🔥 Mi Novia Sumisa 💋

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P. Vince Neil
Advertencia:. Smut picantón 7u7

     - ¿Y cómo es que aceptó ser tu novia?
     - Solo lo hizo, realmente fue muy difícil convencerla. 
     - Y hoy te iba a decir que fuéramos a un club nocturno lejos del hotel para conseguir golfas.
     - Di mi palabra Nikki y realmente siento que por primera vez sí estoy enamorado - sonrió mirando a su novia quien estaba con sus amigas platicando a gusto - me gusta demasiado esa mujer.
     - Parece que también a alguien más - señaló a dos tipos de la barra - la han estado mirando desde hace rato.
     - ¿Quiénes son?
     - Oh no, Vince posesivo viene en camino.
     - Cállate Tommy. 

     - Hola, mucho gusto, perdón, mi amigo y yo no pudimos resistirnos al verlas y queríamos ver si podían firmar nuestros pósters - dijo uno de los dos hombres jóvenes, mirando al grupo de mujeres cantantes con emoción.
     - Por supuesto - dijeron las cuatro aceptando el plumón permanente y el póster de ambos chicos.
     - Eres más hermosa en persona - dijo el segundo amigo mirando a ___, haciendo que esta se sonrojara - lo siento, no puedo mantener mi boca callada, perdón, yo… Diablos.
     - Gracias - dijo la cantante sonriendo.

     - Oh no, Vince va a explotar - el rubio suspiró, tomando de su vaso, observando fijamente a su chica hablando con ese sujeto - aunque ella no está coqueteando, eso te lo aseguro.
     - Lo sé - dijo Vince.
     - ¿Entonces por qué lo miras como si quisieras ahorcarlo?
     - Nada, no es nada - sonrió.
     El cuarteto se levantó de sus asientos para tomarse una foto con los muchachos, ___ siendo abrazada por uno de ellos.
     - Ya explotó.
     Vince deshizo la empanada que tenía en la mano, tirando su contenido al suelo.

