Capitulo 4

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Te odio, pero sin ti... No se lo que es vivir.

Leander

15 de noviembre de 2020

8 meses.

Ocho meses.

8 meses en los cuales me he autodestruido de forma consciente. Se los efectos secundarios del alcohol en el sistema, se el daño que me causan si lo consumo a diario. Oigo a mi padre, a Theressa y a cualquier puta persona decírmelo, ¡Yo lo se! No soy imbécil, se perfectamente el daño que estoy haciendo.

Acomodo mi cabello azabache con los dedos, buscando mejorar y pulir la imagen de futuro rey, se supone que debo proyectar «Falso, hace mucho tiempo deje de parecer un monarca» 

Salgo a las calles de Londres, rodeado con un pequeño grupo de guardias. El pueblo «Mi pueblo» me evita, he creado una muy mala imagen. Salgo en las primeras planas del London Daily, The Sun y The Times, la sociedad británica es cerrada y fría a la hora de juzgar a los monarcas, y aun siendo una figura de poderío soy ridiculizado de forma mordaz al estar exhibido en una fotografía donde estoy de lleno en el alcohol «Debi prevenirlo, padre ya esta cansado de mis jugarretas»

Una gabardina negra oculta mi vestimenta mientras me desplazó por la sede del consejo legislador, «Viejos ineptos». Muestro mi peor cara a los hombres que se encuentran en los pasillos «Aquí nos odiamos o nos matamos, no hay punto medio. Ellos aun le lloran a Gerald», tomó asiento en el inicio del gran salón «Justo en el lugar de padre. Justo como un rey»

Estos hombres no han parado, todas mis opiniones son inválidas, todos mis argumentos, mis propuestas, todo es ignorado. Mi paciencia tiene un límite y estoy a nada de llegar a el.

La sala se llena con rapidez, los hombres no caben en su asombro de que he llegado sobrio y antes que ellos a una reunión «Malditos, mil y un veces malditos»

Uno de estos ineptos comienza a parlotear sobre algo irrelevante a la verdadera situación «La crisis sanitaria», algún tipo decidió que era buenisima idea, traer drogas adulteradas a Reino Unido para distribuirlas «Estan muriendo de forma sorpresiva».
La mayoría muere a la tercera dosis, pero los que sobreviven generan algún tipo de mutación o algo, que contagia a otras personas, obligándolas a necesitar la droga «a ansiarla, necesitarla para seguir viviendo» la abstinencia esta causando estragos, y el equipo médico se encuentra en crisis al no saber como tratar algo desconocido.

Su palabrería barata me tiene harto, no hacen nada que no sea llenarse los bolsillos con dinero, dinero que le pertenece al pueblo. A ese pueblo moribundo que necesita el dinero, a los médicos que necesitan estudiar lo que sea que esta pasando, pero esta manada de buitres solo busca llenarse la boca de palabras falsas y los bolsillos de oro.

¿Y si nos olvidamos de la Corona?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora