S.I.X.T.E.E.N

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Empecé a caminar hacia él, pero Lia me detuvo, la voltee a mirar y note su mirada fija a la dirección del chico con una sonrisa malvada en su rostro, llena de satisfacción, volví a mirar en dirección al chico, estaba pegado a la pared de la esquina, nos miraba con terror, temblaba, no podía respirar correctamente, incluso desde donde estaba podía escuchar como latía su corazón, sonreí dichoso.

-Espera Tae-dijo Lia con su mismo semblante.

Camino lentamente hasta él mientras veía como él empezaba a temblar aún más, al estar cerca de él, le tiro la daga que tenía en su mano mientras sonreía más.

-¿Viste cómo murieron ellas?-dijo Lia con una voz suave a lo que él simplemente la mira-lo viste, ¿cierto?-dijo con el mismo tono de voz, él no dijo nada solo la miraba-¡respóndeme!-gritó molesta.

-Si...-dijo él en un hilo de voz.

-¿Quieres morir de la misma forma?-le dijo de nuevo en su tono tranquilo.

Al instante aquel chico empezó a negar con su cabeza frenéticamente, al punto de tirarse al suelo de rodillas mientras juntaba sus manos.

-Por... Por fa... Por favor... no... perdón... perdóname Lia... perdón... no... no me... no me mates...-dijo como pudo, rogando por su vida mientras lloraba en su desesperación, Lia sonrío.

Se agacho a recoger la daga con la misma sonrisa hacia él, mientras se levantaba coloco la daga en sus manos sin dejar de mirarlo a los ojos.

-Si no quieres morir como ellas, matate tú-se levanto totalmente y se alejo de él-hazlo, no tienes tanto tiempo para hacerlo por tu cuenta o lo haremos nosotros-nos miró nuevamente, pude ver la desesperación en sus ojos, lo que me hizo sonreír al instante.

Miro la daga entre sus manos y luego los dos cuerpos de las mujeres desfigurados, con miedo dirigió la daga a su brazo y la posiciono cerca de sus venas, yo solo miraba con ternura como hacía ese movimiento, creyendo que moriría tan fácil, pero ví como agacho su cabeza y dirigía su mirada disimuladamente a la puerta, al instante lo supe, claro que el plan de Lia no saldría, aliste mi daga y me puse en frente de Lia, quien no notaba las intenciones de este.

Empezó a apretar en su mano la daga mientras nos miraba fijamente, todo iba bien, pero fue en cuestión de segundos que hizo aquello que ya sabía que pasaría, se levanto rápido de donde estaba y empuño la daga que tenía, lo primero que hizo fue golpear mi mano con la pared para que soltara mi daga y luego dirigió su daga con dirección a apuñalarme el cuello, su plan le hubiera salido bien, sino se tratase de un asesino en serie que ya conoce todos esos movimientos, nunca deje caer mi daga y logré atrapar su mano en el aire antes de que me apuñalara, él me miró sorprendido y yo con un movimiento rápido corte su cuello, haciendo que saliera mucha sangre de él, dejo caer la daga y dirigió su mano a su cuello, Lia recogió la daga y luego lo empujó, se sento encima de él y sin miedo alguno empezó a cortar por su pecho, abriendo esa parte del cuerpo, él solo hacía expresiones de dolor puro mientras de movía desesperado, ya no podía gritar y sería cuestión de minutos para que muriera.

Lia seguía en lo suyo, cortando y haciendo un gran esfuerzo, justo cuando él se rindió y murió, Lia levanto su mano llena de sangre con algo moviéndose entre ella, me volteo a mirar con una sonrisa victoriosa.

-El rompió mi corazón, pero yo ahora tengo su corazón entre mis manos-dijo riéndo feliz, a lo que yo también reí, se levanto de él y vino a abrazarme-muchas gracias Tae.

-No es nada Lia-le respondí con una sonrisa.

Tomó mi rostro para luego besarme de la manera más apasionada que podía haber, incluso soltó el corazón y coloco sus manos por mi cuello y yo la tome de la cintura, su beso sabía a sangre, pero era tan delicioso que ni me importaba, el ambiente se había puesto caliente, pero justo cuando la iba a tirar a la cama escucho algo.