     - Buenas noches - dijo la pareja yendo a su habitación y nada más entrar Vince cerró la puerta de golpe, asustando a ____ - es cerrarla, no… ¿Vince?  - retrocedió dos pasos mirando al rubio con incomodidad - ¿Qué sucede? - tartamudeó. La mirada de él era seria y no dejaba de mirarla.
     - Sabes, te has comportado mal - dijo con tono bajo - dime lo que hiciste mal esta noche.
     - ¿Yo?, ¿por qué?  - preguntó alarmada pensando en lo que había estado haciendo durante la noche - no hice nada malo.
     - ¿Ah no? - se acercó a ella, tomándola por la cintura - hay algo de lo que no te dije sobre ser mi pareja muñeca - susurró cerca de su oído con voz seductora.
     - ¿Qué? - preguntó en un suspiro con la voz jadeante. 
     - Muñeca, si eres mía no eres absolutamente de nadie más que no sea yo - un jadeo salió de la boca de la chica - ¿entiendes ____?
     - Sí - murmuró y se mordió el labio.
     - Entonces te lo vuelvo a decir, ¿qué hiciste mal hoy? - repitió y metió sus manos debajo de la blusa de ella, acariciando su piel.
     - Yo no hice nada - respondió dudosa, tratando de mantenerse en pie por las caricias sensuales en su cuerpo.
     - ¿Segura? - dio un paso arriesgado y metió sus manos dentro del pantalón de la chica, tomando sus glúteos entre sus manos y los apretó.
     - Ah - jadeó - No lo sé, ¿qué hice mal Mr. Neil? - dijo cerca de su oído, sabiendo que eso lo provocaría más.
     - Te portaste muy mal conmigo esta noche nena, creo que te mereces uno de mis castigos - sus manos abandonaron sus glúteos y fueron hasta la parte delantera, en dónde desabrochó y bajó la cremallera alarmando a ____- te mereces de nuevo diez azotes como ese día. 
     Vince se alejó de ella y se sentó al borde de la cama, mirándola atentamente.
     - Quítate ese pantalón para darte tu castigo, ahora bombón.
     ____ se sonrojó demasiado y empezó a quitarse lentamente el pantalón, pero él la detuvo.
     - No, no así, date media vuelta para apreciar el lienzo en el que voy a hacer un obra de arte.
     Ella jadeó de nuevo y se dio media vuelta como lo indicó él, quitándose el pantalón. Era la primera vez que le seguía el juego a Vince y mentiría si dijera que no era más que excitante, estaba siendo demasiado sexy, tanto era así que sus bragas empezaban a humedecerse.
     Una vez el pantalón yacía en el suelo, dejó a la vista sus bragas de encaje rojas, provocando a Vince demasiado, generando una erección muy remarcada en su pantalón. Él la tomó de las caderas y la sentó sobre él, quedando su erección entre los glúteos de ella sacándole un gruñido. ___ se mordió el labio para no gemir antes ese roce entre ambos sexos, mentalizándose para no caer tan rápido. Vince la colocó de forma en que su trasero quedara en sus piernas perfectamente bajo su mirada, listo para empezar.
     - ¡Mira qué tenemos aquí! - acarició su trasero, tocando ambos glúteos - creo que te mereces diez azotes como la última vez. 
     - ¿Tantos? - la primera nalgada impactó contra su cachete derecho, asustándola - ¿me porté muy mal Mr. Neil? - preguntó con voz inocente.
     - Ay bebé, eres una muy mala niña - le dio otra nalgada. La chica se mordió de nuevo el labio, tratando de no gemir - te portaste mal y a mí no me gusta compartir a mi muñeca, ¿entiendes nena?, solo yo puedo jugar contigo cuando se me de la gana, nadie puede tocarte más que yo y solo yo. 
     - Sí - otra nalgada impactó en ella - ¡Ah!
     - Repite eso nena, no te escuché por el gemido que salió de tu dulce boca.
     - Sólo tú puedes jugar conmigo, nadie más, solo tú. ¡Ah! - no pudo evitar gemir ante esa nalgada que fue más fuerte que las otras - yo soy tu muñeca y de nadie más.
     - Así es, me perteneces solo a mí - tomó su braga y la jaló hacia arriba, haciendo que la tanga frotara contra los labios vaginales de ____, provocando un gemido - eres mía nena, ¿lo entendiste? 
     - ¡Ah, Dios! - gimió más fuerte tras otra nalgada más dura - ¡Solo soy tuya, te pertenezco! 
     - Así es hermosa - rio de manera sexy, ganándose un suspiro de excitación por parte de su novia - todo esto, sobre todo esto - apretó su trasero con ambas manos - me pertenece, todo de ti es mío. Eres de mí propiedad nena, todo esto le pertenece a tu dueño, ¿entendiste?
     - Tú eres mi dueño Mr. Neil - otra nalgada y esta vez sí la disfrutó demás, teniendo que sujetarse firmemente de la colcha de la cama - ¡Ah!
     - Eso es, ¿ya sabes lo que hiciste mal amor? 
     - Aún no lo sé.
     - ¿Aún no lo sabes? - otra nalgada - vaya, este trasero se ve cada vez más apetitoso.
     - No.
     - Vaya, no sabes aún cuando dejaste que alguien más jugará contigo justo frente a mi cara.
     - ¿Es por ese muchacho? - preguntó recordando al joven - ¿es por él que me estás castigando?
     - ¿Así que sí lo sabes? - abrió las piernas de ella, descubriendo una gran mancha de humedad en su tanga - sí, dejaste que jugara contigo.
