El universo para ti

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Dean Winchester nunca se ha creído especial, tampoco importante o indispensable en la vida de alguien. Tampoco le importa la suya.

Él siempre se esforzó para que su papá estuviera orgulloso de él.

Luchó y entrenó desde que era un niño. Dejó los juegos atrás, al igual que los sueños para proteger a quién más lo necesitaba. Sam. Su hermano.

Fue hermano, padre y madre de su hermano pequeño Sam.

Lo cual no fue justo. Él no tenía que ser el padre de su hermano, pero lo fue. Y lo hizo por amor. Lo hizo por su hermano.

A veces la vida es así. Injusta, dolorosa, complicada y llena de tristeza. Aún así siguió esforzándose y peleando.

Tuvo la oportunidad de tener un futuro diferente, pero no tomo esa oportunidad. La dejó ir para estar con Sam. Lloró y le dolió tanto dejar atrás a aquellos que creyeron en él, dejar aquel futuro para continuar manteniendo a su hermano a salvó.

Y aún así, nunca fue suficiente para su papá. Ni para nadie.

Lo golpearon, derribaron, mordieron, rasguñaron, destrozaron y asesinaron.

Y Sam, su hermanito, se fue de su lado.

Dean lo entendía. Su hermano quería una vida normal, lejos de la cacería. Pero dolía tenerlo lejos. Prácticamente él lo crío desde niño. Se sentía vacío al no tenerlo cerca.

Y cuando Sam volvió creyó que las cosas volverían a ser como antes, no fue así. Su papá murió. Hizo un estúpido trato para salvar a Sam y al final fue arrastrado al infierno.

Y las cosas que le hicieron ahí, desgarraron su alma. Rompieron su corazón y destruyeron su mente.

Pero la vida de Dean cambio cuando conoció a Castiel, un ángel del cielo, con aureola, alas y toda esa mierda angelical.

Claro que Castiel no era como imagino que sería un ángel.

Castiel era fuerte, determinado, rudo, impotente y feroz. Todo un soldado.

Sin embargo, descubrió que aquel fiero soldado, también podía ser alguien bondadoso, gentil, protector y buen amigo. Sincero, limpio, inocente... Lleno.

Todo lo contrario a él, que estaba roto, sucio y vacío.

Pero conviviendo junto a el ángel, le hicieron ver que el único que tenía esa visión tan terrible de él, era el mismo. Y solamente él.

Estando junto a Castiel, le hizo sentir que las cosas podían marchar bien, aún cuando pareciera todo lo contrario.

Sin embargo, no fue recíproco. Aún así, tuvieron sus buenos momentos. También hubo malos ratos, pero estuvieron juntos en cada paso.

"Dean y yo compartimos un vínculo más profundo"

"¡Te recé, Cas! ¡Todas las noches!"

"Una parte de mí siempre creyó que volverías"

"Lo siento pero prefiero tenerte, maldecido o no"

"He tratado de ir un paso por delante de ellos para mantenerlos alejados de ti"

"Es un regalo. Te quedas con esos"

"No cambies nunca"

"No hagas que te pierda a ti también"

SPN One-shot'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora