bromeaba con Jin y jugaban a molestarse, le contaba cosas y Jin lo escuchaba atento, era bastante lindo a decir verdad.

Había veces donde Jimin se sentía muy cómodo con Jin, demasiadas veces, de esas donde sentía como Jin le acariciaba el cabello y le apretaba las mejillas y otras donde bromeaban sobre lo primero que se les venía a la mente, Jimin entonces se perdía mirándolo.

Pero también había veces donde simplemente observaba a Jin y no dejaba de mirarlo, donde sus ojos bajaban a su boca y pasaban un par de segundos mirando sus labios.

Jimin entonces pensaba que Jin era muy guapo y que nadie podía negar eso.

—¿Por qué estás aquí, Jin?

—¿Aquí, contigo?

Jimin negó con una sonrisa mientras se sentaba en la silla junto a la mesa y observaba a Jin acomodar su cama.

—Me refiero a... estar aquí, en la cárcel ¿Qué hiciste para estar aquí dentro?

Y ahí estaba Jin, sintiéndose algo tenso al escuchar la pregunta, sabía que en cualquier momento esto pasaría y Jimin le había dado mucho tiempo para poder decirlo. Eso estaba bien, era ahora o nunca el momento de decirle.

Jimin se había abierto con él de muchas formas y para Jin era una tortura, tener al hombre cerca y no poder besarlo o escucharlo reír y no poder lanzarse sobre él y tocarlo.

Si, era una tortura.

Jin terminó de acomodar su cama y se sentó en la de Jimin, observando a su compañero.

—Estoy aquí por haber robado joyas que tenía mi familia —Jimin alzó las cejas sorprendido y le prestó atención—. Yo no crecí con mis padres, Jimin, me abandonaron en casa de mi abuela y aunque podría sonar que vivía bien la verdad es que no. Mi abuela era una mujer cruel y sin corazón, mis tías también y mis tíos unos desgraciados borrachos. Si quería algo tenía que trabajar para poder ganármelo, incluso la comida me la echaban en cara.

—¿Tu propia familia? ¿Pero por qué?

—No tengo idea, yo solo sabía que no podía irme a dormir sin dejar la casa limpia y la cena para mis tíos, era una tortura, sabes, yo era su criado, me trataban peor que un perro. Tenía que levantarme temprano para hacer el desayuno y ni las gracias me daban, tenía que ir a buscar la comida y si no encontraba lo que me pedían me esperaba una paliza de parte de mis tíos y créeme, Jimin, era palizas demasiado duras para mí.