     - Yo no, no fue mi intención amo, en serio - se aferró mucho más a la colcha al sentir los dedos de Vince sobre su feminidad cubierta aún por su ropa interior - ¡ah!, lo juro, no fue mi intención dejar que alguien más jugara con tu muñeca.
     - ¿No? - dio otra nalgada directamente a su feminidad, haciéndole delirar de placer - ¿No fue tu intención?
     - No, solo te pertenezco a ti Neil, tú eres mi único dueño - apretó los dientes cuando Vince volvió a frotar sus dedos contra su vagina - ah, por favor.
     - ¿Por favor qué nena? - ____ apretaba los ojos, aguantando - ¿qué me estás pidiendo muñeca?
     - Por favor, más rápido - pidió sin vergüenza, concentrándose en su placer - ¡Neil, por favor más rápido!
     - ¿Más rápido qué? - preguntó calmado, sin quitar sus dedos - ¿qué quieres que haga más rápido? 
     - Tus dedos, por favor.
     - ¿Cómo? - metió su mano dentro de sus bragas y tocó los labios mayores directamente, disparando el placer de Harriet por los aires.
     - ¡Aaah! - jadeó mucho más fuerte, sintiendo que un gran orgasmo se formaba dentro de ella - ¡oh Dios, oh Dios!
     - ¿Así te gusta que te haga ____? - abrió sus labios, tocando la zona más sensible de ella - ¿te gusta que meta mi mano en tu vagina y te masturbe? 
     - ¡Sí, sí! - gritó sintiendo el orgasmo cada vez más cerca - ¡Mmm!
     - ¿Te gustaría correrte en mi mano ____? - aumentó la velocidad de sus dedos, acariciando incluso más fuerte.
     - ¡Sí!
     - Córrete para mí nena, déjame ver cómo te contrates en placer por mí ____ - con su mano izquierda improvisó una coleta en el cabello de ella y jaló hacia atrás, haciendo que arqueara su espalda - vamos preciosa, coórrete para mí - la última nalgada hizo que ____ terminara en un gran orgasmo, expulsando su escencia a chorros sobre la mano de Vince, sin sentirse avergonzada. 
     - ¡Aaaaah! - gimió mientras se contraía sobre el cuerpo masculino, cerrando las piernas, disfrutando de los pocos chorros que salieron de ella - ¡Mmm!
     - Levántate - ordenó el rubio, ayudándola a que se pusiera de pies, aunque sus piernas temblaban por el tremendo orgasmo de hace solo segundos - date la vuelta - ____ dio media vuelta, mirándose en el espejo de cuerpo completo de enfrente, abriendo los ojos sorprendida por sus piernas cubiertas de sus propios fluidos y su tanga increíblemente empapada. Vince se acercó y besó los cachetes de la chica y luego miró a través del espejo cómo este se despojaba de sus pantalones y su camisa. Esto aún no había acabado. 
     - Vince, creo que ya llegamos muy lejos - murmuró la chica recuperando su juicio, tragando saliva al ver el prominente bulto entre las piernas de su novio - oh Dios - susurró al ver el tamaño de ese "animal". 
     - No, quien da las órdenes aquí soy yo - tomándola de las caderas le dio la vuelta, quedando frente a frente - ¿Entendiste?
     - Vince…
     - ¿Entendiste? - la joven asintió apenada. Vince se acercó a su cuello para cubrirlo de besos, aunque sintió que su novia estaba más tensa que antes - tranquila - susurró con voz calma en su oído - no lo haremos si no quieres, prometo no penetrarte ni nada que no quieras, confía en mí ____, ¿está bien? 
     - Está bien - respondió alejándose un poco para mirarlo a los ojos.
     - Esperaré hasta cuando estés lista, pero esta noche déjame hacerte disfrutar como nunca lo has hecho, mucho más que ayer - besó sus labios - déjame complacerte amor. 
     - Está bien.
     Vince sonrió y de nuevo se acercó a su cuello para continuar con sus húmedos besos. Las manos de Vince recorrieron el cuerpo de la chica de arriba a abajo, deteniéndose cuando sus manos estaban al borde de sus senos, alejándolas de inmediato. ____ se dejó llevar por sus caricias eróticas, sintiendo de nuevo cómo iba humedeciéndose.
     Las sensaciones para ella eran casi nuevas, solo había tenido a un novio que la había tocado, pero nunca había llegado tan lejos como lo estaba haciendo con Vince. Aún era virgen y mentiría se dijese que no le asustaba el perder su virginidad de manera muy dolorosa, aún no se sentía preparada, pero tenía el pensamiento de que si seguían ambos con esos juegos no tardaría mucho en darle su virginidad al cantante.
     - Oh Vince - ronroneó su nombre, haciendo que la erección de Vince diera un respingo, golpeando con la pierna de ella.
     - Eres mía definitivamente ____, no podrás alejarte de mí ni yo de ti nunca - caminaron hacia atrás y se sentó en la cama - súbete, déjame sentirte. 
     - No estás lubricado - murmuró sentándose a horcajadas sobre él - podrías lastimarte.
     - Hay una solución, pero tienes que hacer algo más arriesgado nena - se acercó a su oído y susurró: - tienes que quitarte la ropa interior al igual que yo ____. 
     - ¿Eso es otro castigo Mr. Neil?, ¿me obligarás a quitarme mi tanga para ti? - preguntó con voz inocente, acariciando su marcado torso.
     - Así es mi niña, te portaste mal y ahora por eso tienes que enseñarle a tu papi tu tesoro escondido - acarició su rostro - o si no me enojaré, tendré que azotarte de nuevo y dejaré más rojo ese trasero de lo que ya está. 
     - ¿Qué ganaré a cambio? 
