Capítulo 14| El premio lo obtuvo el perdedor

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¿Dije que tomaría decisiones con lógica?

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¿Dije que tomaría decisiones con lógica?

Sí, eso no estaba pasando, ni de cerca.

Y no era mi culpa.

Era culpa de esta cosa confusa que no me dejaba pensar bien cuando estaba a su alrededor, esa que provocaba cada vez que me miraba de esa manera tan intensa que solo me permitía un pensamiento coherente, pero que no me convenía para nada, 'lo quiero más cerca'.

Quería abrazarlo, quería tocarlo... quería solo respirar con él de nuevo.

Sacudí mi cabeza en un intento de aclararla antes de tocar la puerta del cuarto de Krista.

—¡Adelante!

Al entrar la vi sentada frente al espejo intentando curar su herida. Lo que me recordaba que tenía que asegurarme de que Zagan estaba realmente bien y ningún punto se haya abierto.

«Ahí vas, pensando en él, otra vez»

Mierda.

—¿Estás bien? —preguntó ella al verme en el umbral—. Te ves pálida.

—Sí, sí, déjame hacer eso. —Me acerqué para tomar el papel de sus manos.

—No tienes que —murmuró.

Sin embargo aun así ladeó un poco su cabeza dándome mejor acceso a los puntos que debía limpiar.

—¿Cómo te sientes? —pregunté.

—Bien, en unos cuantos días ya podré volver a mis obligaciones.

—No suenas demasiado emocionada por eso.

Una vez terminé con la limpieza arreglé el vendaje sin apretarlo para no lastimarla.

—Supongo que me mimaste demasiado y ahora echaré de menos tus insistencias de comer en la cama.

No pude evitar sonreír ante su tono acusador.

—No quieres que comience a mimarte, no me soportarías ni dos días —dije en lo que iba a tirar las toallas de papel y vendas usadas.

Ella murmuró algo entre dientes que no alcancé a entender.

—¿Qué decías?

—Nada —contestó levantándose para encaminarse a su cama—. Escuché que saliste con el jefe.

Asentí—. Me mostró los alrededores.

Su expresión se tornó sería de repente.

—Cuando le pregunté por qué te trajo aquí me dijo que no tuvo otra opción —comentó—. ¿Ustedes se conocían?

Me senté a su lado en la cama pensando en una respuesta.

—No como tal —dije, ella alzó las cejas instándome a continuar—. Es más bien una historia de dos niños que se encontraron por casualidad, y que cuyos recuerdos juntos se transformaron en el consuelo del otro.

Zagan (The Hellish Royalty #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora