Entre asesinos [Book #2] ~K.Th

T.E.N

Paso aproximadamente medio año.

Extrañamente nada referente al tema de que estaba en peligro volvió a suceder, simplemente todo desapareció, como si nada hubiera ocurrido.

Con Yoonjae, seguíamos siendo los mismos mejores amigos de siempre, nunca más volvió a mencionar el tema de Lea, su caso finalmente había sido archivado por la policia, como siempre lo hacían con los casos que relacionaban a mis padres, tampoco se enojo cuando supo al respecto, por lo que todo seguía con total normalidad.

En cuanto a Lia, sabía que siguiá con su novio y que seguía enamorada de él, incluso más que antes, después de aquella noche donde murió Lea no volvimos a cruzarnos, yo la evitaba a ella y ella empezó a evitarme, nuestra amistad finalizo tan rápido que casi ni lo pude asimilar, finalmente mis sentimientos por ella murieron, sabía que no me iba a amar, por lo que solo me concentré en mi carrera y en Suha.

Suha... Aunque todo había empezado como un juego solo para fastidiar a Yoobyul, logre encariñarme con ella, al punto de que realmente estaba haciendo hasta lo imposible para que dejara a Yoobyul y estuviera conmigo, pero nada había funcionado, ni los regalos más caros, ni el halago más perfecto, ni el acto más dulce, aun así no me rendía, sabía que lograría que ella dejara a Yoobyul... Tan equivocado estaba...

Toda parecía haberle mejorado a ese cabrón, incluso extrañamente su situación económica había mejorado, al punto de dejar de movilizarse en un bus, a movilizarse con una de las motos último modelo, todo había sido tan extraño, pero simplemente había tratado de no prestar atención.

Ese día de nuevo llevaba un regalo para Suha, era un reloj de oro, parecido al que llevaba siempre conmigo, o sea el de aquel profesor que mis padres asesinaron, ciertamente para mi era una especie de trofeo y amuleto protector, algo que me recordaba de que nadie se podía meter conmigo sin tener su merecido.

Eran las 5 y 30 de la mañana, yo organizaba algo de comer antes de irme, tenía ya todo preparado para irme a la universidad, por lo que solo comí lo que prepare y tome mi bolso y mis llaves para salir de casa.

Justo cuando iba a abrir la puerta, esta fue abierta por alguien más, los cuales eran mis padres, quienes llegaban empapados de sangre y con una persona mal herida entre sus brazos, estaba tan débil que no podía hacer nada, pero solo por su mirada sabía que pedida a gritos ayuda.

-¿Qué sucedió?-dije curioso-por favor no se me acerquen, no me quiero bañar de nuevo-dije alejándome un poco de ellos.

-No te preocupes hijo, coloca cuidado al pisar en la salida, hay mucha sangre-dijo papá y asentí.

-El es solo un hijo de puta que intento revelar que Vkiller y Pandakiller están vivos, toco encargarnos de la basura, ¿cierto, Hwan?-dijo mamá riéndose en frente de la persona que estaba herida, a lo que aquel señor solo soltó algunos jadeos.

-Entiendo, entren y llévenlo al sótano, que no sea que alguno de los niños lo vean, no quiero que se traumén tan jovenes-ellos asintieron mientras terminaban de entrar a la casa.

-Buena suerte en la universidad hijito-dijo mamá lanzándome un beso.

-Gracias mami-dije sonriéndole.

-Que te vaya bien hijo, recuerda que más tarde nos llegan las nuevas armas, por si no estamos las recibas por favor-dijo papá y asentí.

-Entendido, nos vemos más tarde, los amo-dije saliendo de la casa con mucho cuidado de pisar sangre.

-Nosotros a ti-dijeron en unísono mientras entraban al sótano.

Salí de casa y me fui directo a la universidad.

Al llegar a la universidad como siempre camine por el pasillo principal, esta vez en busca de Suha, solo para entregarle el reloj.

Iba caminando en total tranquilidad hasta que me encuentro un chico, aquel chico que había desaparecido de la paz de la tierra desde hace seis meses, caminaba con tanta tranquilidad, tan despreocupado que me asustaba, pero finalmente simplemente lo ignore.

Después de buscarla un rato encontré a Suha, afortunadamente estaba sola sentada en el jardin del campus, sonreí como un tonto y me acerque a ella.

-Suha, hola-dije sonriente frente a ella.

-Ah, hola Tae-dije devolviéndome la sonrisa.

-¿Qué estabas haciendo?-dije mientras me sentaba a su lado.

-Solo miraba a mi alrededor, tenía un tiempo libre y solo quería recibir el aire de la mañana.

-Entiendo-dije, para buscar la cajita con el reloj en mi bolso, al encontrarla se la pase-te traje de nuevo un regalo, espero que no te moleste.

-¿Qué es?-dijo emocionada mientras abría la caja-Dios mío-dijo sorprendida al abrir la caja y ver el reloj-Tae... Este debió ser carísimo, incluso más de lo que me has dado.

-No importa, como siempre te he dicho, te lo mereces, porque eres la chica más linda y me gustas-dije con una sonrisa, a lo ella simplemente rió enternecida.

-Muchas gracias Tae, eres el mejor, ¿te puedo dar algo?-yo la mire sorprendida y asentí.

¿Qué es?-dije curioso, ella solo se acerco y beso mi mejilla.

-Esto-dije alejándose y sonriendo.

-Me ganaste en regalo, en serio-dije sonriente mientras acariciaba mi mejilla como un bobo enamorado.

Todo fue tan mágico en ese momento hasta que de repente un grito lo arruino todo.

-¡Suha!-grito alguien enojado, ese alguien era Yoobyul, quien se acercaba enojado.

-Yoobyul-dijo asustada mientras se levantaba, al igual que yo.

Me puse en frente de ella tratando de resguardarla para que él no hiciera nada.

-Solo fue un regalo más, no te enojes estúpido, solo hago lo que no puedes hacer tu-dije cuando él llego frente a nosotros.

-Deja de darle esos putos regalos a MI NOVIA, que tu no tengas no es mi problema-dijo Yoobyul furioso.

-Yo veré que hacer y si le quiero seguir dando regalos es mi puto problema, idiota-dije desafiándolo.

-Ya me cansaste maldito riquillo, esta es la última vez que le das un regalo a mi novia, yo me encargaré de ello, conmigo nadie se mete-dijo enojado.

Tomo de la mano a Suha, mientra recogía todas sus cosas para luego llevársela casi arrastrada a quien sabe donde.

-Ridículo-dije riendo.

Por simple instinto levante mi mirada y me tope de nuevo con ese chico extraño en la azotea, con su cabeza me hizo una seña para que fuera allí, me cuestione por un rato sobre si ir o no ir, pero finalmente termine accediendo.

Camine hasta azotea sin ningún apuro, pero al llegar allí ya no había nadie, al parecer aquel chico se había ido, suspire fastidiado y solo camine hasta el borde y me quede allí admirando la vista, de repente al fijar mi mirada en la baranda vi un pequeño papel pegado, lo tome sin siquiera pensarlo y lo abrí.

Sabía que el regreso de Jaehyun era extraño y tenía algún motivo, aquel papel me lo confirmo.

"El tiempo se esta agotando, él atacará pronto"

-Pero que putas-dije extrañado.

Continuará...

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