     - ¿Quieres un premio? - asintió - te daré un premio cuando te quites esa cosa para dejarme contemplarte, quiero ver ese tesoro.
     ____ se tragó su arrepentimiento y se levantó, dándose media vuelta sin que él lo pidiera y muy cerca de él empezó a bajar su tanga, dejando descubiertos sus glúteos y su vagina, que al agacharse para recoger sus bragas le brindó una perfecta vista de esta a su novio, dejándolo babeando ante tal tesoro. Vince bajó su boxer y la sentó sobre él, abriéndole las piernas para que su pene se quedara entre sus labios vaginales que lo acogieron gustosamente.
     - Ah - gimió por lo bajo la chica, mirando con asombro el miembro viril de Vince, anonadada por el tamaño de este. 
     - ¿Te gusta tu premio hermosa? - la chica asintió sin pensarlo, mirando directamente el pene de él - parece que te ha gustado demasiado. 
     - Sí Mr. Neil - jadeó cuando Vince se movió hacia arriba, friccionando contra ella -  ah.
     - Es todo tuyo cariño, ¿Quieres que te enseñe cómo usarlo?
     - Sí…
     - Es fácil, solo tienes que abrir tus labios así - sus dedos fueron hasta la feminidad de ella, abriéndolos.
     - ¡Ah, mmm! - siguió mirando hacia abajo, siendo testigo de su propio placer.
     - Luego este premio tiene que quedar justamente encajado entre estos deliciosos labios vaginales, de esta forma - incrustó su pene entre los labios de ella.
     - Oh Dios.
     - Ahora viene la mejor parte. 
     - ¿Cuál es? - preguntó jadeante, con una mueca de placer.
     - Solo tienes que mover tus caderas hacia adelante y hacia atrás, así - agarró sus caderas y las impulsó como había dicho - y así obtienes, el mejor, regalo de, tú vida - dijo entrecortadamente - fuck, muévete más rápido, me encantas, ah.
     - ¿Así? - preguntó moviéndose más rápido, frotándose con más ímpetu - ¿así se utiliza amo?
     - Sí, así nena, pero es más rápido - con ayuda suya le ayudó a acelerar sus movimientos sobre su pene, llevándolo al paraíso - así, justo así. ¡Dios, qué buena estás! 
     - ¡Ah!
     - ¡Me encanta tu cuerpo, eres tan malditamente ardiente ____! - gritó - eres una mujer asombrosa, me encanta tu vagina.
     - ¿Te gusta mucho amor?
     - Me fascina, todo de ti me fascina - metió su mano dentro de su blusa, acariciando su abdomen - te follaría ahora mismo hasta dejarte llena de mi leche que te escurriría por los muslos de todo lo que dejaría dentro de ti - por una razón sus palabras sucias hicieron que ____ se calentara mucho más y empezara a descubrir otro rasgo de su personalidad morbosa - te pondría en cuatro y te daría frente al espejo para que vieras cómo te hago mía una y otra vez. 
     - ¡Vince! - gimió cuando sus manos se posaron sobre sus senos - Vince, estás rozando el límite - pronunció entre dientes, con dificultad. 
     - Quiero hacerte mía, hacerte el amor - levantó su blusa dejando a la vista sus senos cubiertos por su sostén.
     - ¡Vince, detente! - gritó cuando el rubio rompió su brasier a la mitad por el frente, liberando sus pechos - ¡Ah! 
     Su novio cubrió sus senos con sus manos, magreándolos a su antojo, atacando los pezones. 
     - ¡Vince, mmm, ah! - dejó caer su cabeza en su hombro, gimiendo en su oído - Dios, ah, esto es tan, ah, tan bueno.
     - ¡Gime más ____!, ¡di que eres mía!
     - ¡Soy tuya, solo tuya! - el rubio estampó sus labios con los de ella, besándola con salvajismo, asaltando su boca con deseo.
     La fricción entre sexos era sexualmente exhuberante, exquisito, muy placentero. Ambos se movía como poseídos, buscando placer a toda costa. Los labios vaginales de la chica era hablados por en miembro de Vince, dándole un placer inigualable.
     Tras friccionar cada vez más fuerte terminaron por correrse ambos, terminando al mismo tiempo de una manera tan deliciosamente increíble, dejando a ambos exhaustos sobre la cama, rendidos. 
     - Te amo nena.
     - Yo también te amo Vince - dijo sin pensarlo, sonriendo. 
     - Creo que te debo un brasier nuevo - rieron - lo siento, me dejé llevar. 
     - No importa - lo besó - fue increíble.
     - Sí, aunque yo duro más tiempo que eso, pero por tu rostro ya estás demasiado cansada - asintió - normalmente suelo durar más de cinco horas.
     - ¿Qué?, ¿eres una máquina sexual acaso? 
     - Solo pruébame, no aguantarías despierta ni cuatro orgasmos seguidos conmigo.
     - Ya duérmete.
     - ¿No quieres que vayamos a bañarnos?, me encanta el olor a sexo, pero no quiero que te sientas incómoda. 
     - Está bien, solo quiero descansar - se acurrucó entre sus brazos - solo, hay que dormir, ¿sí?
     - Yo creo que no - la abrazó por la cintura - está noche dije que iba a complacerte y lo haré, ponte en cuatro amor.
     ____ como si las palabras se Vince fueran un hechizo , hizo lo que le ordenó.
     - Está noche no dormirás hasta que yo te lo digas amor.
     - Oh Dios.

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Hasta aquí ya voy a dejar el mega maratón de Smut, perdón por los traumas jeje. 🤍✨

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