-Ay, no puede ser-dijo alguien a mi lado, yo al instante levante mi mirada asustado, había reconocido esa voz.

-Mamá...-dije temeroso.

Allí estaban mi mamá y mi papá parados en frente de la puerta ya cerrada, ambos tenían sus mascaras, pero lo que lo hacía más aterrador es que ambos se levantaron la mascara para ver todo a su alrededor.

-Me va a dar algo-dijo mamá mirando a Lia-tenme que me voy a caer-le dijo a papá quien estaba igual de sorprendido que ella.

-Señor y señora Kim, puedo explicarlo-dijo Lia preocupada por mi.

-Explícame esto Taeyong-dijo papá enojado, yo solo los miraba sin decir nada, como un perrito descubierto después de hacer algo malo.

-No, no se enojen con él, por favor, yo fui quien mato a todos-dijo Lia, lo que pareció ser aún peor.

-Ay Tae, ay Tae, me voy a desmayar aquí, sosténme-dijo mamá haciendo drama.

-Él que se va a desmayar soy yo, sosténme tú a mi-dijo papá, Lia los miraba confundida.

-Lia, ¿cuándo mis padres le han visto problema a que yo sea un asesino?-dije en un tono irónico.

Ahí ella lo entendió todo, el problema no era las personas muertas o que yo los hubiera matado, el problema es que ella estába presente y que ella los había matado.

-Ay, perdón señores Kim, no le echen la culpa a Taeyong, yo se lo pedí, igual lo iba a hacer incluso sin la ayuda de él, él solo me protegió-dijo tratándo de sacarme del lió, pero ya sabía el gran problema en el que estaba metido.

-Taeyong, están en graves problemas-dijo mamá enojada.

-Pero, ¿cómo llegaron aquí?-dije confundido.

-Tu nos llamaste-dijo papá en un semblante serio, fue ahí cuando recordé el golpe de la pared del bastardo para quitarme la daga.

-Agradece que ya estás muerto, pedazo de mierda-dije enojado al cadaver.

-Igual, no nos puedes ocultar nada Tae, tarde que temprano nos daríamos cuenta, ahora enfrenten a Jin y a Namjoon-dijo con una sonrisa malvada.

Lia y yo nos miramos preocupados, sabía que mis padres también lo estaban, pero era algo que tenían que hacer.

(...)

Mamá y papá nos habían traído a casa, recién habíamos llegado y ninguno se quería bajar de la camioneta donde estábamos, incluso ni mis padres querían hacerlo, pues en el camino le habían avisado a Namjoon y a Jin de lo sucedido y ambos estaban parados enfrente de su casa con un semblante nada agradable, se les notaba el enojo a kilómetros, incluso mis demás tíos y primos estaban viendo todo desde los balcones de sus casas, querían saber que estaba pasando.

-¡Bajense ya!-gritó mi tío Jin enojado.

-Ustedes se metieron en ese problema, salgan ustedes primeros-dijo papá.

-Oh, gracias papá, eres muy amable por repaldarme-dije y él solo rodó sus ojos.

Sin más baje yo primero para respaldar a Lia, mis tíos al verme lleno de sangre se impresionaron un poco, aún no se acostumbran a mi nueva etapa de asesino, ayude a bajar a Lia, que al verla incluso más llena de sangre que yo, a todos casi les da algo, incluso logré escuchar un grito ahogado de parte de todos, menos de Jin.

-¿Qué mierda es esto, Lia?-dijo enojado.

Tenía problemas y muy graves.

Continuará.

Hola, he regresado, lamento la gran espera para un nuevo capítulo, espero que les haya gustado, también espero poder volver a escribirles muy pronto, les agradezco a las personitas que aún lean la historia y más con las actualizaciones cada año, recuerden que yo siempre termino mis historias, incluso si me demoro 6 años para hacerlo, las amo mis pandicornios.

Jeon Venus se despide, byebye.

Entre asesinos [Book #2] ~K.ThDonde viven las historias. Descúbrelo ahora