Liam era un mago sangre pura. De las familias más ricas e influyentes del mundo, a pesar de ser un gryffindor en toda regla, seguía siendo el orgullo de su familia. El chico era valiente, caballeroso, algo vanidoso y un buen mago.
Había salido de hogwarts hacía unos años, ahora era un famoso jugador de quiddish. Su vida era perfecta, él era el tipo de mago que cualquier sangre pura querría de hijo.
Pero había un problema, que casi nadie sabía. Estaba enamorado y no de cualquier persona, no era un mestiza o sangre sucia, dehecho nisiquiera era mujer ni maga. Solo era un chico común de Bradford.
Liam Payne, estaba enamorado de Zayn Malik, un universitario que se encontró por casualidad en una de sus vacaciones.
Su historia era preciosa, a Liam se le ocurrió vacacionar con sus amigos Harry que era un Ravenclaw y Louis que era un gryffindor como él. En un balneario donde iban muggles, era hermoso el lugar, no era primera vez que salían del mundo mágico obviamente, pero esa vez hubo algo distinto.
Un chico moreno conversaba con un risueño rubio a tan solo unos metros de ellos. En realidad desde lejos Liam lo encontró hermoso, pero no se iba a acercar a un muggle.
Claro que sus planes se vieron frustrados cuando Harry se hizo amigo del rubio y el moreno. Él era muy sociable y no tenía prejuicios hacía nadie, al contrario de Liam.
Louis por su lado ya no tenía esos prejuicios después de que empezó a salir con Harry, el cual solo era un mestizo. Aunque su familia no era muy conservadora y lo aceptaron.
Pero claro un mestizo y un muggle son cosas diametralmente distintas.
El chico alto de ojos verdes les presentó a ambos chicos. Ahí empezó el "problema" de Liam, el chico era perfecto era lo que siempre quiso que nisiquiera sabía que quería.
Estuvieron al rededor de dos semanas ahí, Niall y Harry parecían hermanos. Louis estaba algo celoso de que pasaran tanto tiempo juntos, pero sabía que no se volverían a ver.
Obviamente se siguieron viendo y si no entienden el dilema, sería fácil si sus padres simplemente lo desheredan y lo tirarán a la calle. El ganaba mucho dinero, ya tenía su casa no dependía de ellos.
El problema es que el mundo mágico es un secreto, los humanos no se pueden enterar de él. Para estar con él tendría que renunciar a magia su vida y eso era difícil.
Pero cada día amaba más al chico risueño y sarcástico. No tenía mucho dinero, ni tenía un apellido importante, pero eso no era necesario él lo quería tal cual era.
Sus amigos no estaban muy deacuerdo con su relación la cual iba avanzando rápidamente. Si lo descubrían podían mandarlo a azcaban, no estaba dispuesto a eso.
Por lo que al día después de formalizar su relación con Zayn, su nombre salió en el quisquilloso y en el profeta, justo en la portada.
Liam no era estúpido, antes de hacer aquello vendió su casa en el mundo mágico y todo lo mágico que tenía para cambiar el dinero a dólares para no quedar en la calle.
Se suponía que le tenían que borrar todo rastro del mundo mágico que hubiera en su mente, pero el ser uno de los jugadores más famosos negoció y accedieron a dejarle su memoria si el les daba autógrafos y algunas camisetas.
Quizás era apresurado perder todo por un chico cuando solo tenía 25, pero lo que Zayn le daba lo hacía sentir mejor que toda la magia. No podía volver a su hogar, pero no le importaba. Su hogar estaba junto a su novio.
🌼
Es re corto pero quería saber si les gusta Harry Potter. También pensaba hacer algo de Xmen o súper héroes.
